Otorgó el gobierno capitalino incremento de 18% a los sueldos de 110 mil trabajadores de base
José Galán Ť El gobierno de la ciudad de México anunció un incremento salarial de 18 por ciento, retroactivo al primero de enero, para cerca de 110 mil trabajadores de base, con el fin de restituir el poder adquisitivo perdido por el salario en 1997 por efecto de la inflación.
En el marco de la política salarial del gobierno perredista, y a pesar del impacto económico por la disminución en los precios del petróleo sobre las finanzas federales, las autoridades locales buscan cumplir así con el compromiso de mejorar las condiciones de vida de los trabajadores y habitantes de la ciudad. Esta es la primera vez en años en que el gobierno de la ciudad establece su propia política salarial, lejos de los lineamientos que el federal acostumbraba imponer a las autoridades designadas para administrar la capital del país.
La inflación en la capital en 1997, de acuerdo con las cifras del Banco de México, fue de 15.65 por ciento, por lo que el aumento, anunciado en nombre de Cuauhtémoc Cárdenas por su vocero, Javier González Garza, es mayor en 2.35 puntos porcentuales al promedio inflacionario, lo que, agregó, ``permite iniciar la recuperación del salario''.
Otra concepción
Además del ejercicio de una política salarial propia, el anuncio del gobierno central marca un giro particular sobre la concepción de la política económica del régimen priísta. Cabe recordar que en los debates sobre el presupuesto para 1998 en la Cámara de Diputados, los legisladores priístas y panistas se opusieron terminantemente a un aumento de 5 puntos porcentuales al salario por encima del promedio inflacionario, bajo el pretexto de contener precisamente la inflación a costa del nivel de vida de la mayor parte de los mexicanos.
En nombre del gobierno central, González Garza informó que los recursos para otorgar este incremento ``se apegan puntualmente a la capacidad presupuestal que le fue aprobada al gobierno de la ciudad por la Asamblea Legislativa''.
``Reconocemos la colaboración de los trabajadores del gobierno de la ciudad de México, así como de su representación sindical, quienes han redoblado esfuerzos y consideramos que todo ello permitirá obtener economías presupuestales'', agregó el portavoz.
Precisamente, la demanda salarial presentada por el Sindicato Unico de Trabajadores del Gobierno del DF (SUTGDF), hace unos días, fue de un aumento de 20 por ciento, so pena de paralizar la ciudad.
Escrupulosa vigilancia
El incremento anunciado por las autoridades del Distrito Federal prácticamente satisface las demandas del sindicato más grande de la capital de la República, con poco más de 100 mil afiliados, 50 por ciento del total de 220 mil trabajadores del gobierno local.
Según las autoridades, parte del aumento provendrá de la aplicación de un programa de ahorro y de optimización de recursos materiales y financieros, ``así como de una escrupulosa vigilancia en su aplicación'', puntualizaron.
Al dar lectura al documento, González Garza afirmó que el gobierno de la ciudad reconoce que los trabajadores, empleados y funcionarios ``somos servidores públicos, lo que significa, antes que nada, servir a los habitantes de la ciudad''.
Finalmente, subrayó que el gobierno de la ciudad asume el compromiso oficial para que, junto con los trabajadores, se fortalezcan programas de capacitación y desarrollo de recursos humanos que hagan posible un mejor servicio y lograr, en el corto plazo, una administración pública más eficiente.
Posteriormente, a la salida de sus oficinas en el Palacio del Ayuntamiento, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano afirmó en breve entrevista que el aumento de 18 por ciento es independiente de los salarios aplicados a los empleados del gobierno federal.