CNBV: Atlántico y Promex, ``bajo observación''

Roberto González Amador Ť En lo que parece un capítulo más de una historia interminable, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) colocó a los bancos Atlántico y Promex, séptima y octava instituciones de crédito más importantes del país, respectivamente, en una ``lista de observación'', ante una caída en sus índices de capitalización después de una serie de pérdidas operativas.

La determinación de la CNBV, confirmada ayer por directivos de ese organismo gubernamental, encargado de la supervisión del sistema financiero, ha acelerado las negociaciones que mantienen los directivos de Atlántico y Promex para vender sus activos a nuevos socios.

Después de conocer que Banco del Atlántico había sido puesto bajo observación de la CNBV, los accionistas del Grupo Bursátil Mexicano (GBM), controlador de esa institución de crédito, sostuvieron una junta extraordinaria, a finales de la semana pasada, en la que acordaron otorgar el poder a su consejo de administración para vender el banco.

La misma semana pasada, Banamex, que era el principal postor por la compra del Atlántico salió de la escena.

El martes pasado, Roberto Hernández, director de Banamex, el primer banco del país, confirmó que no estaba interesado en adquirir Banco del Atlántico, aun cuando reconoció que había sostenido negociaciones en ese sentido con el grupo de inversionistas encabezado por Alonso de Garay, presidente de GBM.

Hace un mes, auditores de Banamex habían comenzado una revisión de los estados contables, financieros y las declaraciones de impuestos de Banco del Atlántico, con miras a consolidar la venta. Después de que Roberto Hernández anunció que Banamex dejaba de tener interés por adquirir esa institución, apareció en la escena otro postor: Banco Bital, encabezado por Antonio del Valle Ruiz, ha tomado el lugar de Banamex en la mesa de negociaciones.

Directivos de Bital, que pidieron no ser identificados, comentaron ayer que se espera que la negociación con los accionistas de GBM sea a finales de diciembre de este año o, a más tardar, en enero.

Atlántico es el séptimo banco más grande del país, con 231 sucursales, activos totales por 5 mil 500 millones de dólares y capital contable, al 30 de septiembre, de 346 millones de dólares. En el último año adquirió los bancos Interestatal y del Sureste, dos pequeñas firmas regionales.

Una razón de peso

El otro objetivo de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores es consolidar Banca Promex, presidida por Eduardo A. Carrillo, y que tiene su sede en Guadalajara, Jalisco. Directivos de la comisión informaron ayer que el gobierno ha ordenado a ese banco encontrar un socio para finales de 1998, debido a que enfrenta algunas dificultades para alcanzar los estándares de eficiencia requeridos por la autoridad.

Según fuentes del sector, Bancomer, el segundo banco más importante del país, se perfila como el principal candidato para adquirir Banca Promex.

Sin embargo, Bancomer y Banca Promex se negaron ayer a comentar el caso y rechazaron que se encuentren en tratos para una transacción de este tipo.

Banca Promex, el octavo banco más importante del país, adquirió en 1996 la red de sucursales de Banco Unión y este año comenzó una agresiva campaña publicitaria para asegurarse una mejor posición en el mercado.

Analistas financieros comentaron ayer que la venta de Atlántico y Promex se dan por un hecho en los mercados, mientras confirmaron que ambas instituciones fueron puestas bajo observación de la Comisiión Nacional Bancaria y de Valores.

``La tendencia hacia la consolidación en el sistema bancario mexicano estaba lejos de haber finalizado. Sabíamos que tanto Banco del Atlántico como Banca Promex serían objeto de una adquisición, dada su deteriorada condición financiera'', comentó Patrick Boucher, analista bancario de Santander Investment.

``Atlántico y Promex tienen altos niveles de cartera vencida. Por ello, esperaríamos que el gobierno proporcionara algún tipo de ayuda para que las adquisiciones fueran más atractivas'', agregó Boucher.

De acuerdo con el último reporte de la CNBV, la cartera vencida de Banco del Atlántico es de 4 mil 498 millones de pesos, el doble de la que tenía en diciembre de 1995.

Mientras, a junio de este año la institución tenía un faltante de 2 mil 406 millones de pesos en sus reservas para enfrentar riesgos crediticios.

A su vez, Promex acumulaba una cartera vencida de 5 mil 604 millones de peso, cuatro veces más que la de finales de 1995. También tenía un faltante de 2 mil 755 millones de pesos, para cubrir sus reservas para riesgos crediticios.