La Jornada 20 de diciembre de 1997

Afinaron Fidel Castro y líderes católicos detalles de la visita papal

Afp, Dpa, Reuter y Pl, La Habana, 19 de diciembre Ť El presidente de Cuba, Fidel Castro, se reunió con la jerarquía católica de la isla, encabezada por el cardenal Jaime Ortega, para afinar los detalles de la visita del papa Juan Pablo II, mientras que en Miami la arquidiócesis católica canceló este viernes la peregrinación en crucero a La Habana, tras enfrentarse con la oposición cubana en el exilio.

La jerarquía católica cubana se declaró satisfecha con el encuentro sostenido con Castro, al considerarlo positivo en el camino para mejorar las relaciones.

Ortega expresó su satisfacción por el encuentro, al acudir al aeropuerto a recibir el papamóvil que usará Karol Wojtyla durante visita prevista del 21 al 25 de enero próximo.

Indicó que durante la entrevista, Castro y los representes de la Iglesia católica hablaron de un proceso de mejoramiento de las relaciones Iglesia-Estado, en la que además se abordó con ``precisión y objetividad'' todos los detalles referentes a la visita papal.

Resaltó el prelado que después de ésta, habrá otras reuniones con Castro tras la visita de Wojtyla.

Añadió que también se le entregó al presidente cubano el mensaje papal para la celebración de la 31 Jornada Mundial por la Paz, cuyo tema es ``De la justicia de cada uno nace la paz para todos'', dirigido en especial a los jefes de Estado.

El encuentro, que comenzó la tarde del jueves y concluyó esta madrugada, fue el primero que mantuvo Castro desde hace 12 años con los líderes católicos, aunque el cardenal reconoció que se han mantenido algunos contactos con el líder cubano.

Hace unos días, el presidente Castro declaró día festivo el 25 de diciembre, con carácter de excepcional para este año, como un gesto ante la visita papal.

Oficiales cubanos y las autoridades de la Iglesia recibieron un papamóvil de origen canadiense, junto a otro vehículo blindado destinados a brindar seguridad al Papa en sus desplazamientos por territorio cubano.

Triunfa la presión anticastrista

En Miami, la arquidiócesis de la Iglesia católica decidió cancelar el crucero que llevaría peregrinos a La Habana, luego de dos semanas de presiones por parte de las organizaciones anticastristas.

El arzobispo John C. Favaloro explicó que la decisión fue tomada luego de comprobar que el crucero se había transformado en fuente de profundas discordias en Miami, donde reside un millón de cubanos exiliados.

Las organizaciones anticastristas habían lanzado una fuerte campaña contra el crucero al advertir, entre otras cosas, que los cubanos exiliados no pueden volver a su patria mientras la ``dictadura siga en el poder'' en Cuba.

También argumentaban que el crucero representaría una fuerte inyección de divisas para la tambaleante economía del gobierno cubano.

Favaloro, quien se reunió ayer con líderes del exilio cubano, dijo que el viaje se había convertido en una fuente de tensiones en la comunidad católica de Miami, pero manifestó que tratará de dirigir un peregrinaje a Cuba por otro medio.

Los anticastristas sostuvieron que al realizar el crucero, la Iglesia estaría promoviendo la falsa imagen de que Cuba es una sociedad libre que permite a los exiliados ir y venir sin problemas.

La Iglesia pagó por adelantado el arriendo del barco a una empresa naviera noruega especializada en cruceros por el Caribe, y hasta ahora se habían vendido más o menos lo estimado a mil pasajes que representan entre 600 y mil dólares por persona.

Por otro lado, el canciller Roberto Robaina reconoció el esfuerzo de los emigrados cubanos que hace años se arriesgaron a viajar a Cuba contra las leyes estadunidenses, para sostener las primeras reuniones con autoridades de la isla en aras de la normalidad de vínculos, durante el comienzo de un foro al que asisten emigrados radicados en Estados Unidos.

El líder opositor cubano en el exilio, Eloy Gutiérrez Menoyo, abogó porque Cuba y Estados Unidos hagan mutuas concesiones para acabar con su largo conflicto de casi cuatro décadas.