El gobierno no dilapida recursos, sostiene Zedillo
Rosa Elvira Vargas, enviada, Misantla, Ver., 12 de diciembre Ť Al reanudar sus visitas a los estados de la República luego de varios viajes al extranjero y de repetidas visitas a Oaxaca y Guerrero tras el paso del huracán Paulina, el presidente Ernesto Zedillo desacreditó a quienes aseguran que los recursos que recibe el gobierno se dedican al desperdicio o al dispendio. La mayoría de ese dinero, aseguró el Ejecutivo, se destina a fortalecer, ampliar y extender la política social del Estado mexicano.
Son recursos, afirmó, para construir escuelas, para que los servicios de salud lleguen a millones de personas, para la introducción de servicios elementales como el agua potable y la electrificación... En síntesis, son recursos del propio pueblo para regresárselos en obras que significan la diferencia en términos de un mejor nivel de vida.
Una mañana de norte y frío recibió a Zedillo en el puerto de Veracruz. Un temporal azota toda la entidad. Y aquí, en la sierra, la neblina puso un velo de blancura en el panorama y la llovizna se colaba por todos lados. Pero también había ganas de hacer profesión de afectos, y el Presidente aprovechó la estancia para decir que Patricio Chirinos es ``mi amigo de muchos años, mi amigo de ahora y mi amigo del futuro y de siempre''.
Orgullosos, como son, los misantecos -``no misantlecos, como nos dice el gobernador''- salieron a las calles para recibir al visitante. Otros más se habían congregado en el nuevo tecnológico, en la casa de la cultura y en el nuevo hospital regional. Saludaban al Presidente quién sabe si antes o después de ir a misa en el día de la virgen de Guadalupe; algunos cargaban a sus pequeños juandiegos.
Se veían contentos pero sin alardes. En esta tierra de donde han salido brillantes periodistas no hay retórica y sí mucha identidad. Simplemente decían: ¡bienvenido a Misantla! El Presidente se sentía contagiado. En su mensaje, hizo que el secretario de Educación Pública, Miguel Limón Rojas, se comprometiera a equipar cuanto antes los laboratorios y salas de cómputo del tecnológico y a enviar libros y equipo de video para la casa de la cultura.
Justamente porque lo que sobra en Veracruz es política, y como ya se acerca la fecha de conocer el nombre del candidato del PRI a la gubernatura, los reporteros locales quisieron conocer el punto de vista de uno de los posibles aspirantes al que pocas veces ven por acá: Limón Rojas. El funcionario, sin embargo, les dijo a todos que ``ésta no es la mía''.
De regreso al puerto de Veracruz, Zedillo visitó fuera de programa la planta de Aceros Mexicanos del Golfo, y de ahí fue a San Juan de Ulúa, la vieja fortaleza que hoy acusa un gran daño en sus cimientos porque recibe las aguas contaminadas de la bahía.
Es una obra larga y cara, y la primera etapa se entregará el 6 de enero.
Antes de volver a la ciudad de México, el Presidente comió en privado con los dirigentes de los partidos políticos de Veracruz -excepto el PRD que está en renovación de líderes- y con representantes de diversos organismos locales.