En tres años, cambio sustancial, ofrece

Ricardo Olayo y Juan Antonio Zúñiga Ť El presidente de la Comisión de Gobierno en la Asamblea Legislativa, Martí Batres, sostuvo que la oposición hoy es gobierno, y por esa circunstancia sus deberes son diferentes y no pueden basarse exclusivamente en la crítica.

Durante la sesión solemne en que Cuauhtémoc Cárdenas rindió protesta como jefe de gobierno, el legislador perredista dijo que el DF será el espacio en el que se comprobará que es factible la ``coexistencia armónica'' entre los gobiernos federal y local, en la distribución de las responsabilidades entre fuerzas políticas de distinto signo.

Independientemente de lo que suceda en la ciudad en los años por venir, la elección del 6 de julio de un gobernante por el voto directo y el reconocimiento del triunfo de un partido de oposición ``es ya un cambio gigantesco''.

El sufragio en favor del PRD, ``fuerza de oposición que estaba al margen de las responsabilidades, redundará en el fortalecimiento de todos los actores políticos, incluido el gobierno federal''.

Lo que se espera de ese partido es el desarrollo de su oferta al electorado, porque ``hoy la oposición es también gobierno y lo es precisamente en el corazón del país''.

Batres fue el responsable de conducir la sesión y el primero en tomar la palabra al filo de las 11 horas en el recinto de Donceles y Allende. A su lado, el presidente Ernesto Zedillo; el titular del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, Jorge Rodríguez y Rodríguez, y el perredista Cuauhtémoc Cárdenas.

Aseguró que en la transformación se percibe la herencia positiva de los estudiantes de 1968, de la insurgencia sindical de los años 70, de la organización vecinal posterior a los temblores de 1985, de la movilización física e intelectual de los universitarios de 1986-87, de las jornadas cívicas de 1988.

El acto, añadió, es el anhelo de varias generaciones al reconocerse los derechos políticos de millones de mexicanos. ``No obstante que la sociedad conquistó esa trascendente reforma, no podemos dejar de advertir el papel que jugó el Presidente de la República, quien no sólo no frenó esa impostergable transición, sino que la hizo suya, con todas sus consecuencias''.

Empiezan los mil 100 días de gobierno

La ciudad tiene graves problemas, pero también futuro. Para su transformación requiere recursos. ``El endeudamiento y el incremento de impuestos son fuentes que en un futuro no muy lejano se agotarán. Tenemos derecho a mayores participaciones federales; los habitantes del DF con su esfuerzo cotidiano hacen una significativa aportación a la economía nacional, justo es retribuirles su trabajo'', señaló.

``Frente a la inseguridad, los habitantes de la ciudad de México debemos decir un ¡ya basta al miedo!, pero bajo ninguna circunstancia en el combate a la delincuencia se avalarán medidas como el toque de queda o la pena de muerte'', advirtió.

Batres aseveró que hay una gran expectativa por el comienzo de la gestión de Cárdenas. ``Se escucha en muchos lados que viene un nuevo tipo de gobierno, basado en la honestidad y el contacto directo con los ciudadanos. Que así sea, es nuestro profundo deseo, pues el gobierno que empieza tendrá una duración de mil 100 días, ciertamente poco tiempo, pero suficiente para instaurar un nuevo estilo de gobernar''.

La relación que establecerá la ALDF, de mayoría perredista, será de colaboración, respeto y autonomía. ``Colaboración, porque a esta ciudad le urge superar el conflicto y sumar los esfuerzos; respeto y autonomía, porque esas son las bases de la construcción de un régimen que se inspira en el postulado constitucional de la separación de poderes''.

Ricardo Olayo Ť El gobierno de la ciudad pondrá en marcha un programa de 100 días que permita establecer una nueva relación con los ciudadanos, y con ello ``consolidar toda la confianza y el respaldo popular que en este momento hay de la gente'', afirmó la secretaria general de Gobierno, Rosario Robles.

Se crearán espacios de participación para conocer la opinión de los ciudadanos a quienes se pedirá que sean los vigilantes de los programas y las metas planteadas. ``Esta es una tarea innovadora que habla de la diferencia del nuevo gobierno y a la que nos vamos a dedicar de manera importante en estos 100 días'', dijo la funcionaria en entrevista.

``Estamos hablando de comités de ciudadanos en las colonias, barrios y manzanas, conformados por gente cuya única identidad es una problemática común; no se busca una identidad política ni partidaria, ni siquiera gremial, sino ciudadana, esa es una respuesta a la necesidad de reunirnos y organizarnos para resolver conjuntamente los problemas que tenemos enfrente'', aseveró.

