Aceptaría reunirse con Marcos; sí hay priístas provocadores

Jesusa Cervantes Ť El secretario de Gobernación, Francisco Labastida Ochoa, se dijo dispuesto a reunirse con el subcomandante Marcos para lograr una solución al conflicto de Chiapas; aceptó que grupos priístas están provocando hechos violentos en ese estado y sostuvo que Pedro Joaquín Coldwell precisó que la información dada a la diócesis de San Cristóbal sobre lo que acontecía en La Realidad, no fue la incursión del Ejército Mexicano.

Sobre el posible encuentro con Marcos, Labastida Ochoa aseguró --en diversas entrevistas-- que no le interesa el protagonismo sino alcanzar una solución para el estado de Chiapas. ``No me interesa la foto ni el protagonismo, lo que me interesa es que tengamos las condiciones para llegar a un acuerdo; es lo de menos si está presente el secretario, un subsecretario, un comisionado para la paz o lo que sea; lo que me interesa es llegar a acuerdos, no a la foto'', insistió.

El funcionario señaló que, previo al encuentro, deben sentarse las condiciones ``para que la reunión tenga resultados, y la base tiene que ser que haya un desarme'', entre otros planteamientos. Como se recordará, el EZLN no está de acuerdo con abandonar las armas antes de firmar acuerdos de paz.

Labastida se refirió también a la masacre de Acteal --el pasado 22 de diciembre-- y a los diversos asesinatos que han ocurrido en Chenalhó en los últimos meses. Incluso admitió que en muchos de estos hechos participaron priístas. ``Del 12 de octubre al 22 de diciembre (de 1997) hubo hechos violentos. Algunos los provocan los priístas; yo sí creo que hay algunos priístas que están allí provocando hechos sangrientos y que no tienen ninguna razón de ser, pero también es cierto que hay (personas) de varios bandos que han caído en conflictos étnicos, de tenencia de la tierra; que el grupo que controla la comunidad es el grupo que tiene la tierra, que explota una calera, por ejemplo, o que explota un banco de arena. Por eso se están matando, pero también se están matando por conflictos religiosos y étnicos. Es guerra de pobres contra pobres'', dijo.

Y aunque aceptó la participación de priístas en distintos hechos violentos, aclaró: ``Yo no quiero decir que en ninguno de los casos haya estado implicada ninguna dirigencia de algún partido. Me parece que eso sería ilógico. Yo creo que son provocados por los conflictos que existen en la zona. No impliquemos a ninguno de los partidos'', pidió el secretario de Gobernación.

En algunas de las entrevistas que concedió a lo largo del día, dijo que en Chenalhó los conflictos se han dado entre dos grupos: ``priístas y perredistas... simpatizantes de los dos grupos. Yo no quisiera decir en ningún momento que con el auspicio de los partidos, sería muy grave decirlo'', precisó.

Chiapas es como caldera de bruja

Dijo que no hubo acto de autoridad y consideró que la región donde se encuentra Chenalhó ``vive peor desde antes de que se presentara el EZLN''. Reiteró que en Chiapas existen ``grupos armados de uno y otro lado'', que las armas entran por Centroamérica y ejemplificó: ``Por cinco mil pesos consiguen un cuerno de chivo o un R-15. Chiapas es como una caldera de bruja. La mecha es corta, yo no estoy nada tranquilo; hay muchos grupos armados (y) tenemos que desarmarlos, evitar a toda costa que se dé un nuevo enfrentamiento y evitar que los que dirigen a los grupos los estén moviendo''.

Aceptó que, en el caso de Chenalhó, se presentó una escalada de violencia ``que no se interrumpió a tiempo y que no se aplicó la ley. En estos momentos, se corregirá todo lo que se requiera para lograr la pacificación en Chiapas'', y aclaró que a él no le gusta engañar.

Sobre la situación que se vivió en La Realidad (el pasado 3 de enero) y la versión de Gonzalo Ituarte, vicario de la diócesis de San Cristóbal, Labastida Ochoa comentó que según el negociador del gobierno para la paz, Pedro Joaquín Coldwell, nunca se dijo que había una incursión del Ejército en dicha comunidad.

Entrevistado en los pasillos de la Secretaría de Gobernación, Labastida detalló que ``lo que nos ha dicho (Joaquín Coldwell) es que él no dio esta información. Que lo que indicó fue diferente y que además no fue con Ituarte, sino con otra persona, y que no dio de ninguna manera información que daba lugar a esta interpretación''. Lo importante, añadió, es que se aclaró por parte de Ituarte ``y ya vuelven a calmarse las aguas''.

Finalmente, el funcionario explicó que esta misma semana entregará al Presidente de la República su propuesta de solución al conflicto de Chiapas, e informó que desde el domingo pasado ha sostenido contacto telefónico con Samuel Ruiz, obispo de San Cristóbal de las Casas y presidente de la Conai.

Hoy por la tarde, Labastida se reunirá con los integrantes de la Cocopa y nuevamente con Pedro Joaquín Coldwell. Ayer también recibió a la presidenta de la CNDH, Mireille Roccatti.