El Papa no es un ángel exterminador del socialismo, sostiene Castro
Afp, Ap, Reuters, Dpa y Pl, La Habana, 17 de enero Ť El presidente cubano, Fidel Castro, llamó hoy a ``toda la gente, mandos y militantes'' del gobernante Partido Comunista a asistir a las misas que celebrará el papa Juan Pablo II durante la visita a Cuba que se iniciará el miércoles próximo.
Sostuvo, además, que no ve en el jefe de la Iglesia católica un ``ángel exterminador del socialismo'', e invitó irónicamente al mandatario Bill Clinton a visitar el país caribeño como lo hará Karol Wojtyla.
En una comparecencia maratónica en la televisión estatal, que comenzó el viernes por la noche y se extendió por casi seis horas hasta bien entrada la madrugada de este sábado, alabó al Papa (que hará su primer viaje a Cuba entre el 21 y el 25 de enero) a quien calificó de ``hombre histórico''.
``Yo también estaré en esa misa'', dijo Castro sobre el oficio religioso que Juan Pablo II celebrará el 25 de enero en la Plaza de la Revolución y que será difundido en directo por televisión a todo el país.
Invitó a los cubanos a darle un gran recibimiento desde que aterrice en el aeropuerto y a lo largo de todos los recorridos, ``con la participación de todo el pueblo, católicos y no católicos, creyentes y no creyentes''.
Este es el primer llamado de las autoridades para que asistan a las actividades que realizará el Papa durante su visita.
Además, el mandatario cubano precisó que se otorgarán licencias para que los trabajadores puedan asistir a la misa del 25 y a las otras tres que se celebrarán en Camagüey, Santiago de Cuba y Santa Clara.
``Deseamos las plazas llenas'', pero aclaró que ``por disciplina nadie debe ir a una misa'', sino por convencimiento, por ``cortesía, por consideración con el visitante''.
Advirtió además que ``ninguno debe llevar consignas políticas, nadie debe llevar un sólo letrero'' a las misas; ``nadie debe dejarse arrastrar a la más mínima provocación'', ni ``dar vivas a ningún dirigente de la revolución'' o ``expresar ninguna manifestación de protesta frente a cualquier palabra que pronuncie en un altar''.
``Eso les pido y asumo toda la responsabilidad ante aquellos que tienen algunas dudas'', dijo el veterano líder revolucionario, septuagenario al igual que el Papa.
En su discurso, Castro no ahorró elogios para el Papa y criticó a quienes sugieren que su visita es una amenaza para el sistema cubano, al dar a entender que los socialistas en Polonia habían cometido un ``error histórico'' al imponer allí una versión dogmática bajo presión de la Unión Soviética.
Aseguró estar ``completamente seguro'' de las buenas intenciones y la amistad de la visita papal, mientras que ``reaccionarios e imperialistas'' intentan presentar la visita del jerarca católico como ``algo perjudicial para Cuba y la revolución''.
Algunos --sostuvo-- incluso pretenden mostrarlo como un ``ángel exterminador del socialismo, de los comunistas''.
En cambio, consideró al Papa ``uno de los dolores de cabeza más grandes que tenga hoy el imperialismo, porque no es un hombre al que pueda manejar''.
Castro hizo entonces una irónica oferta a Clinton para que visite la isla, pero estimó que ``un presidente de Estados Unidos, con sus armas nucleares, cohetes y armas sofisticadas no se atreve a venir a este país para ver lo que pasa o pronunciar un discurso a los cubanos'', y ``en cambio el Papa sí se atreve a venir''.
``Si el señor Clinton quisiera venir a Cuba para hablarnos de capitalismo, de neoliberalismo, de globalización y democracia, no le pondríamos la menor objeción'', dijo.
Poco después, Castro dijo a un grupo de periodistas que lo esperaba a la salida del estudio de televisión que el Papa ``ya hizo todas las críticas al comunismo y ahora se las está haciendo al capitalismo''.