La Jornada 28 de diciembre de 1997

Admite Conasida retraso de cuatro años en cifras sobre enfermos

Angeles Cruz Ť Con el Registro Nacional de Casos del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (sida) en México, en realidad lo que se tiene es un panorama de lo ocurrido hace cuatro años, de tal forma que las cifras sobre el número de enfermos no puede tomarse como algo verídico porque no es una imagen actual, admitió Griselda Hernández, secretaria técnica del Consejo Nacional para la Prevención y Control del Sida (Conasida).

Hasta noviembre se tenían reportados 33 mil 321 enfermos acumulados desde 1983 en que se detectó el primer caso; sin embargo, tomando en cuenta el subregistro de 35 por ciento, se estima que unas 52 mil personas han sido afectadas por la pandemia del siglo.

También se refirió al hecho de que todavía no se reporta a los seropositivos, quienes aunque no manifiestan la enfermedad, son transmisores del Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) causante del sida.

Estos aspectos son algunos de los obs-táculos para abatir el incremento en el número de infectados y enfermos, pues mientras no se conozca quiénes son y en dónde están, será más complicado implementar las medidas preventivas y de control, han reconocido diversas autoridades del sector salud.

Otro de los problemas en el registro de casos lo constituyen los dos mil 300 enfermos cuya evolución es desconocida, es decir, 6.88 por ciento del total. En tanto, las estadísticas señalan que 54 por ciento de los afectados ya ha fallecido (17 mil 937 personas), mientras que 39.29 por ciento aún vive, (13 mil 91 individuos).

En cuanto a los seropositivos, se calcula que por cada caso de sida hay entre tres y cuatro personas que viven con VIH, lo que permite suponer que hay entre 156 mil y 208 mil sujetos en esta situación que lo desconocen; es decir, podrían estar transmitiendo el virus a otras personas.

Por otra parte, la Encuesta Mundial sobre Sida 1997, realizada por la empresa fabricante de condones Durex, señala que los mexicanos son los más preocupados por no contraer la enfermedad. El 65 por ciento de los participantes en el cuestionario manifestaron esta actitud.

En tanto, 74 por ciento de los encuestados en nuestro país dijo haber modificado sus actitudes sexuales para protegerse del contagio del virus, pero de este porcentaje, sólo 36 por ciento ha incrementado significativamente el uso del condón en sus relaciones sexuales.

Durante 1997, la Secretaría de Salud impulsó la tercera fase de la campaña de prevención del VIH/sida, en la que el aspecto sobresaliente es la promoción abierta del condón, debido a que es la medida que hasta ahora ha demostrado mayor efectividad contra el contagio cuando se utiliza adecuadamente.

Los cuestionarios aplicados por Durex a 10 mil personas sexualmente activas en 14 países, señalan que 97 por ciento de la población está consciente de que el sida es una enfermedad sexualmente transmisible y 96 por ciento sabe que el condón protege del contagio.

Sin embargo, sólo 51 por ciento ha modificado su vida sexual y de ésta porción 22 por ciento utiliza más el condón. Un 10 por ciento disminuyó su número de parejas sexuales, 19 por ciento se volvió más cuidadoso en escoger a sus parejas, 14 por ciento actualmente usa un condón en cada relación sexual y 8 por ciento se asegura de usar el preservativo en la mayor parte de sus relaciones sexuales.