Les vamos a quitar las calles a los delincuentes
Juan Antonio Zúñiga y Ricardo Olayo Ť La ciudad de México ha sido mantenida en la incertidumbre y un creciente deterioro de todo y por todos ``por la incuria, la insensibilidad, la proclividad a la corrupción y/o la ineficiencia de las últimas administraciones'', afirmó ayer Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano en su primera intervención como jefe de gobierno del Distrito Federal.
Ante el presidente Ernesto Zedillo, quien asistió como testigo de honor a la toma de posesión del primer jefe de gobierno electo de la ciudad de México, el pleno de la Asamblea Legislativa del DF y más de 500 invitados --entre quienes se encontraba el ex regente Oscar Espinosa Villarreal--, se comprometió a presentar un informe sobre el estado en que dejó la administración pública la última regencia capitalina, en un plazo no mayor de 8 semanas.
En su discurso, con el que propiamente inició un trayecto de mil 100 días al frente del gobierno de la ciudad, Cárdenas llamó a la población a romper el cerco que ha impuesto la delincuencia --sobre todo la organizada-- a los habitantes del DF.
``Hoy, las calles y banquetas, los parques, los transportes y espacios de convivencia de nuestra ciudad no nos pertenecen. Se ha apoderado de ellos la delincuencia y ello nos agravia a todos, a nuestros hijos, a nuestras familias, a nuestros amigos y compañeros. Es responsabilidad del Estado garantizar la seguridad de la gente. Podemos ganar la ciudad a la delincuencia y le vamos a quitar la ciudad a los delincuentes'', dijo e inmediatamente la gran mayoría de los asistentes irrumpió en aplausos.
Defensa de Debernardi
Defendió el nombramiento del teniente coronel retirado Rodolfo Debernardi al frente de la Secretaría de Seguridad Pública y quien llevará a cargo la restructuración de este cuerpo para reducir sus ineficiencias burocráticas, lograr una mejor y más efectiva presencia territorial y un aprovechamiento más redituable de todos los recursos disponibles.
Sin mencionarlo por su nombre, Cárdenas expresó: ``Hay en él profesionalismo, una vida reconocida por su honorabilidad y compromiso con los habitantes de nuestra capital. Confío en haber acertado con esta propuesta''. Anunció también una restructuración similar en la Policía Judicial y el Ministerio Público.
En su mensaje informó que en el transcurso de diciembre los integrantes de la tercera brigada de policía, formada por elementos procedentes del activo del Ejército, serán sustituidos por miembros de la Policía Preventiva debidamente capacitados, con base en el convenio suscrito entre la Secretaría de la Defensa Nacional y el Departamento del Distrito Federal.
Cárdenas anunció que durante su administración en cada delegación entrarán en operación centros de atención integral para la mujer, la creación de otros que promoverán la incorporación de los niños a las actividades culturales y se brindará atención integral a los niños de la calle mediante el fortalecimiento de las organizaciones civiles que ya trabajan con ellos.
Puntualizó que, con pleno respeto a sus costumbres y tradiciones, su administración trabajará con los más de 500 mil indígenas de diferentes culturas que viven y trabajan en la ciudad en graves circunstancias de marginalidad y desventaja frente a otros sectores de la población, para mejorar sus condiciones de vida y garantizará la protección de sus derechos humanos básicos, con atención particular a los migrantes.
Cárdenas abordó prácticamente todos los problemas que afectan a los habitantes del DF. El impulso al deporte y el mejoramiento de las instalaciones donde se practica, en cuya gestión tomarán parte los deportistas; la promoción de la cultura con más oportunidades a los artistas jóvenes y sus públicos; la salud y a orientar la obra pública donde se obtengan los mayores beneficios sociales y se satisfagan necesidades de los grupos más numerosos de la sociedad.
Sobre los obstáculos que se presentan al inicio de su administración, Cárdenas dedicó una parte de su mensaje a documentar la necesidad de que el gobierno federal absorba la deuda que ha heredado de la última regencia: 12 mil 655 millones de pesos.
