La Jornada 13 de febrero de 1998

Por razones de soberanía, el Ferrocarril del Istmo no se licitará

Víctor Cardoso Ť La convocatoria para licitar el Ferrocarril del Sureste, que emitirá el lunes la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), no incluirá la vía Coatzacoalcos-Salina Cruz, considerada como la parte más atractiva de la ruta por su corta distancia (20 kilómetros prácticamente planos) entre el Golfo de México y el Océano Pacífico.

Para el Ferrocarril del Istmo, por cuestiones de soberanía, las autoridades tienen prevista la creación de una paraestatal que podrá concesionar la operación ferroviaria entre empresarios privados. Esta separación se derivó del hecho de que se encuentra en una zona estratégica para el país por la importancia de los más grandes complejos petroquímicos, y otras industrias como cementeras, ingenios azucareros y plantas de fertilizantes.

Según la convocatoria que será publicada en el Diario Oficial de la Federación la semana entrante, la licitación corresponde a los corredores México-Veracruz, Córdoba-Medias Aguas, Veracruz-Tierra Blanca, Veracruz-Coatzacoalcos, Apizaco-Puebla y Tehuacán-Esperanza. En la convocatoria se incluirá el tramo Coatzacoalcos-Mérida, al cual los interesados podrán acceder opcionalmente.

La línea ferroviaria que corre a Tapachula, Chiapas, será licitada posteriormente como una de las múltiples rutas cortas que también se tiene previsto concesionar por sí solas.

Los interesados que podrían considerarse ``formales'' y que cubrirían los requisitos de la convocatoria son tres: la alianza entre las empresas Altamira Terminal Portuaria; Grupo Mexgal, Rehabilitación de Maquinaria Remaconst y Anacostia and Pacific Company.

Ampliamente interesada también se ha manifestado la empresa chilena Cruz Blanca, uno de los operadores ferroviarios más importantes de su país.