Masiosare, domingo 4 de enero de 1998
``Jorge del Valle hizo un breve recuento de la actuación gubernamental desde que se iniciaron las negociaciones con el EZLN.
``Expuso que la constante de marzo-abril a noviembre de 1994 fue la idea estratégica de contención del conflicto. El gobierno del presidente Salinas buscó, después de intentar una negociación y que ésta fracasara con el primer comisionado, que el conflicto no adquiriera mayor influencia política ni se extendiera a nivel territorial.
``Con el presidente Zedillo, añadió, se registra una perspectiva de reducción del conflicto. Se pasa de la contención a la reducción, en lo territorial, en lo social, en lo político local. Esta lógica estratégica consiste en darle a los actores del conflicto el tamaño que tienen: no regateárselo, pero tampoco exagerarlo.
``Eso, dijo, es lo que ha pasado con el EZLN, con la Comisión Nacional de Intermediación (Conai), con la Asamblea Democrática Estatal del Pueblo Chiapaneco (Adepch) y con otros. Es una lógica de reducirlos hasta que tengan su tamaño real.
``ÇHoy vemos que el peso que tiene actualmente el conflicto chiapaneco en la agenda nacional es menor y ello obedece a líneas estratégicas decididas y puestas en práctica por el gobierno federal, además del propio contexto que tiene el país, que no encuentra en el proyecto del EZLN una respuestaÈ''.
Jorge del Valle, integrante de la delegación gubernamental para el diálogo de paz en Chiapas, en entrevista con El Nacional, 4 de diciembre de 1995.
Emilio Azcárraga Jean recibió la llamada de su tocayo de apellido Chuayffet. Palabras más o menos, el hasta ayer secretario de Gobernación le explicó que no se debía transmitir la segunda parte del programa de Ricardo Rocha sobre los desplazados de Chenalhó: ``Es un asunto de la seguridad del Estado''. La segunda parte de un programa que sacudió al país nunca salió al aire.
¿Usted lo vio pegado inseparablemente, como un defensa central, codo a codo en todo momento junto al señor presidente, durante los aciagos días de Paulina en Acapulco? ¿Usted lo recuerda, enojándose incluso bastante más que el señor presidente, cuando éste a punto estuvo de ser interpelado por Félix Salgado Macedonio, senador por el estado de Guerrero, donde por cierto queda Acapulco? ¿De veras usted no lo registra? Se trata de Guillermo Ortega Ruiz, el periodista imparcial y objetivo que dentro de algunos días, y por sugerencia del señor presidente, entrará en lugar de Jacobo Zabludovsky en el programa que reemplazará al irremplazable 24 Horas.
Fue parte de su gabinete en Sinaloa y él lo trajo al equipo de Ernesto Zedillo.
La llegada de Francisco Labastida a la secretaría de Gobernación es, dicen, una suerte de regreso de Esteban Moctezuma.
Lo que en un ex presidente era popularidad, en Cuauthémoc Cárdenas es populismo. ¿O los críticos del jefe de gobierno del DF ya olvidaron las ocasiones que el Gran Salinas durmió en Chalco?