Tanto por la nueva alianza como por el contenido de sus noticiarios, Tv Azteca se llamará en el futuro ``Guillermo Cañedo'' conjugagando así el team Cañedo-Salinas, que explicaría con su solo nombre y combinación la calidad moral de su política informativa y las motivaciones de sus propietarios y locutores. El estadio Azteca volverá a su nombre original luego de la perversa herencia que dejó Emilio Azcárraga, quien quiso mantener la unificación de Televisa inmortalizando al socio Guillermo Cañedo al ponerle su nombre al coloso de Coapa, y que desde entonces se conoce como ``El Socio de Coapa''. La nueva fusión es sugerente y deja ver que el tal Ricardo tiene mucho de Salinas y de Cañedo porque las alianzas califican a las partes y terminan siendo parecidas.
¿Cuáles son los motivos e intereses que protegen los medios de comunicación para hacer el ``milagro guadalupano'' de desprestigiar a toda costa al gobierno del Distrito Federal, la solidaridad con Chiapas, las luchas indígenas, las protestas contra la matanza en Chenalhó y al Congreso de la Unión? El nuevo teletón, encabezado por Abraham Zabludovsky, Javier Alatorre y Pedro Ferriz de Con, cuestiona toda versión de imparcialidad de Televisa, Tv Guillermo Cañedo y Multivisión respecto al debate en el país. La sociedad ha cambiado pero no los medios, al igual que el PRI, y siguen respondiendo a intereses privados y políticos que polarizan y guerrean contra el cambio.
La voluntad ciudadana del 6 de julio les irrita profundamente y contra ella reivindican ahora ``la libertad de expresión'' contra el gobierno... pero el de Cárdenas, pues según los comentarios de los Zabludovsky, Ferriz, Alatorre y Salinas Pliego no sólo perdieron PRI y PAN, sino también los medios electrónicos que han convertido ahora a Sergio Sarmiento, Luis Pazos o Carlos Castillo Peraza en los verdaderos peluches del análisis televisivo. Esta ofensiva inicial avanza desde diversos planos que van desde el ideológico y político, hasta el de simples intereses que han vinculado a empresarios, medios y periodistas beneficiados con la corrupción gubernamental. Los vínculos de Salinas Pliego con Raúl Salinas para la compra de Tv Guillermo Cañedo; la sociedad de Zabludovsky con Raúl Salinas; los negocios entre Oscar Espinosa Villarreal y Ferriz de Con, quien tiene concesionados casi a ciento por ciento los espacios de publicidad en el transporte urbano y el Metro, y que lo ligan a bancos y Afore, ¿no son intereses suficientes para golpear y protegerse del mandato contra la corrupción que tiene el nuevo gobierno si viven del contratismo? En diversas áreas del gobierno del Distrito Federal aparecen en nóminas cientos de ``recomendados'' por periodistas y políticos que explican el silencio y la orientación informativa de los medios. Las relaciones entre gobierno, PRI y los medios son estrechas en lo económico y en la complicidad informativa; la ética o la verdad de un Ferriz de Con, por citar un caso, sólo llega hasta donde su sociedad con el gobierno para los contratos. Todos estos intereses han declarado la guerra al cambio y hacen política tan sucia como la guerra en Chiapas contra la insurrección indígena, y por eso la defienden.
Es fundamental tomar el reto. Esta guerra es ineludible y es no sólo contra el gobierno sino contra la sociedad. La suya es mantener a todos bajo la presión de la estrategia de la violencia, a fin de inhibir la disposición al cambio y las reformas. Los medios de comunicación electrónica, la mayoría de los radiodifusores, hombres retardatarios y conservadores, se han sumado a quienes impulsan la idea de hacer reventar todo cambio pacífico para restablecer los mismos intereses que han sometido al país y lo han empobrecido y corrompido durante décadas.
Una responsabilidad legislativa y pública es el cese de los despojos que el grupo Elektra de Salinas Pliego realiza a los trabajadores mexicanos de Estados Unidos, a los que se quita 20 por ciento por costo de envío, además del que se deriva del deshonesto negocio de ganar con la paridad.
A esos trabajadores se les toma el dólar por abajo de su cotización en México, y este concepto ha hecho ganar a Salinas Pliego -corazón de Scrooge (el avaro) y ética de peluche- entre 10 y 15 por ciento adicional, que le ha reportado más de 2 mil millones de dólares anuales de ganancia con la que financió generosamente el Ventaneando Millonario (en dólares). La visión de la televisión mexicana se ha refugiado en la nota roja o el mesianismo de locutores como Ferriz de Con y Alatorre, quienes de su escasa cultura han construido un rating con su versión de ``la verdad'' y la decencia.
La técnica es típicamente fascista y nazi gracias al control y monopolio de los medios de comunicación en manos de un empresariado derechista y decadente que ha descubierto ``la libertad de expresión'' en burda imitación de la programación de la televisión española, convertida en arma contra los cambios y gobiernos surgidos del voto popular.
Contra esta disposición a la guerra, la alternativa no es despojar de su derecho a la mentira a los comunicadores de baja estofa como los ya señalados, sino que la sociedad cuente con sus propios medios de comunicación electrónica, como ha demandado el Frente Amplio Tu Voz, Tu Imagen: Tu Derecho.