En la administración pública habrá consejos ciudadanos y en las calles campañas de información casa por casa ``para que la población nos pueda exigir y la consultemos''. Para el caso de las licitaciones ``pensamos hacerlas públicas en un teatro con comités de honorables que las vigilen''; éstas son algunas de las medidas que pretende poner en marcha el nuevo gobierno, cuya base de algunas de las acciones es el documento Una ciudad para todos, que fue la plataforma de campaña de Cuauhtémoc Cárdenas.

En entrevista con este diario, la funcionaria dijo que hay asuntos como el comercio ambulante y la presentación de propuestas de delegados que ocuparán parte del tiempo de la Secretaría a su cargo. ``Queremos que en los primeros meses haya resultados visibles, de impacto para consolidar toda esta confianza que hay de la ciudadanía, todo este respaldo popular; que sientan que realmente hay resultados y que es necesario mantener el apoyo''.

Se tomarán otras medidas de corto plazo que tienen que ver con que la ciudad esté en una condición de ``estabilidad y de gobernabilidad para que no haya puntos críticos que vulneren la actividad económica, social y política de la ciudad''.

Tolerancia ante la crítica

Primer día de gobierno. A su espalda la Plaza de la Constitución. Una decena de fotógrafos le piden que salga al balcón para la foto. Llama a su equipo de colaboradores y prefiere una placa de todos.

-De esta ciudad se ha dicho muchas veces que no tiene gobernabilidad, ¿cuál es su percepción?

-La entiendo como una eficacia en la respuesta del gobierno a los problemas para anticiparse y dar respuesta antes que se conviertan en conflicto. Depende de varios aspectos, por ejemplo de una rigurosa aplicación de la ley. La gobernabilidad implica legalidad, en el sentido democrático del termino; es decir, la ley es para todos,para que todos puedan tener sus derechos a salvo y aplicarla a quienes no actúan en consecuencia, es decir, no a la impunidad.

Además, la ciudad no es gobernable sin la participación ciudadana, se requiere de una política incluyente diferente a la aplicada hasta ahora, para garantizar la participación y el compromiso de la gente, subrayó.

El diálogo también tiene que ver con la gobernabilidad porque es el instrumento fundamental para prevenir problemas, para resolverlos antes de tiempo y también está la tolerancia como una actitud del gobierno.

``Tolerancia ante todas las expresiones sociales y políticas de la ciudad, ante la crítica, ante lo diferente, lo que no es igual que nosotros. En ese sentido realmente queremos que se entienda que es un gobierno para todos, que no es del PRD ni los del PRD, ni para los que votaron por el PRD, sino para todos los millones de mexicanos que deben de ver en nosotros a sus servidores públicos'', dijo Rosario Robles.

No hay dinero que alcance

-¿Se han planteado reglamentar marchas?

-No. Nosotros somos respetuosos y hemos ejercido el derecho a la libre manifestación, hemos defendido el criterio de que los conflictos llegan a tal magnitud por la sordera de las autoridades, pero si tenemos un gobierno de puertas abiertas que sepa resolver, seguramente en esa medida se van a ir eliminando las marchas y mítines. Vamos a tratar de enfrentar los problemas a tiempo, siempre y cuando haya buena voluntad de los líderes y gente que encabeza los movimientos; no descartamos que sean ficticios y a veces inventados para generar una situación de inestabilidad; hasta ahora la actitud ha sido respetuosa y muy constructiva.

-¿Para dar respuesta se requiere de un presupuesto suficiente, o se puede suplir con otros mecanismos?

-Depende en gran medida del presupuesto poder dar respuesta a demandas más sentidas como vivienda, salud, desarrollo, equipamiento urbano, pero no hay presupuesto que alcance para las carencias de la ciudad, para sus rezagos. Lo que tenemos que utilizar es mucha creatividad, potenciar las redes ciudadanas y garantizar que los recursos que hay lleguen; combatir la corrupción y toda la intermediación en programas y proyectos para que cada peso destinado al desarrollo social llegue a la gente.

-¿La creación de nuevas subsecretarías tiene el fin de concentrar o limitar las funciones de la Secretaría de Gobierno?

-No. Tiene que ver en primer lugar con dotar al área política de su papel, que es el prioritario. Siempre dijimos que la política tiene que estar al mando de las decisiones y no la economía, como ocurrió. Va a ser fortalecida el área política, hay un equipo muy fuerte porque sabemos que de la gobernabilidad, de la estabilidad de darle respuesta a los problemas de la gente depende una gestión exitosa y eso lo sabe Cuauhtémoc Cárdenas. Los funcionarios somos compañeros del partido, compartimos una trinchera juntos. Yo voy a estar en los lugares y presente donde haya que estar, no le vamos a rehuir a los conflictos ni se trata de proteger a nadie, sino de trabajar y sacar adelante este reto que tenemos enfrente.