Fernando Benítez
Lo bueno y lo malo
¡Ya basta! No estamos en la escuela para que el maestro nos apruebe o nos repruebe. En primer lugar, Estados Unidos debería reprobarse por tener 20 o 30 millones de drogadictos que pagan miles de millones de dólares para satisfacer su enorme apetito de drogas. Dicen que la certificación estadunidense hacia los países que comparten este problema durará todavía cinco años. Nosotros debemos insistir durante ese lapso en la incapacidad moral que tiene nuestro vecino para hacerlo.
Es cierto que la nueva estrategia firmada ayer entre México y Estados Unidos representa un avance considerable para un mejor entendimiento en la lucha contra el narcotráfico entre ambas naciones. Es importante, porque toma en cuenta aspectos de soberanía que antes eran ignorados por nuestro poderoso vecino.
Ojalá que el acuerdo sea el camino definitivo para la erradicación de la vergonzosa certificación, y sea punto de arranque de una actitud de total respeto de Estados Unidos hacia los países del continente.