Sobre esto expresó: ``Confío en que con la Secretaría de Hacienda, por la actitud que ahí hemos encontrado, se llegue a una solución adecuada para todos, que no implique faltantes que no puedan cubrirse con el flujo previsto de los recursos de la ciudad y que no vaya a obligar el diferimento de alguno o algunos de los proyectos que se ejecutan con base en créditos''.
Bertha Teresa Ramírez Ť El secretario de Seguridad Pública, Rodolfo Debernardi Debernardi, señaló que en 16 días se darán a conocer los nombres de los mandos superiores de la policía capitalina, e indicó que no tiene ``aún un nombre en la bolsa'' para designar al director de Control Operativo, segundo cargo en importancia en esa corporación.
En su primer día de trabajo al mando de la SSP, el teniente coronel despachó varios asuntos y concedió entrevistas a la prensa, en las que reiteró que se restructurarán los mandos superiores que actualmente ocupan militares .
Dijo que habrá cambios y que los policías de carrera y que demuestren capacidad para enfrentar los retos de seguridad de la ciudad ``ocuparán el lugar que les corresponde dentro de esa corporación''.
El cargo de director operativo no está aún decidido, ``lamentablemente no lo tengo en la bolsa, porque hay cargos que se deben meditar, para que funcionen''.
Dijo que ``la seguridad pública enfrenta una situación muy difícil debido a la crisis económica y a la sobrepoblación que afecta al Distrito Federal'', y señaló que se tomarán acciones para abatir los asaltos bancarios y que se buscarán nuevas formas de vigilancia policiaca en las instituciones de crédito.
Indicó que un elemento fundamental con el que debe contar la policía es la colaboración de la ciudadanía: lo primero es lograr que cambie la imagen de los cuerpos de seguridad y para ello es necesario que la comunidad esté conciente de que la policía necesita que se confíe y se colabore con ella para combatir el crimen: ``La marcha del silencio de hace unos días demostró claramente lo que la gente quiere, y por ello yo quisiera que ahora esa marcha se reflejara precisamente en apoyo a la policía denunciando lo que la gente sabe y que a veces teme denunciar''.
Señaló que las instruciones que recibió de Cuautémoc Cárdenas al otorgarle este cargio fue que será necasario ``trabajar fuerte y con responsabilidad''.
Debernardi afirmó que se revisarán salarios y seguridad social de los efectivos policiacos, pero advirtió que estos pasos tendrán que ser muy medidos y serios.
Juan Antonio Zúñiga y Ricardo Olayo Ť Cuando Cuauhtémoc Cárdenas puntualizó: ``el desempleo puede proveer la mano de obra, pero es la corrupción la que pone los cerebros que piensan y dirigen los secuestros, los robos de autos, los asaltos a bancos, la distribución de drogas, y es también la que provee las posiciones que protegen y garantizan la impunidad'', los varios miles de personas reunidos que por primera vez lo vieron en el Zócalo como gobernante, estallaron en aplausos y exclamaciones.
El primer jefe de gobierno electo de la ciudad de México dijo que la impunidad de los delincuentes ``es el mayor estímulo al delito'', por lo que la primera condición para empezar a abatir el desbordamiento de la criminalidad es ``establecer en la conciencia de la sociedad la certidumbre de que la justicia se aplica y se hace cumplir para todos, sin excepción''.
Un Cárdenas relajado fue orador único en el evento en el que lo arroparon en un remolino cientos, miles de personas en cada uno de sus actos de ayer. Comida organizada por su madre, Amalia Solórzano y por la noche cena con los alcaldes extranjeros, aderezada con mariachis, cambiaron la fisonomía del perredista, quien por la mañana en el acto en el que protestó como jefe de gobierno, mostraba su gesto serio.
En el mitin, dijo que la ciudad está insegura, ``desde todos los sectores de la sociedad se alza un clamor que exige protección de vidas y bienes, alto a la ola criminal, alto a la impunidad, castigo a los responsables, justicia para las víctimas, seguridad y justicia para todos, sin excepción. La impotencia de las autoridades, sumada a la ilegalidad de algunos de sus métodos y acciones, dejan ver complicidades, lo que aumenta el sentimiento de desprotección de la gente''.
