La Jornada 3 de febrero de 1998

Aprueba el INAH el concierto de Pavarotti, Plácido Domingo y Carreras en Teotihuacán

Renato Ravelo ŤEl concierto de Luciano Pavarotti, José Carreras y Plácido Domingo, a realizarse el 29 de marzo próximo en Teotihuacán, fue aprobado este lunes por las autoridades del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH); generaría para trabajos arqueológicos en la zona al menos 2.5 millones de dólares y será transmitido a pantallas gigantes en por lo menos 22 ciudades del país.

El que probablemente será el último concierto de la lucrativa fórmula, antes del cierre espectacular en el Mundial de Futbol de Francia, espera reunir en la Plaza de la Pirámide de la Luna y la Calzada de los Muertos 19 mil personas, que pagarán entre 50 y mil 500 dólares. No es ilegal, decidió el INAH, la utilización de la zona para actividades lucrativas.

El anuncio de la aceptación lo hizo el presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA), Rafael Tovar y de Teresa, quien destacó tres aspectos con los que tuvo que ver la aceptación: la proyección internacional para México, la aprobación por parte del Consejo Nacional de Arqueología de las medidas propuestas y la mayor dimensión social que se pudo lograr al pactar el envío de la señal gratuitamente a las ciudades que así lo soliciten (en principio 22).

En el acto estuvieron presentes María Teresa Franco, directora del INAH; Juan José Guerra Abud, en representación del gobernador del estado de México, César Camacho Quiroz; José Antonio Beltrán Mata, presidente ejecutivo del grupo Bemagar; Joaquín García Bárcenas, presidente del Consejo Nacional de Arqueología; Antonio Ariza Cañadilla, por la fundación Amigos de Teotihuacán; Angel Ernesto de la Guardia, por el área de Asuntos Jurídicos del INAH, y Alejandro Martínez Muriel, coordinador nacional de arqueología

Dignificar México

Para José Antonio Beltrán Mata, el concierto es una ``oportunidad de presentar un México distinto, en el que se conjunta el arte y la cultura. Plácido Domingo hizo la propuesta que afortunadamente recibió el apoyo de Pavarotti y Carreras. Para nosotros -subrayó- Teotihuacán no es un escenario sino un complemento real del arte que ellos tienen''.

El promotor explicó que el convenio establece que el INAH tendrá derecho a 5 por ciento de todos los productos relacionados con el concierto, además de 12 por ciento de taquilla. Si en el concierto de Pavarotti en Chichén Itzá se logró recaudar, con 23 mil personas, 5 millones de dólares, para esta ocasión se esperan obtener tan sólo por taquilla 12 millones de dólares.

Es decir: si el INAH recibirá por lo menos 2 millones y medio de dólares, alrededor de medio millón se calcula que provendrá de la taquilla y otro millón equivaldría a 5 por ciento, mínimo, que se espera recibir por venta de productos. En ese caso, las ganancias de los organizadores ascenderían a poco más de 32 millones de dólares, a los que habría que restar los 8 millones de los gastos de producción.

Sin embargo, para Beltrán Mata el evento no tiene como fin el lucro: ``Más bien se trata de una dignificación de la imagen de México, para presentar al país ante el mundo. De hecho, para el propio Pavarotti hay tres conciertos que lo marcan: el primero de ellos es el del inicio de la gira de los tres tenores en Italia; el segundo es el de Los Angeles, durante la Copa del Mundo, y el tercero es el que dio en Chichén Itzá, en el que hizo uno de los encores más largos de su carrera''.

Los tres tenores en cifras

El ciclo de conciertos que han llevado a cabo los tres tenores inició en las Termas de Caracalla, Roma, en julio de 1990, como parte de la clausura del Mundial de Futbol de Italia. Las ventas de grabaciones en video y disco compacto rebasaron los 12 millones de ejemplares. En aquella ocasión, la dirección musical estuvo a cargo de Zubin Metha.

