Cuestiona Felipe Calderón el nombramiento de Rodolfo Debernardi

Daniela Pastrana Ť El líder nacional del PAN, Felipe Calderón Hinojosa, se pronunció ayer en favor de que se establezca la cadena perpetua para los secuestradores que mutilen o asesinen a sus víctimas.

``La cadena perpetua es una sanción que se vuelve indispensable para frenar a la delincuencia'', dijo el panista, quien aclaró que se trata de una posición personal y no del partido. ``No es una posición del partido, es una posición personal, que se habrá de debatir y asumo democráticamente el riesgo de que mi partido la acepte o la rechace'', indicó.

Ante unos 900 militantes del DF, Calderón Hinojosa sostuvo que el aumento de secuestros en la ciudad ``requiere y reclama acciones decididas y urgentes'', y advirtió que los panistas tendrán que entrar a la discusión de temas polémicos como el de la corrupción y la responsabilidad policiaca.

Destacó que desde la oposición exigirán cuentas ``a quienes estuvieron con Durazo, si sabían cómo estuvo la matanza del río Tula, y a quienes estuvieron con Javier Coello Trejo, de vínculos de este negro personaje con el narcotráfico o con los violadores que era su propia escolta''.

Calderón arremetió contra el jefe de gobierno del DF, Cuauhtémoc Cárdenas, al insistir en que con el nombramiento de Rodolfo Debernardi, el perredista ``ha comenzado a traicionar'' sus propios compromisos. ``El nombramiento además, ofende a muchos perredistas que incluso no compartiendo sus puntos de vista, no sólo fueron criticados, sino que fueron objeto de persecución'', insistió.

Cabeza

En su discurso en la Asamblea Regional del PAN-DF, Calderón llamó a los militantes a dejar atrás el capítulo del 6 de julio y no tomarlo como pretexto para la ``inacción política''.

``No hay espacio para el tedio, para la justificación o el pretexto, o nos ponemos a trabajar o nos ponemos a trabajar; no hay alternativa en ello'', dijo el panista.

``En el 2000 vamos a ir por la revancha'', aseguró, ``en el 2000 vamos a gobernar no sólo la ciudad de México, sino la República, siempre y cuando cada quien se se ponga a trabajar, porque no hay otra alternativa para el Partido Acción Nacional''. Afirmó que la ciudad espera a un PAN renovado, firme y decidido. ``No es ciertamente nuestra peor época'', agregó.

Por su parte, el líder estatal panista, Gonzalo Altamirano, destacó que ``hoy son tiempos de cambios'' para el PAN, que debe reconocer sus errores y responsabilizarse de ellos.

``Lo que ayer era un modelo de testimonio o de trabajo político hoy ya representa un esquema estereotipado, anacrónico, que requiere renovarse'', sostuvo Altamirano.

Indicó que se ha propuesto cuatro grandes líneas de trabajo político para el DF, que son el crecimiento del partido en cantidad y calidad; la presencia e inserción en la sociedad; la reorganización interna del Comite Directivo Regional y la restructuración del partido en el DF.

Informó además que en enero inciará una intensa campaña de afiliación en el DF y que también en breve se harán cambios importantes de personas y funciones en el Comité Directivo Regional.