Celebra Tiempo de San Cristóbal su 30 aniversario
Javier Molina, San Cristóbal de las Casas, Chis., 7 de febrero Ť El martes 6 de febrero de 1968 apareció en esta ciudad el primer número del semanario Tiempo, dirigido por Amado y Elmer Avendaño.
``En él encontrará el curioso lector la noticia, producto de averiguaciones e indagaciones previas, el comentario mensurado: el pulso de los acontecimientos. Y como sustrato que todo lo anima y da vida, el entusiasmo juvenil de sus dirigentes y el firme propósito de decir la verdad: el compromiso con la comunidad de ser su abanderado en sus justas peticiones y anhelos. Bienvenido sea, pues, al mundo de las letras, y que nuestro público, certero juez de lo bueno y constructivo, dé su veredicto totalmente aprobatorio al espíritu que norma y normará a este semanario'', se afirmaba en el editorial.
Otro martes, el 11 de enero de 1994, la publicación ya es un diario, dirigido por Concepción Villafuerte, esposa de Amado Avendaño. Ese día aparece una noticia nueva: Tiempo recibió un comunicado del EZLN para su publicación.
``Los compañeros me han encargado que vea la forma en que se puede hacer público, creo que su periódico podría ser un medio para que este pronunciamiento se distribuya en otros lados. No pedimos que se esté de acuerdo con nosotros o nuestro camino, sólo que nos den la oportunidad en la prensa de decir nuestra palabra. Esperamos que a través de ustedes, de lo poco de periodismo honesto e imparcial que queda en Chiapas, se puede cumplir la demanda de difusión que hacen los compañeros del CCRI. En este comunicado se pronuncian sobre los últimos acontecimientos'', escribía el subcomandante Marcos.
Son dos momentos importantes del periódico que celebra su 30 aniversario; lo hace con exposiciones de pintura, fotografía y conferencias con el tema ``La comunicación y los medios de información'', en el auditorio del ex Convento de Santo Domingo.
``La historia del periódico Tiempo -afirmó el periodista Juan Balboa- es el tiempo de la historia del periodismo chiapaneco contemporáneo. Es imposible separarlo, parece que nacieron juntos. Las páginas hechas en un principio letra por letra y, después, en ese rompecabezas que era la prensa plana, fueron dibujando año tras año un periodismo abierto, crítico y, sobre todo, invadido por los pobres entre los pobres que fueron, y siguen siendo en algunos casos, marginados de la prensa local allegada en su mayoría a las áreas fiscales y de la gran prensa nacional hacedora de líderes priístas de viejo cuño.''
Balboa recordó los años en que gobernaba Juan Sabines Gutiérrez. ``Tiempo respiraba profundo, latía afligido, buscaba estar presente a pesar de tener siempre los bolsillos flacos y la oposición hasta de trabajadores de la comunicación. Tiempo, y al hablar de Tiempo estoy hablando de Amado y Conchita, fue de los pocos medios que tomaron la delantera para plasmar en sus páginas la historia de las comunidades indígenas''.
``Dentro de los medios locales que no acataron la consigna del gobierno -recordó a su vez Abelardo Hernández- destaca el caso del periódico Tiempo que, desde hace 30 años, se edita y distribuye en San Cristóbal. Fue desde las oficinas de este medio informativo que se dio a conocer a todo el país -y al mundo entero- la noticia de la insurrección de indios mayas chiapanecos. En este mismo periódico, entre fines de los años 70 y principio de los 80, tuve el privilegio de colaborar publicando denuncias y protestas en torno a la represión de campesinos e indios. Doña Concepción nos platicó que, anteriormente, los voceadores eran jóvenes y no niños, pero que ante el acoso de policías y soldados optaron por contratar el servicio de infantes, puesto que se vería muy mal que un soldado o un policía adulto anduviera correteando niños por las calles para quitarles sus ejemplares. Gajes del oficio en tiempos de guerra.''
La celebración, en su primer día, fue más bien una muestra de afecto, de reconocimiento al trabajo limpio. ``Tiempo sigue siendo, heroicamente, el primer periódico de los pueblos indios de Chiapas -afirmó Jaime Avilés en su mensaje-, y este título que nadie le escatimaría sin insultarse a sí mismo es su mayor pendón de gloria. A pesar de las calamidades que no hace falta enumerar aquí, continúa como en sus épocas más gloriosas. Imposibilitado de sumarme personalmente a los festejos conmemorativos de esta hazaña de la tenacidad, les envió mi más caluroso abrazo, reiterándoles la certidumbre de que tarde o temprano vamos a ganar''.
Andrés Aubry sostuvo que el periódico ha revelado aspectos que se tratan de esconder: cómo se destruyen las etnias de Chiapas, los reprimidos del campo, las mujeres violadas, las víctimas del mercado de San Cristóbal, ``Tiempo publicaba lo que pasaba en la calle, era la noticia caliente, por lo tanto callada por el resto de la prensa. Todos los números de este periódico son documentos históricos, tiene incluso fotos que son en sí noticia''.
Jesús Ramírez se refirió al ejemplo que han dado a México y al mundo ``con su trabajo, la valentía con que lo han defendido... y sus ideales. Esas hermosas páginas forman ya parte de la historia''. En tanto, Guimar Rovira afirmó que Tiempo ``ha sido una escuela de periodismo, de dignidad, de amor, de entrega. Allí he encontrado computadora, un plato en la mesa, un abrazo cuando lo necesitaba''.
Una muestra de afecto bastante cálida fue la de Agustín de la Cruz, chamula, quien acompañado de su hijo y su hijita subió al estrado a entregar unas flores a Concepción Villafuerte y Amado Avendaño. ``Soy muy lector del Tiempo -dijo. Yo les agradezco a las personas dignas de respeto, aquellas cosas sencillas, dignas, que son buenas para la gente humilde. Tiempo dice la verdad. Eso es todo, gracias''.