Liberarán a presuntos zapatistas ``como acto de buena voluntad''
Elio Henríquez, corresponsal, San Cristóbal de las Casas, Chis., 21 de enero Ť El gobernador Roberto Albores Guillén anunció hoy aquí que como un ``acto de buena voluntad para caminar hacia el proceso de paz'', en los próximos días serán liberados varios presuntos zapatistas indígenas que se encuentran recluidos en cárceles de Chiapas.
Explicó que ``sin que vulneremos la ley'', el gobierno del estado, conjuntamente con la Procuraduría de Justicia local, con los colegios de abogados y el Supremo Tribunal Superior de Justicia, iniciará en forma ``unilateral el retiro de los presos que no tengan delitos graves''.
La excarcelación de los presuntos zapatistas forma parte de una de las cinco condiciones mínimas puestas por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en septiembre de 1996, para reanudar el diálogo con el gobierno federal.
``Vamos a demostrar en los hechos, el ánimo y la voluntad política del gobierno del estado para avanzar hacia la paz'', afirmó Albores Guillén, al ser entrevistado en esta ciudad a la que llegó acompañado por el director del ISSSTE, José Antonio González Fernández, para supervisar el programa de apoyo a los desplazados de Chenalhó.
El mandatario sostuvo que el gobierno federal y el EZLN están ``en un momento crucial y deben asumir una actitud de responsabilidad y flexibilizar sus actos; yo no creo en acción de buenos y malos, de blancos y negros, dicotómica''.
Sobre el plan de paz que en los próximos días presentará el gobierno chiapaneco, dijo que se basa en dos grandes ejes, uno político y otro de desarrollo.
Al término de la evaluación realizada en la clínica del ISSSTE, Albores Guillén y González Fernández hicieron un recorrido por las instalaciones de la misma, y visitaron a varios pacientes. Ahí se anunció que los niños Daniel, Jorge y María, heridos en la masacre de Acteal, fueron dados de alta hoy.
En entrevista posterior, el gobernador chiapaneco insistió en que la ayuda a los desplazados de Chenalhó debe ser entregada por la Cruz Roja Mexicana y por la Comisión Nacional de Derechos Humanos, lo cual rechazan los afectados.
``Nadie ha dicho que el asunto (de los desplazados) sea fácil'', expresó Roberto Albores, y aseguró que en X'oyep los indígenas refugiados ya aceptaron la ayuda, y ahora sólo falta ``convencer a los de Polhó''.
Durante el acto, el director del ISSSTE anunció que el presidente Ernesto Zedillo autorizó la ampliación de 13 a 23 camas en la clínica hospital de San Cristóbal de las Casas, con un presupuesto de 2.3 millones de pesos. Además, la de Tuxtla Gutiérrez será convertida en hospital general.