Acto partidario que le permitió pactar un compromiso con la ciudadanía: ``Ningún funcionario (de su administración) pretenderá hacer valer su cargo para evadir el cumplimiento de una norma, de observación para todos, por mínima que sea''.
La corrupción, la impunidad, su origen, las causas y sus entrelazamientos, fueron una constante en su discurso vespertino, pero también las características que pretende imprimirle a su administración.
Con más energía que por la mañana, explicó que ``la corrupción de funcionarios y servidores públicos es una vieja lacra. Ha significado un fabuloso drenaje de fondos públicos hacia bolsillos privados, el dispendio en obras innecesarias, la especulación urbana, el saqueo al ciudadano para acelerar un trámite, obtener un servicio, eludir un impuesto o evitar una multa''.
Cárdenas regresó al Zócalo por primera vez desde el 6 de julio en que cerró la noche festejando los resultados que le daban el triunfo. La de ayer no fue la concentración de la protesta por la derrota electoral, sino de la una fiesta.
La tarea no es de un día ni de un año. ``Nadie puede prometer milagros y quien en el pasado lo hizo ha fracasado. La labor será ardua, encontrará resistencias, enfrentará poderosos intereses creados y necesitará, sobre todo, de la participación de la sociedad''.
Indicó que el desempleo y bajo ingreso han incidido fuertemente en el deterioro de la calidad de vida en la ciudad, y en el crecimiento del comercio ambulante. En este sentido fue claro: no está en manos del gobierno de la ciudad modificar la política económica nacional que es, sin duda, la principal causante de esta situación.
Pero se comprometió a que en lo que esté al alcance de su gobierno se llevará a cabo una regularización del comercio ambulante a través de su inserción en el régimen fiscal, el reconocimiento de los derechos de los comerciantes registrados, su ubicación en zonas adecuadas para el público y para ellos mismos, y la regularización de su actividad, incluido el cese de las extorsiones de que haya sido víctima por parte de inspectores.
Triunfo Elizalde Ť Es alentador que Cuauhtémoc Cárdenas asuma el compromiso público de combatir a la delincuencia organizada y a la corrupción en las esferas de gobierno capitalino, ``de manera compatible con el respeto a los derechos de las personas'', coincidieron Oscar González, de la Academia Mexicana de Derechos Humanos, y Benjamín Laureano Luna, del Frente Mexicano Pro Derechos Humanos.
Señalaron que una forma de alcanzar esos objetivos ``es mediante la consulta y el diálogo efectivo con la sociedad, para encontrar formas de participación ciudadana en un proceso que, desde el principio, genere confianza en la voluntad política de mejorar la impartición de justicia y la lucha contra impunidad y corrupción''.
González señaló que hay ciertas tareas que corresponden ``por origen y vocación a la sociedad civil más que a los partidos, los sindicatos o las corporaciones patronales, como son las de promoción y defensa de los derechos humanos, por lo que las organizaciones no gubernamentales esperamos que nuestros trabajos y esfuerzos sean reconocidos y alentados por el nuevo gobierno del Distrito Federal''.
Lo contrario, pretender cancelar espacios ``genuinamente conseguidos por las ONG o rivalizar con su trabajo, sería un error desde posiciones públicas o gubernamentales'', subrayó.
Laureano Luna dijo por su parte que el mensaje de Cárdenas ``es alentador y nos satisface que se preocupe por erradicar males como la delincuencia y la corrupción salvaguardando el estado de derecho y los derechos humanos''. Asimismo, agregó, es de esperar que se investigue a fondo el asesinato de Abraham Polo Uscanga y otros casos similares, donde han sido visibles la prepotencia y la impunidad a niveles oficiales.
El dirigente del Frente Mexicano Pro Derechos Humanos hizo notar: ``Es impostergable que las organizaciones no gubernamentales vigilen la actitud del Ministerio Público, aspecto que en mucho contribuirá a que los delincuentes respondan ante un juez penal de los delitos cometidos en contra de la sociedad.