Otro mundial, el de Estados Unidos, dio oportunidad a Tibor Rudas, el promotor, de establecer nuevas cifras comerciales: un millón 200 mil espectadores a través de la televisión, 20 millones de discos compactos. Nuevamente Metha en la dirección.

Desde entonces se han presentado en Tokio, Londres, Nueva York, Münich, Melbourne y España. Se dice que Tibor Rudas emplea gente que trabaja 24 horas durante cuatro días antes de cada presentación. La influencia de esta producción logró que en Nueva York fuera desviado el tráfico aéreo para que no afectara el concierto en el estadio de los Gigantes.

James Levine, director artístico del Metropolitan Opera de Nueva York, estará al frente de la Orquesta del Teatro de Bellas Artes. El repertorio para el espectáculo, que rebasará la hora y media, está aún por definirse, pero se adelantó que incluirá algunas piezas latinoamericanas y mexicanas. Se espera 30 por ciento de asistencia extranjera.

En la ciudad de México se pondrán pantallas en el Centro Nacional de las Artes, en la explanada del Palacio de Bellas Artes y en el Auditorio Nacional. La empresa Sky, de Televisa, comercializará la señal al exterior.

Cero ilegalidad

``El Consejo de Arqueología -explicó Teresa Franco- hizo un conjunto de recomendaciones a la empresa Begamar, que afortunadamente aceptó en su totalidad, a efecto de cerciorarnos de que el sitio no sufra ningún daño. Por ejemplo, no se cercenará. En el equinoccio de primavera, el año pasado llegaron casi dos millones de personas; ello ha obligado a nuestra institución a contar con un conjunto de medidas para que la zona no se dañe. La propuesta que se ha hecho es muy cuidada.''

--De acuerdo con lo que dicen, el concierto cumple con normas de protección, generará dinero para la zona y es un buen negocio; sin embargo, los investigadores sindicalizados advirtieron sobre una ilegalidad: el lucro con patrimonio cultural. ¿Será que la legislación requiere cambios?

--En primer lugar, está garantizado en la Constitución mexicana el derecho de opinión que tenemos todos, pero en términos legales no existe inconveniente alguno para la realización de un concierto como el que se va a celebrar. Los argumentos esgrimidos están basados supuestamente en la Ley Federal de Monumentos, en la Ley de Bienes Nacionales o en los acuerdos y decretos vigentes. Ninguno de ellos contradice la posibilidad de realizar un acto cultural de calidad como el que se pretende.

``Es absolutamente inexacto que haya una violación a la ley. Si ésta llegara a sufrir modificaciones sería por otras razones: para hacerla más poderosa o más fuerte en materia de preservación del patrimonio, ya que son muchas las áreas no consideradas en ella.''

Franco rechazó la versión de que el dinero recaudado se vaya a utilizar para la compra de la polémica zona de La ventanilla: ``Los recursos se aplicarán en Teotihuacán, en la que se tiene un diagnóstico de lo que hace falta con trabajos desde hace tres años. La ventanilla se va a defender, se compre o no. Allí se han llevado a cabo actividades de mantenimiento, limpieza, deshierbe y restauración de pisos''

Yanni, sin calidad comparable

En la extensa conferencia de prensa, en la que se prodigaron cifras, beneficios económicos para la zona, proyección internacional (``en momentos en que México tiene una mala imagen'') y se explicaron medidas de seguridad para no afectar la zona, hubo un momento en que inevitable surgió la pregunta: ¿es cierto que Yanni solicitó presentarse en Teotihuacán?

María Teresa Franco salió al quite de la pregunta, empezó a decir que la solicitud de manera formal nunca llegó, y que en realidad no se podía hablar de ella.

Tovar y de Teresa interrumpió a la directora del INAH: ``La verdad no fue formal, pero sí se nos planteó y dijimos que no. No se puede comparar a Yanni con los tres tenores, que tienen expresiones de carácter universal. Es difícil pensar en otros artistas que tengan esa calidad''.