No pedimos cascos azules, sino que se cumpla lo pactado para lograr la paz, señala

David Aponte Ť El Congreso Nacional Indígena (CNI) consideró ayer que el gobierno federal debe retirar su contrapropuesta sobre el tema de la autonomía indígena, y la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa) tiene que defender la iniciativa original y no permitir ninguna modificación a los acuerdos de San Andrés Larráinzar sin el consenso del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).

En diversos documentos entregados a la representación de la Organización de las Naciones Unidas en México, el CNI solicitó que la comisión de derechos humanos del organismo multilateral designe a un relator especial para la revisión y seguimiento del cumplimiento de los acuerdos de San Andrés.

Un grupo de representantes de las diferentes etnias del país pidió también al representante de Naciones Unidas en México, Bruno Guandalini, la intervención del organismo para que se divulgue a nivel internacional la actual situación de las comunidades indígenas mexicanas, la escalada militar en Chiapas y los reportes de la masacre de Acteal.

Después de que indígenas huicholes, zapotecos, mazatecos, tzeltales y tlapanecos entregaron la documentación, el campesino Félix Serdán Nájera explicó a la prensa que el CNI no solicitó la intervención de fuerzas de paz o de cascos azules en Chiapas. ``Planteamos que los acuerdos de San Andrés deben valer para lograr la paz'', indicó.

``El (Guandalini) se mostró muy interesado para que la situación se conozca a nivel internacional a través de la Organización de las Naciones Unidas'', agregó el hombre de 81 años de edad.

El CNI recordó en los textos entregados al organismo y a la prensa que la demanda indígena de autonomía, de respeto a sus pueblos, el reconocimiento a sus territorios, sus sistemas normativos y sus derechos a fortalecer sus lenguas y cultura continúa vigente.

Las aspiraciones de las etnias fueron plasmadas en los acuerdos de San Andrés. No obstante, el gobierno busca modificar los planteamientos de la autonomía y territorialidad, a dos años de distancia de su firma, continuó.

``Seguimos exigiendo que el Ejecutivo retire su contrapropuesta y apoye decididamente la propuesta original de reformas constitucionales. Dos años después, el Ejecutivo hace nuevas observaciones a la iniciativa de la Cocopa y nos extraña que como parte del (Poder) Legislativo ésta no defienda su propuesta'', agregó.

En los documentos, exigió que el gobierno federal reconozca en la Constitución el derecho de las comunidades indígenas a la libre determinación, expresada en la autonomía; ordene el retiro del Ejército Mexicano de las regiones habitadas por las etnias del país; sancione a los autores materiales e intelectuales de la matanza de Acteal; cese el hostigamiento, tortura, encarcelamiento y asesinato de líderes indígenas, y permita la liberación de los presos indígenas por motivos políticos, incluidos los presuntos zapatistas.

La comisión de seguimiento del CNI propuso una nueva reforma al artículo 27 de la Constitución ``para que retome su espíritu original'', la cancelación de los megaproyectos emprendidos en zonas indígenas y el respeto a los sitios sagrados en los cuales el Instituto Nacional de Antropología e Historia pretende realizar conciertos de música.

Las comunidades indígenas hicieron un llamado a la Cocopa y a la Conai ``para que mediante sus buenos oficios impulsen los mecanismos necesarios para la distensión'', y busquen las ``condiciones para el reinicio del diálogo''.