Humberto Ortiz Moreno Ť El procurador Samuel del Villar anunció que revisará junto con su equipo los casos más relevantes y complejos que le tocaron a la administración pasada, como las ejecuciones de la Buenos Aires y el homicidio de Abraham Polo Uscanga, con el fin de que ``se haga justicia''.
``Voy a familiarizarme con los expedientes y las indagatorias, analizaré los desgloses y no obstruiré la procesos en curso'', garantizó en su primera conferencia de prensa luego de tomar posesión del cargo durante las primeras horas de ayer, al cabo de una ceremonia a la medianoche que fue precedida de varias horas --desde el mediodía-- de presentaciones y recorridos por las instalaciones centrales de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal.
Determinó que sus prioridades serán combatir el crimen organizado y su vinculación con las autoridades, pues ese fenómeno constituye el eje de la criminalidad que azota a la ciudad y ha llegado a proporciones que rebasan la mera delincuencia común.
Hay una veintena de tipos penales que más han contribuido a la inseguridad que vivimos, definió.
Fundamental será, abundó, resolver el divorcio existente entre las policías Preventiva y Judicial, cuyas soluciones a este conflicto han sido hasta ahora inconstitucionales.
Si no se previene la delincuencia, advirtió, el hampa finalmente termina por desbordar los marcos institucionales diseñados para perseguirla, pues ``no solamente se puede reaccionar ante ella''. Ofreció dar solidez en las consignaciones y en la integración de averiguaciones previas.
Prometió proceder con energía en contra de cualquier funcionario de la PGJDF que infrinja la ley y traicione la institución y a la sociedad.
Del Villar presentó a los cuatro subprocuradores que lo acompañarán durante su gestión --dos mujeres y dos hombres--, exaltando su capacidad, probidad, honestidad y prestigio en sus respectivos ámbitos de trabajo.
Planteó que la responsabilidad de la Procuraduría capitalina es identificar, investigar y perseguir ante los tribunales a la delincuencia, de acuerdo con la peligrosidad que tiene para la sociedad. Y ese objetivo, subrayó, es el que inspirará la conducción de la PGJDF.
Desde el punto de vista orgánico e institucional, definió que la concepción que planteó el jefe de gobierno capitalino desde su campaña es que la institución es una sola pieza de un sistema integral de seguridad.
De ahí que se comprometiera a integrar funcionalmente a la Procuraduría con el resto de las demás instituciones para garantizar la seguridad de la población a partir de la ley y de la justicia y bajo la dirección del Ministerio Público.
De igual forma, Del Villar precisó que se dará solidez a la integración de las averiguaciones previas y en la consignación de las conductas criminales.
``Que toda averiguación previa que sea consignada ante los tribunales entre porque efectivamente se ha cometido un ilícito, y que la comprobación de ese delito no vaya a ser derrotada posteriormente en el procedimiento penal'', subrayó.
Y esto, insistió, requiere de un gran esfuerzo de consolidación dentro de la propia institución para superar una serie de limitaciones históricas de todo orden.
``Tengan ustedes la convicción de que cumpliremos con este objetivo'', asentó.
Fundamental, la justicia de barandilla
Para el procurador Del Villar, la barandilla será fundamental durante su gestión, porque es el acceso primario de la sociedad a la concepción de justicia que le debe el Estado. Ha de funcionar, sustentó, con dignidad y eficacia.
Afirmó que las agencias investigadoras del Ministerio Público tendrán que brindar un trato respetuoso a la población, pues si no existe la tramitación debida de conductas que ofenden y victiman a la sociedad, ``no es posible pensar que alguna vez el delito podrá ser prevenido o sancionado''.
El abogado de la ciudad aseveró que la corrupción es la negación de la ley y de la justicia, así como el punto medular bajo el cual se ampara la delincuencia para violar la ley y asegurar la impunidad.
Para cumplir con todos estos compromisos, Samuel del Villar no habló de corto, mediano o largo plazos, pero sí de que desde ayer mismo trabajará para conseguirlos.
Acabar con prácticas que han desviado la funcionalidad de la justicia es el imperativo inmediato, concluyó, y de paso pidió el apoyo de los medios de comunicación para el buen desempeño de su labor bajo una relación franca y respetuosa.