La Jornada 1 de diciembre de 1997

Grave situación sufren desplazados por paramilitares en los Altos: ONG

Juan Balboa y Elio Henríquez, corresponsales, San Cristóbal de las Casas, Chis., 30 de noviembre Ť Representantes de diversos organismos civiles y de derechos humanos constataron hoy la ``dramática situación'' en que se encuentran cientos de indígenas desplazados de sus comunidades debido a los hechos de violencia que han ocurrido en las últimas semanas en la entidad.

Los organizadores de la misión de observación aseguraron, en su primer día de visita a los municipios más afectados de la zona norte del estado, que el impasse en el diálogo de paz de San Andrés Larráinzar genera ``una situación peligrosa y ha permitido la proliferación de grupos paramilitares que agreden y desplazan impunemente a la población indígena''.

En el municipio de Chenalhó, la diputada perredista Patria Jiménez declaró, tras haber recorrido algunas de las comunidades, que en el lugar ``es urgente hacer algo por los desplazados antes de que comiencen a morirse de hambre y de frío, porque ya no aguantan más''.

Para la legisladora, en esta localidad ``se propicia la descomposición social y la guerra entre hermanos de una forma muy clara''. Aseguró que ``todo pende de un hilo para que la violencia se generalice en las comunidades de los Altos''.

Ante esto, expuso que a su regreso a la ciudad de México presentará a la fracción parlamentaria de su partido en la Cámara de Diputados un informe de la ``emergencia de la situación para que se tomen acciones urgentes en favor de los desplazados y se frene la violencia antes de que sea demasiado tarde''.

Los desplazados zapatistas acusaron en sus testimonios a los militantes priístas, ``que han formado guardias blancas'', de ser los responsables de la situación que están viviendo. Pidieron que ``se haga justicia, se castigue a los responsables'' y se establezcan las condiciones para que puedan retornar a sus viviendas, muchas de las cuales, dijeron, ``ya fueron quemadas y saqueadas''.

Recuento de los desplazados

En Chenalhó, los observadores recorrieron Yochoj, en donde viven hacinados 408 indígenas de la comunidad de Yibeljoj. Por estos alrededores constataron que 237 tzotziles, desplazados de Los Chorros y Yibeljoj, viven en peores condiciones desde mediados de septiembre, y en el barrio de Cholontoj están refugiados 200 indígenas más.

Con la participación de legisladores federales, representantes de organismos de derechos humanos y de la Asociación Nacional de Abogados Democráticos, tres brigadas de observadores para la paz en Chiapas visitaron además los municipios de Sabanilla y Salto de Agua.

Este lunes estarán en las comunidades de Misopa Chinal, en el municipio de Tila, en donde habrán de platicar con indígenas choles desplazados por la violencia generada por grupos paramilitares.

La misión civil de observación para la paz en Chiapas tiene como objetivo recoger durante tres días testimonios sobre la situación de violencia que han generado grupos paramilitares, y constatar la grave situación en que viven miles de indígenas refugiados en las montañas y comunidades vecinas.

Exigen el cese de la violencia

Por otro lado, Barrios y Comunidades de San Cristóbal de las Casas, Alianza Cívica de Chiapas, la organización Las Abejas de Chenalhó, el Centro de Información y Análisis de Chiapas y una veintena de investigadores más hicieron un llamado urgente a los gobiernos del estado y federal para que ``asuman su responsabilidad política'' y pongan ``cese al fuego y frenen la guerra en Chenalhó'', además de crear espacios de distensión y pacificación en las zonas de los Altos y norte de Chiapas.

También pidieron a las comisiones de Concordia y Pacificación y Nacional de Intermediación que intervengan en el reestablecimiento y la búsqueda de mecanismos que permitan la pacificación de ``esta guerra no declarada'' en la entidad.

``De igual manera, hacemos un llamado a la sociedad civil, a las organizaciones no gubernamentales y a los observadores nacionales e internacionales, para que asumamos esfuerzos para exigir a las autoridades el cese del fuego y el hostiga- miento que están padeciendo los indígenas tzotziles del municipio de Chenalhó'', concluyeron.