DobleJornada, lunes 1 de diciembre de 1997


iniciativa de la fesebes


Cuota de representación, aún

difícil de aceptar para la UNT


CAROLINA VELASQUEZ


El pasado 28 de noviembre se integró la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), en la que participan contingentes importantes de mujeres --telefonistas, enfermeras, sobrecargos, universitarias--, y si bien en sus principios hay aspectos que implican a las trabajadoras, aún falta un trecho por recorrer para aterrizar varias de sus demandas específicas.

No obstante, hay avances; entre los más importantes se encuentra la propuesta de una cuota del 30 por ciento en los cargos de representación --que se mantuvo al cierre de esta edición--, defensa de cláusulas en los contratos colectivos de trabajo (maternidad y protección a la familia) y el impulso de una estrategia de capacitación para formar nuevos cuadros sindicales.

Cuotas, una propuesta

con candados

Aunque nadie se ha manifestado abiertamente en contra, la propuesta de la cuota del 30 por ciento en los cargos de representación de la UNT ha sido difícil de entender aun por las propias mujeres, asegura Ninel Salcedo, secretaria general del Sindicato Unico de Trabajadores del Colegio de México (Sut-Colmex). Es un acuerdo resultado de un ``arduo'' proceso de discusión en distintas etapas.

La iniciativa surgió del comité de mujeres de la Fesebes. Inicialmente se pensó en una secretaría de la mujer sin lograr un acuerdo, pues se consideró disciminatoria para los varones; luego se analizó la posibilidad de establecer la cuota e integrar una comisión de género.

Aunque esta segunda opción caminó más que la primera, aún tiene limitaciones, señala Salcedo: ``Hay candados, ya que para ocupar un cargo debes estar en un comité ejecutivo, ¿cómo lo cubres?, si tan sólo secretarias generales únicamente hay dos, Alejandra Barrales de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA) y yo.

``Integrar la comisión de género causó polémica, los compañeros decían que era contradictorio con la cuota y que insistíamos en ser tratadas como minoría, no toman en cuenta las condiciones de las mujeres de este país, lo cual hace que existan demandas específicas con un tratamiento particular''.

Pese a las dificultades y la falta de cuadros para cubrir la cuota, llegar a esta propuesta fue un avance, considera Bertha Luján, miembra de la Coordinación Nacional del Frente Auténtico del Trabajo (FAT) y participante del proceso de integración de la UNT, ``independientemente de las condiciones reales para que pueda concretarse o no, es un logro que las organizaciones asuman el compromiso de integrar en la dirección a un mayor número de mujeres; este acuerdo ayudará a potenciar la participación femenina en la UNT''.

Para cubrir la cuota e integrar la comisión de género, Salcedo considera que se debería tomar en cuenta a las comisiones que han trabajado en el proceso de integración de la Unión, ``participan más mujeres y es el espacio donde se realiza el trabajo real de reflexión, de ahí emanan los proyectos y propuestas que al final los secretarios generales revisamos''.

Meta: mejores condiciones

de trabajo y capacitación

Para Luján, la estrategia de la UNT debe considerar como algo fundamental la situación de las mujeres, ``es un sector particularmente afectado por la globalización, la flexibilización laboral y el deterioro del salario; debe haber un plan de acción con medidas concretas para ellas''.

Son, por tanto, vigentes los acuerdos que varias organizaciones de la UNT impulsaron en el Foro El Sindicalismo ante la Nación (enero de 1997), en los que destaca: hacer valer el principio de ``a trabajo de igual valor, igual salario para el trabajo femenil'', impulsar el acceso de la mujer a la capacitación y suprimir disposiciones que con diferentes pretextos limitan el acceso al trabajo de la mujer.

Un problema que enfentamos, expone, es el tipo de trabajo que realizan las mujeres, ya que muchas veces no permite que laboren en un mismo centro de trabajo, limitando su organización y, más aún, su sindicalzación, tal como vendedores ambulantes, maquila que realiza la familia en casa, tabajadoras domésticas, costureras, venta de comida, entre otros, por lo que, sostiene, ``la organización de estas trabajadoras es un segundo paso que la UNT tendrá que dar''.

Pese a estas dificultades, Alejandra Barrales, secretaria general de ASSA y Fesebes, es optimista; en su opinión las mujeres sindicalizadas conservan logros fundamentales en sus condiciones laborales, al menos en los sindicatos que integran la Fesebes, que servirán de pauta para otras trabajadoras: ``Creo que en el terreno de la maternidad y en la atención a la familia es donde más se está trabajando y poniendo énfasis''.

Uno de los logros más importantes del último año para las sobrecargos de Aeroméxico y Mexicana, es la cláusula de maternidad. Luego de realizar una serie de estudios y demostrar que, en promedio, había un aborto en el primer embarazo de una sobrecargo (consecuencia de cambios de presión durante el vuelo) se logró la incapacidad durante los nueve meses previos a dar a luz. Otro acuerdo, aún en proceso, es abrir una guardería que funcione las 24 horas los 365 días del año y donde los niños/as puedan permanecer hasta seis días, mientras sus padres viajan fuera del país.

Para atender asuntos particulares de las trabajadoras, ASSA está impulsando que al menos en las organizaciones que integran la Fesebes se forme una comisión de género. ``El objetivo es que de manera obligada exista una apertura en las revisiones de los contratos colectivos de trabajo y sean estas comisiones, normalmente encabezadas por mujeres, las que defiendan de manera específica su problemática''.

Con el objetivo de registrar las condiciones de las trabajadoras en México, en noviembre pasado la Fesebes inauguró un Centro de Documentación y Estadística para Estudios de Género, en colaboración con el ITAM, la Universidad del Valle de México, la Fundación Friedrich Ebert y el Programa Nacional de la Mujer.

El trabajo de género no puede improvisarse, concluye Barrales, ``no se puede hablar de lo que sentimos o de lo que creemos, sino de lo que en realidad hay, para eso se requieren bases y las vamos a adquirir''.