La Jornada 5 de febrero de 1998

Al EZLN, las observaciones del gobierno sobre el proyecto de Cocopa

Alonso Urrutia Ť La Comisión de Concordia y Pacificación acordó enviar al EZLN --sin juzgar su contenido-- las observaciones formuladas por el gobierno federal al proyecto de iniciativa sobre derechos y cultura indígenas. Al mismo tiempo, insistió en que es necesario reorientar el proceso de la paz, para lo cual consideró indispensable una estrategia que incluya, entre otros aspectos, la reducción, con carácter urgente, de la presencia militar y su movilización en la zona de conflicto.

Al respecto, solicitó formalmente una nueva reunión con el secretario de Gobernación, Francisco Labastida Ochoa, a fin de conocer las medidas concretas que ha instrumentado el gobierno federal para atender los planteamientos contenidos en el reciente documento conjunto de la Cocopa-Conai.

Entre tanto, a nombre de la Comisión Nacional de Intermediación, el obispo Samuel Ruiz sostuvo que la recepción y el envío formal del sobre con las observaciones gubernamentales no significa que se haya restablecido el diálogo y la negociación entre el gobierno federal y el EZLN, ``proceso que sigue actualmente suspendido''.

Pide Ruiz García hechos que respalden la voluntad política

Ruiz García insistió en que, para la Conai, ``como garante del proceso de diálogo'', la única vía para reanudar el diálogo es la de los hechos que respaldan la voluntad política.

Tras una larga jornada, que incluyó una reunión matutina de la Cocopa para discutir la posición que asumirían respecto del procedimiento a seguir en cuanto a la entrega de las observaciones gubernamentales y una reunión conjunta Cocopa-Conai, se acordó finalmente enviar el documento al EZLN.

Al dar lectura a la respuesta que envió la Cocopa a Emilio Rabasa, coordinador para el diálogo y la negociación en Chiapas, el vocero en turno de la Cocopa, Miguel Angel Garza, del Partido Verde Ecologista de México, señaló que esa instancia acordó, ``sin juzgar su contenido trasladar dichas observaciones a través de la Conai, para ``los efectos a que haya lugar''.

Sin embargo, el escrito de la Cocopa insiste en la necesidad de reorientar el proceso para alcanzar la paz. En tal sentido, consideró indispensable establecer una estrategia, que incluye por lo menos 11 puntos, entre los que destacan la citada reducción de la presencia militar y el impulso a la reforma constitucional que concrete los acuerdos de San Andrés.

En el planteamiento --que recupera en gran parte el comunicado conjunto Conai-Cocopa del pasado 22 de enero-- se advierte también sobre la necesidad de respetar la Ley para el Diálogo, la Conciliación y la Paz Digna en Chiapas y los principios y procedimientos acordados entre las partes.

Al respecto, plantean también la reactivación de la Comisión de Seguimiento y Verificación. En este punto, la Cocopa dio a conocer una parte de la comunicación que les envió Rabasa al enviarle las observaciones gubernamentales a la iniciativa de la Cocopa, en la que hace explícito que su acuerdo en cuanto a ``reactivar los trabajos de la Cosever'' en los términos de la Ley para el Diálogo y la Paz Digna en Chiapas.

La Cocopa reiteró su demanda de proceder al desarme de los grupos paramilitares que actúan en Chiapas y el fincamiento de responsabilidades por los delitos cometidos, en especial, a los autores intelectuales y materiales de la matanza de Acteal.

En lo concerniente al destino de las armas del EZLN, puntualiza, ``esto es materia de la agenda de negociación y consecuencia del acuerdo mutuo entre las partes''.

La Cocopa enfatizó en otros aspectos, como el otorgamiento de la ayuda humanitaria a los desplazados; generación de condiciones para el retorno de aquellos a sus comunidades; indemnización a las victimas del conflicto; liberación de los presuntos zapatistas presos, y generación de mecanismos de conciliación regional.

Tras casi cuatro horas de reunión entre la Cocopa y la Conai, Samuel Ruiz precisó que, para esta última, el diálogo de San Andrés permanece suspendido formalmente desde el 2 de septiembre de 1996. Subrayó que esa instancia considera preocupante la situación política, económica, social y militar en Chiapas, la cual es hoy ``más grave que la que existía cuando se suspendió el diálogo''.

En coincidencia con la Cocopa, dijo, consideran necesario generar, de manera inmediata, condiciones político-militares que posibiliten la reactivación del diálogo entre la partes.

El obispo precisó que, para la Conai, el cumplimiento de los acuerdos de la Mesa Uno sigue vigente. Del mismo modo, consideran la iniciativa de reforma constitucional elaborado por esa comisión ``como el documento de referencia''.

Finalmente, señaló que solicitará al gobierno federal ``diversas clarificaciones'' acerca de las condiciones propuestas en el documento conjunto Cocopa-Conai.

Entre tanto, las criticas vertidas por diputados de la Comisión de Asuntos Indígenas de la Cámara de Diputados suscitaron el rechazo de miembros de la Cocopa.

El coordinador perredista en el Senado, Héctor Sánchez, advirtió que las presiones y amenazas contra esa instancia provienen de sectores duros que pretenden debilitar o eliminar a la Cocopa para promover una salida violenta a la situación en Chiapas. ``Si alguien se atreve a solicitar la desaparición de la Cocopa, está solicitando la violencia'', dijo.

Por su parte, el priísta Oscar López Velarde calificó de irresponsables las declaraciones del presidente de la Comisión de Asuntos Indígenas, las que, consideró, fueron hechas a título personal, pues la Cocopa a recibido el respaldo de la Comisión Permanente.