A investigación judicial, si edecanes fueron prostituidas
Mireya Cuéllar y Ciro Pérez Silva Ť De acuerdo con un informe confidencial ordenado por la Comisión Régimen Interno y Concertación Política (CRICP), sobre la utilización de edecanes de la Cámara ``en favores de tipo sexual'', diputados de la Legislatura Pasada y edecanes participaron ``de motu proprio en acciones que van más allá de una simple relación amistosa o laboral''.
Ante la polémica que se ha creado en la Cámara de Diputados por la acusación de lenocinio que un grupo de ex edecanes presentó en contra de quien fue su coordinadora, Rebeca Montes de Oca -dijeron que su ex jefa prácticamente las regenteaba-, los coordinadores parlamentarios acordaron abrir las puertas de San Lázaro para que la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal realice las investigaciones pertinentes y ejerza acción penal en caso de encontrar responsabilidades.
Las jóvenes quejosas ya fueron reubicadas en otras áreas de la Cámara (por ello en el informe se alude a ellas como ex edecanes ), y una de las propuestas que será discutida próximamente por los coordinadores parlamentarios es la de suprimir el área de edecanía y en su lugar contratar los servicios profesionales de una empresa del ramo para los periodos de sesiones.
Rebeca Montes de Oca ya fue relevada de la coordinación, pero la Cámara no la puede despedir mientras las acusaciones no sean probadas ante la autoridad, informó la diputada perredista Angélica de la Peña, a quien el Comité de Administración y la CRICP le encomendaron hacer una investigación ``a fondo'' sobre el tema.
Agregó que Montes de Oca ya contrademandó a las edecanes (acusadoras) por difamación, y que por ser integrante del sindicato de trabajadores éste la apoya.
En la Cámara de Diputados las versiones en torno a supuestas relaciones extra laborales entre edecanes y legisladores es ya vieja; sin embargo, nunca se había presentado una demanda penal al respecto. Fue a raíz de que el problema se manejó en los medios informativos que la CRICP ordenó la investigación y recomendó a las afectadas que si ya habían acudido a la prensa debían presentar denuncia ante la autoridad correspondiente, por tratarse de imputaciones ``graves'', se señala en el informe.
Manejado como asunto ``confidencial'', en el informe se indica que las quejas de las edecanes aluden a diputados de la 55 y 56 legislaturas (las dos anteriores), así como a algunos ex funcionarios y funcionarios. Y se precisa que ``no hubo denuncia contra diputados de la actual'' Cámara.
La acusación más grave ``se refiere a que eran utilizadas o negociadas en favores de tipo sexual por su ex jefa, aunque reconocen no tener testigos. Tampoco vieron alguna transacción económica. El argumento principal de todas es que la señora Rebeca `es muy lista' y difícilmente se le podía pescar en algo''.
Montes de Oca dijo durante la investigación interna que ``las ex edecanes actuaban con libertad y ligereza hacia diputados de las diferentes fracciones, e incluso era obvia su relación personal con algunos, cuestión en la que ella no participó''.
``Se habló con las actuales edecanes y no hay ninguna que presente queja contra Rebeca Montes de Oca por esta índole'', se apunta en el informe.
``Este asunto ha sido mal planteado desde el primer momento en que salió a la luz pública, porque se han vertido acusaciones que afectan a la actual institución y ameritan una investigación a fondo por las autoridades judiciales. Es decir, un asunto tan grave como la acusación contra la señora Rebeca se persigue por querella y ante las autoridades respectivas.
``La Cámara de Diputados, su administración, no puede actuar -ante una acusación tan grave- como sino pasara nada, pero tampoco podemos ser Ministerio Público. No se trata sólo de remover a una persona con semejante acusación. Se debe ir al fondo del asunto ante las autoridades respectivas y la Cámara de Diputados debe ponerse a disposición de las autoridades judiciales porque este asunto ha pasado de ser una simple exhibición de la Cámara a una denuncia judicial por posible incitación a la prostitución.
``Si desplazamos a la señora Rebeca Montes de Oca estamos enfrentando un asunto de corresponsabilidad ante la posibilidad de difamación de honor. Es necesario esperar hasta que se prueben las acusaciones.''
El problema ``ha evidenciado algo que no podemos soslayar: la falta de respeto de algunos diputados hacia edecanes, secretarias o empleadas de esta Cámara. Por otra parte, también se recogió información en torno a que algunas edecanes de anteriores legislaturas participaron de motu proprio en acciones que van más allá que una simple relación amistosa o laboral''.
Se recomienda en el informe concluir con el actual sistema de edecanes, y en su lugar se propone que los diputados dispongan del personal de apoyo parlamentario de sus fracciones o comisiones cuando tengan alguna actividad, y que para los periodos de sesiones se recurra a un servicio profesional de edecanía con empresas dedicadas al ramo, con lo cual se evitaría todo conflicto futuro.
``No es posible disimular que con la trascendencia a la opinión pública de este problema se afectó a las actuales edecanes -todas son nuevas-, por lo tanto es necesaria su reivindicación'', se apunta.
El informe fue elaborado por la diputada Angélica de la Peña luego de una serie de indagaciones, no sólo entre personal de San Lázaro, sino también con ex diputados.
La perredista, que en principio dijo estar en desacuerdo con la forma en que los medios de difusión han manejado el tema, quiso dejar muy claro que ``no es una situación que se haya presentado en la actual legislatura, sino que se vivió en la pasada y por diversas razones no se resolvió a fondo''.
Dentro de todo lo malo, apunta, algo positivo sacará esta legislatura del problema; ``se va a limpiar una situación que se da en muchos centros de trabajo y que aquí no se va a permitir porque el buen juez por su casa empieza''.
Sin embargo, agregó, las indagaciones policiacas serán desagradables para miembros de distintos partidos de la legislatura pasada, porque saldrá a relucir la vida personal de algunos de ellos que no sólo mantuvieron alguna relación personal con jóvenes que en ese momento trabajaban como edecanes, sino que hasta excepcionalmente se divorciaron para vivir con ellas.
Esta última situación no implica un problema para la Cámara de Diputados, apuntó, porque se trata de la vida personal de cada quien, pero se evidenciará que las autoridades de la pasada legislatura solaparon ``ciertas situaciones'', si es que se comprueba que hubo algo más que voluntad de las partes para establecer relaciones extra laborales.
``Hay que esperar el resultado de las investigaciones. Por lo pronto, es obvio que se soslayó el problema en otro momento. Nos indigna que la imagen de la Cámara sea tan deplorable'', apuntó.