La Jornada 6 de enero de 1998

Exige AN explicación clara sobre ``tolerancia o auspicio'' a grupos paramilitares

Fabiola Martínez Ť El PAN exigió al gobierno federal ``una explicación clara y contundente respecto a la tolerancia o auspicio para la formación de grupos paramilitares en Chiapas''.

Las fuerzas armadas y el gobierno deben decir si hubo entrenamiento de paramilitares de otros países, especialmente de los kaibiles guatemaltecos, de fuerzas de seguridad pública estatal o del propio Ejército, señaló el líder nacional de AN, Felipe Calderón Hinojosa.

``Más vale que nos digan la verdad de los hechos (de la matanza de Acteal) en lugar de hacernos pensar que en México se le ha dado puerta abierta a grupos particularmente sanguinarios que pueden hacer de nuestro territorio una zona de violencia y masacre'', advirtió el panista.

El PAN insitió en su demanda de renuncia del gobernador Julio César Ruiz Ferro y la desaparición de poderes en Chiapas.

En esa región, agregó, hay un esquema de descomposición social, en el que a una violencia institucional le ha seguido una revolucionaria, y a ésta una de corte represivo. Por eso, se requiere un Estado que ponga orden y revise el encubrimiento y complicidad con grupos paramilitares.

``Lo evidente en Chiapas es que ya no hay gobierno, entonces, el gobernador debe formalizar su renuncia y no evadir la gravísima responsabilidad que tuvo en la formación de los grupos violentos; por dignidad, debe dar una amplísima explicación y enseguida renunciar'', señaló Calderón.

Dijo que si bien la salida de Emilio Chuayffet de Gobernación fue un ``gesto de sensibilidad'', urge asumir esa responsabilidad a nivel local, y que el PRI responda por los grupo que perpetró la matanza de Chenalhó ``bajo el escudo, organización y siglas del priísmo''.

``No podemos tolerar que las autoridades que no sólo permitieron sino que probablemente encubrieron los hechos violentos en Chenalhó sigan al mando en Chiapas''.

Al respecto, sostuvo que a cuatro años de iniciada la ``revuelta'' zapatista puede asegurarse, sin duda, que aun con la canalización de recursos millonarios a la entidad, ``hoy por hoy las condiciones de marginación y miseria de los indígenas son mayores a las que había en 94, al igual que las de segregación, violencia y odio''.

Vera, sólo ``recolector de rumores'', afirma la priísta Socorro Díaz

Jesusa Cervantes Ť La secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, Socorro Díaz, recordó que su partido se ha deslindado ``en tiempo y forma'' de los hechos violentos de Chiapas, y que ``lo hace una vez más de cualquier imputación que pretenda involucrarlo''.

Insistió en que su partido es enemigo de la violencia, y dijo que las declaraciones del obispo coadjutor Raúl Vera ``sobre la posible participación de miembros del PRI en la masacre en Chenalhó fueron previamente sembradas en comunidades indígenas y, por tanto, carecen de sustento y de toda seriedad desde el punto de vista informativo''.

Añadió que, como lo dijo el subprocurador encargado de tomar las declaraciones de Raúl Vera, ``éste se reconoció como un testigo de oídas... se le conoció como un recolector de rumores, decires y expresiones que se escuchan pero no se pueden probar''.

Díaz dijo que los priístas deben actuar con serenidad, responsabilidad y firmeza, y pidió que ninguna fuerza política ``levante falsos testimonios ni mienta en cuestiones tan graves para la vida de Chiapas y tan serias para la estabilidad de México''.

Reiteró su apoyo al programa de desarme que realiza el gobierno federal en Chiapas, y consideró que ello ``permitirá establecer condiciones en las que el priísmo nacional pueda decir `ya basta' al intercambio de imputaciones irresponsables; al intercambio de partes de guerra y de generar una violencia verbal que casi siempre es preámbulo a la física''.

La priísta hizo lo que la Sedena, un llamado a periodistas para que actúen con responsabilidad, ética y sentido moral.