Alerta sobre la intención de crear turbulencias en la ciudad

Ricardo Olayo Ť Ante 30 organizaciones del Movimiento Urbano Popular (MUP), el jefe de gobierno del DF, Cuauhtémoc Cárdenas, expresó una duda: ``No queremos pensar, quiero reiterarlo, no queremos pensar que detrás del libramiento de órdenes judiciales (de desalojo) pudiera haber la intención de crear turbulencias sociales y políticas en la ciudad''.

En todo caso, anunció que solicitará una audiencia con el presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF), Jorge Rodríguez y Rodríguez, para encontrar soluciones que privilegien la conciliación antes que el uso de la fuerza pública.

Cárdenas indicó en su participación que la madrugada de ayer se había realizado un desalojo --el cuarto en su gestión-- ordenado por un juez y que se debía realizar porque en cuatro ocasiones se había hecho la solicitud, pero no se había procedido a cumplirla.

Si no se cumplía, precisó, había el riesgo de incurrir en desacato y que funcionarios de primer nivel fueran cesados e investigados. Por eso se hizo el desalojo, explicó.

Aseguró que la orden indicaba con precisión el número de policías a utilizar, de qué corporaciones y con que vehículos se tenía que llevar a cabo el desalojo. El gobernante local aseguró que en lo que va de su gestión se han incrementado las invasiones, sobre todo en áreas ecológicas; ``en la gran mayoría de casos lo que estamos viendo es manipulación política y social; estamos viendo clientelismo y también explotación y corrupción, principalmente de algunos dirigentes''.

Hay ocupaciones ilegales que llevan décadas y casos en que están sujetos a proceso que se deben resolver por la vía judicial, pero en donde se pueda se tratará de dar una salida conciliada, subrayó. Lo que hay es una falta de respuesta de las gestiones pasadas, ``lentitud burocrática'' y ``rezago de la atención del Estado''.

Ante los representantes de 30 organizaciones del MUP, que estaban presentes, según lo indicaron los propios líderes sociales, el jefe de gobierno dijo que la necesidad de vivienda permanece y destacó el discurso del secretario de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), Roberto Eibenschutz, por las irregularidades, ``la cantidad de situaciones no atendidas, de problemas que se dejaron complicar, de trámites que no se realizaron con oportunidad ni en los términos que las propias reglamentaciones establecen''.

Cuauhtémoc aseguró que esta situación retrasa la ejecución de programas en la materia.

Críticas de los dirigentes

Superbarrio Gómez leyó una declaración en la que criticó los aumentos al transporte y algunos nombramientos en el área de la Seduvi sin dar nombres. Además, consideró insuficiente el gasto social destinado a vivienda y cuestionó los desalojos.

Enrique Escamilla, otro de los que tomaron la palabra, pidió que se apoye a los desalojados y que se investigue la forma en que se hizo porque hay un anciano lesionado.

Exigió que se les dé un lugar provisional para vivir, a lo que Cárdenas le respondió que ya había negociaciones para ayudarlos en ese sentido. Los desalojados pertenecen a la UPREZ y, según el reporte de los dirigentes, se trató de 200 personas que fueron sorprendidas a las dos de la madrugada en la plaza de San Joaquín número 13, delegación Miguel Hidalgo.

Los otros participantes del Movimiento Urbano Popular solicitaron a Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano que no repita los errores de las anteriores administraciones y criticaron que el Movimiento Urbano Popular no haya sido consultado para la confirmación de los planes de trabajo de la Seduvi; pidieron que no haya abusos ni burocracia para dar respuesta a los solicitantes de vivienda.