La Jornada 26 de diciembre de 1997

Capturan a presuntos agresores al cruzarse con el cortejo fúnebre
Incumplió el gobierno local en proteger a desplazados, dice Roccatti
No tropezar con la piedra del odio y la venganza, pide Samuel Ruiz

Juan Balboa, corresponsal, Acteal, municipio de Chenalhó, Chis., 25 de diciembre Ť A escasos 200 metros de donde fueron ejecutados, los 45 cuerpos mutilados, destrozados y descompuestos de los indígenas recibieron sepultura este jueves después de una misa en la que el obispo de San Cristóbal de las Casas, Samuel Ruiz García, llamó a la comunidad y a los familiares de las víctimas a ``no tropezar con la piedra del odio y la venganza'', y pidió a quienes perpetraron el crimen que ``busquen la paz con Dios y sus conciencias''.

Ruiz García decretó simbólicamente el ``luto del país'' por la masacre de los indígenas que ``buscaron siempre la paz'', y recordó que ese hecho ``no había pasado'' ni en la guerras mundiales. El obispo consideró a ésta ``la Navidad más triste y dolorosa de su vida'', pero aun así pidió buscar la distensión en Chiapas .

El también presidente de la Comisión Nacional de Intermediación (Conai) apuntó que el agudizamiento de la violencia en Chiapas tiene que ver con la interrupción del diálogo en San Andrés Larráinzar entre el gobierno y la guerrilla zapatista, así como con el crecimiento de los ``grupos paramilitares que nos dijeron que no existían, pero aparecieron en Chenalhó''.

Topa el cortejo con varios de los presuntos asesinos

A partir de las ocho de la mañana, vestidos con sus ropas tradicionales, cientos de tzotziles que la noche anterior velaron a ``sus muertos'' hicieron el recorrido fúnebre desde Polhó hasta Acteal.

Al frente, dos niños cargaban una leyenda que, según los indígenas, explicaba el momento que estaba viviendo el pueblo de Chenalhó: ``Herodes quiso, ¡pero no pudo!, acabar con la criatura. Hoy tampoco lo logrará, aunque tantos inocentes tengan que fecundar con su sangre este suelo duro y árido''.

Habían recorrido durante 20 minutos por la carretera entre las cabeceras municipales de Chenalhó y Pantelhó -cerca de este último se ubica Acteal-, cuando un camión de tres toneladas detuvo su marcha cerca de ellos. Cinco familiares de los indígenas asesinados señalaron de inmediato a algunos de sus ocupantes como parte de los grupos paramilitares que acribillaron a las 45 personas de Las Abejas.

El camión fue registrado y 21 de sus pasajeros -entre ellos uno con chaleco antibalas- fueron obligados a bajar -tres de ellos fueron arrastrados de los cabellos- para ser entregados como ``asesinos'' a Jorge García Sánchez, agente del Ministerio Público Federal.

El gobierno de Chiapas incumplió medidas cautelares, dice Roccatti

Mireille Roccatti, presidenta de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), aseguró hoy en el entierro de los 45 indígenas de Acteal que el gobierno de Julio César Ruiz Ferro logró pocos avances en cuanto a las medidas cautelares que debió realizar con los desplazados por la violencia.

Roccatti dijo que existió petición expresa de la institución a su cargo al gobierno del estado para proporcionar, ``en forma inmediata'', ayuda humanitaria a la población desplazada por la violencia política en el alteño municipio de Chenalhó.

La funcionaria recordó que también se solicitó realizar ``las gestiones necesarias para que los desplazados pudieran regresar a sus comunidades de origen, con plenas garantías para su seguridad personal durante su retorno y permanencia en sus hogares.

La encargada de la Comisión Nacional de Derechos Humanos se presentó en el entierro de los 45 personas masacradas el pasado 22 de diciembre. Sin embargo, se negó a proporcionar informes sobre el avance de la investigación de la matanza, y señaló que se darán a conocer en los próximos días.

El alcalde de Chenalhó, agradecido

El alcalde de Chenalhó, el priísta Jacinto Arias Cruz, agradeció al presidente Ernesto Zedillo ``su apoyo e intervención para esclarecer los hechos violentos del pasado lunes en este municipio''.

En una carta dirigida al jefe del Ejecutivo federal, el presidente municipal también dio las gracias al gobernador Ruiz Ferro ``para llegar al esclarecimiento de todos los hechos de violencia registrados en Chenalhó''.

En su comunicado, el alcalde priísta recordó que desde los hechos ocurridos el 20 de mayo pasado han sido persistentes los enfrentamientos entre indígenas de la región, y manifestó que las 45 personas ``fueron masacradas por criminales''.