Se minimiza la mediación legislativa, acusa Salazar Mendiguchía
Mireya Cuéllar Ť La reunión de ayer entre la Comisión de Concordia y Pacificación y funcionarios de la Secretaría de Gobernación resultó ``frustrante'', según definió el senador priísta Pablo Salazar Mendiguchía, y no sólo porque Francisco Labastida Ochoa plantó a los legisladores, sino porque además el gobierno no les entregó la nueva estrategia para Chiapas --``nos habíamos generado la expectativa''--, y ``es preocupante que no lleguen soluciones rápidas''.
La Cocopa, comentó su vocero en turno, convocó al gobierno federal ``a sentir la urgencia de dar una respuesta'' a la sociedad, mientras que a Gobernación la urgió a presentar ``ya'' la nueva estrategia para Chiapas, pues ``los cambios de personas deben corresponderse con cambios de actitudes. Hay una legítima aspiración de la sociedad de que se corresponda con hechos concretos''.
Contrariados por la ausencia del titular de Gobernación, los miembros de la Cocopa expresaron durante la reunión --al coordinador gubernamental para el Diálogo y la Negociación en Chiapas, Emilio Rabasa Gamboa, y a Adolfo Orive, jefe de asesores de Labastida, quienes los recibieron-- la preocupación de que se estuviera ``reduciendo el nivel de interlocución de la Cocopa''.
Y es que en esta ocasión ni siquiera hubo comunicado conjunto, como en las dos reuniones anteriores. Los funcionarios de Gobernación, según dijeron, se limitaron a pedirles a los legisladores su opinión sobre cinco puntos de la agenda acordada la reunión anterior, los cuales habían quedado pendientes.
Al entrar al salón Juárez, donde se desarrolló el encuentro, los legisladores creían que Labastida acudiría unos minutos a la reunión para cuando menos saludarlos, pero se quedaron esperándolo.
``Debilitamiento'' de la mediación
Sin embargo, les explicaron que en ese momento el titular de Gobernación trabajaba ``arduamente'' sobre el tema de la reforma indígena, y que en su agenda había privilegiado las consultas sobre ese tema.
Salazar Mendiguchía agregó que todos los actores del conflicto en Chiapas, incluidas la Comisión Nacional de Intermediación y la Cocopa, están sufriendo un desgaste natural, pero también cuestionó a algunos sectores del gobierno por pretender minimizar la coadyuvancia de la Cocopa, y ``debilitar'' a la mediación (Conai), con lo cual abren las puertas a la tentación de ``internacionalizar las mediaciones en el conflicto en Chiapas''.
Al final de la reunión --el priísta usó también el término ``desaliento'' para referirse a ella--, el legislador dio por concluido, de momento, el diálogo con Gobernación, y confió en que ``tal vez el gobierno tenga la cortesía de informarle previamente a la Cocopa cuál será su posicionamiento público, pero no necesariamente''.
Para que la nueva estrategia gubernamental pudiera ser consensada, agregó el legislador, se necesitaría tener el punto de vista de la contraparte (el EZLN), y el diálogo está suspendido; ``la Cocopa no tiene canales, no tiene puentes con el EZLN, así que la estrategia será una posición unilateral del gobierno federal respecto del conflicto''.
El gobierno, apuntó, no tendría por qué consensar su estrategia con la Cocopa, aunque ésta ``sí quisiera que en esa posición se vieran reflejados nuestros puntos de vista, a eso aspiramos... en el documento de trece puntos que entregamos a Gobernación tenemos en primerísimo lugar la reforma indígena; hay el sentimiento generalizado de que cualquier estrategia que no incluya este tema, que es toral, que es nodal en el asunto Chiapas, no nos va a llevar a ninguna solución''.
No hay una mano segura que guíe la estrategia del régimen
Hasta el momento, lo único claro es que no hay una mano segura que guíe la estrategia del régimen con respecto a Chiapas, consideró ayer el diputado Gilberto López y Rivas, miembro de la Cocopa, quien dijo que la complejidad del problema chiapaneco avanza y el gobierno sólo atina a ``una especie de declaracionitis permanente'', sin acciones concretas, sin un proyecto estratégico o ``una voz que diga: por aquí vamos''.
Molesto porque se les avisó de última hora que Labastida no participaría en la reunión --les llamó ayer mismo por teléfono el presidente de la Cocopa para informarles que el secretario no estaría--, López y Rivas explicó que no está claro qué quiere el gobierno respecto a Chiapas; ``desde Nayarit se nos dice que no hay que hacer distinciones en la Constitución a las diferencias indígenas... y por otra parte el señor Rabasa sostiene que no se tocarán los acuerdos de San Andrés. O sea hay muchísimas contradicciones en las declaraciones del Ejecutivo, de los distintos funcionarios...''
-Ya es realmente cansado venir a reuniones para escuchar que vamos a tener una respuesta la próxima semana --comentó López y Rivas, quien cerró el tema con la frase: ``Secretario mata a diputado, pero diputado también tiene agenda'', por aquello del plantón.
Qué sí, qué no. Lo más seguro es que quién sabe
Cuando los miembros de la Cocopa se habían retirado, el secretario de Gobernación salió hasta los pasillos del edificio de Bucareli para despedir al titular de Salud, Juan Ramón de la Fuente, a quien recibió a la una de la tarde. Ahí, Labastida reiteró que la estrategia gubernamental será acordada no sólo con la Cocopa y la Conai, sino también con los partidos políticos.
``Espero que en esta semana terminemos de negociar; no depende sólo de nosotros'', dijo, y anunció que ``espera'' reunirse esta misma semana con el perredista López Obrador y las dirigencias de los partidos.
-¿Es cierto que la estrategia será unilateral, es decir, sólo del gobierno?
-Yo no sabía que en el gobierno estaban comprendidos los partidos. Estamos hablando también del Legislativo, no puede ser sólo del gobierno. Lo que estamos tratando de hacer es que sea, como les decía, no sólo una propuesta del Ejecutivo, sino que sea de todos; que sea una propuesta incluyente, participativa y, desde luego, que platiquemos y dialoguemos con el EZLN para que lleguemos juntos con ellos.
-¿Consensada con todos?
-Consensada, es lo que estamos tratando de hacer.
Sin embargo, el coordinador para la Negociación y el Diálogo en Chiapas, Emilio Rabasa Gamboa, había dicho unos minutos antes que la agenda de reuniones con la Cocopa se había agotado y no se había resuelto nada, ``porque no eran puntos a resolver''. Y, contrariamente a lo dicho la semana pasada, explicó que la Cocopa no se sumaría a la propuesta o estrategia gubernamental, pues entonces pierde su carácter de coadyuvancia, y ``tiene que mantener su distancia''.
Interrogado una y otra vez sobre los resultados concretos de las reuniones con la Cocopa, insistió en que nunca se buscó alcanzar acuerdos; las estrategias las plantean las partes y la Cocopa las recibe, las sopesa, las analiza... no había que consensar la estrategia con la Cocopa, porque entonces deja de ser instancia de coadyuvancia, para ser parte. Las partes en conflicto son el gobierno y el EZLN, y la instancia de coadyuvancia es eso (la Cocopa), y la de mediación (la Conai) es eso, y ninguna de las dos puede confundirse de su posición con una de las partes.
Una estrategia, abundó, tiene que ser de una de las partes, no va a recoger la propuesta del EZLN. ``Esta parte presentará su estrategia, la otra parte sostendrá o cambiará la suya''.