La Jornada 18 de febrero de 1998

MARCHA CONTRA VIOLENCIA E IMPUNIDAD EN MORELOS

Francisco Guerrero Garro, corresponsal, Cuernavaca, Mor., 17 de febrero Ť Miles de personas marcharon esta tarde por las principales calles de esta ciudad para exigir fin a la impunidad, castigo a los funcionarios de todo nivel, sin distinción de rangos o cargos, que estén implicados con hechos delictivos y restructuración total de la Procuraduría de Justicia estatal y de todos los cuerpos policiacos.

Al concentrarse frente al monumento a José María Morelos y Pavón, los manifestantes exigieron aplicar todo el peso de la ley a los servidores que han delinquido desde sus responsabilidades públicas y a quienes lo permitieron al no poner remedio oportunamente, así como poner fin a la impunidad que impera en la entidad y que se recupere el estado de derecho, ``para tener un Morelos en paz como fruto de la justicia''.

Al finalizar el acto, los asistentes voltearon hacia Palacio de Gobierno y durante casi quince minutos, con gritos y consignas, exigieron al gobernador Jorge Carrillo Olea su inmediata renuncia.

``Ante el clima de inseguridad pública e impunidad que vive el pueblo de Morelos, y la evidencia que apunta a elementos de la Policía Judicial del estado como integrantes y protectores de las bandas de secuestradores, es que se decidió hacer esta marcha'', señala un documento que los organizadores entregaron a los asistentes.

En el escrito ``Juntos por Morelos, para recuperar la confianza perdida'', se exige investigar a fondo los hechos delictivos recientes y los nexos que pudiera haber entre los agentes capturados y cualquier otra autoridad, además de enjuiciar a quienes resulten responsables, sin distinción de rangos o cargos, y que se restructure totalmente la Procuraduría y demás cuerpos policiacos y de impartición de justicia.

Los manifestantes recorrieron en silencio el trayecto de la capilla El Calvario al centro de a ciudad, y llenaron totalmente la Plaza de Armas. Los contingentes tardaron más de una hora en desfilar frente al Palacio de Gobierno, antes de colocarse frente al monumento a José María Morelos, donde se leyó un comunicado de la Coordinadora Morelense de Movimientos Ciudadanos.

Al final de la concentración se rompió el silencio, en forma espontánea, cuando los asistentes empezaron a corear consignas pidiendo la renuncia del gobernador.

Durante más de un cuarto de hora corearon: ``¡fuera Carrillo Olea!, ¡que renuncie, que renuncie! ¡que se vaya!''. A pesar de que los organizadores de la marcha trataron de parar los gritos cantando el Himno de Morelos y luego el Himno Nacional, las consignas continuaron.

A diferencia de las dos Marchas del silencio realizadas el año pasado, en la de este día participaron morelenses de toda la entidad y todas las clases sociales, ya que asistieron integrantes de las clases medias y alta, y obreros, campesinos, colonos, sacerdotes y religiosas, comunidades cristianas, comerciantes, transportistas y organizaciones no gubernamentales provenientes de Cuautla y Yautepec, así como de la zona cañera y de Cuernavaca.