La Jornada 28 de enero de 1998

PLANTON DE EX TRABAJADORES DE LA R-100

Ricardo Olayo Ť La Secretaría de Transporte y Vialidad del DF determinó revocar la concesión que había otorgado a siete empresas para operar líneas de autobuses en la ciudad desde este año. Ninguna de las compañías cumplió con la exhibición del parque vehicular previo al inicio de la prestación del servicio, como lo marca la convocatoria.

El director de Normatividad y Evaluación del Transporte, Octavio Abrego, informó en entrevista que habrá un nuevo concurso en el que podrán participar las empresas revocadas y otras interesadas. Este proceso se abrirá en las siguientes semanas y tendrá duración de un año.

Esto significa que en el lapso seguirá prestando el servicio de camiones la ex Ruta 100 manejada por el Consejo de Incautación; de esta forma, en abril próximo se cumplirán tres años de la declaración de extinción de esa empresa, proceso que no ha podido llegar a su fin.

El funcionario de la Setravi indicó que el parque vehicular de la ex Ruta 100 cada vez está más deteriorado y es un servicio caro para la administración; sin embargo, seguirá funcionando el próximo año.

Explicó que los representantes de las empresas revocadas entregaron por separado oficios de las razones por las que no pudieron tener listos los vehículos.

Los empresarios coincidieron en que los bancos no les dieron crédito y por esa razón las tres constructoras en el mercado se negaron a fabricar las unidades. Estas empresas constructoras son Mercedes Benz, a la que se habían acercado cuatro de las siete revocadas; Dina y Masa.

La obligación

En total, las siete empresas tenían que poner en circulación un parque inicial de 537 autobuses al momento de iniciar operaciones, y el cual podía extenderse en los primeros 180 días hasta los 694 automotores.

Los concursos de los que resultaron ganadores se efectuaron durante 1997 y en ellos se concesionaban 68 rutas de 9 módulos. Para participar en ese concurso se unieron microbuseros con hombres de capital, y microbuseros que juntaron su dinero, entre otros.

Actualmente, de las 10 líneas concesionadas que se tenía proyectado poner en funcionamiento la quiebra de Ruta 100, sólo tres circulan en la ciudad; una de ellas, Transportes y Servicios Terrestres G con 25 rutas y un parque vehicular estimado en 240 unidades. La cabeza del grupo es Rafael Gómez Flores.

Las otras dos empresas son de los trabajadores del sindicato de la ex Ruta 100 con Servicios Metropolitanos de Transporte 17 de Marzo y Autotransportes Urbanos Siglo Nuevo; estas últimas dos aún no tienen la concesión, porque no han mostrado solvencia económica, que es uno de los requisitos marcados en el concurso.

Alegan que su dinero está congelado en cuentas bancarias y que por ello no disponen de liquidez. Sin embargo, pueden prestar el servicio a través de una ``autorización temporal'' que les extiende la Setravi.

La Setravi formalizó la revocación y le ha informado en forma gradual a las empresas, que por ley pueden inconformarse y ampararse.