El plan Barnés, impreciso y mal redactado, afirma, Juan Brom

Claudia Herrera Beltrán Ť El proyecto de Plan de Desarrollo del rector de la UNAM, Francisco Barnés, no lo es propiamente porque no presenta formas concretas de llevar a la práctica los propósitos que anuncia. Además, tiene serias fallas de redacción y faltas de precisión, considera el académico de la Facultad de Ciencias Políticas, Juan Brom.

El profesor señala que la consulta del documento es limitada porque se dificulta ``seriamente'' la participación de la comunidad universitaria.

Entre las opiniones de los universitarios en torno del documento de la rectoría y que fueron publicadas por la Gaceta UNAM, sobresale la de Brom, quien expone su asombro por las declaraciones de las autoridades universitarias en el sentido de que una escasa respuesta al proyecto deba considerarse una forma de consenso.

Advierte que la baja participación de los universitarios en este proceso, que consistió en el envío de propuestas por escrito a la Secretaría de Planeación, ``puede ser resultado de un mal planteamiento o la apatía de universitarios'', dice el destacado profesor y autor de varios libros.

Brom señala también que la convocatoria a la consulta iniciada el 17 de noviembre pasado contiene limitaciones porque las opiniones deben referirse solamente a los contenidos y propósitos del proyecto, lo cual impide cualquier iniciativa, además de que se pide una extensión mínima de cinco cuartillas para la presentación del escrito.

En vez de concebir el proyecto de la rectoría como un plan, el académico lo considera un conjunto de lineamientos, muchos de ellos generales e indiscutibles.

Por su parte, la física Ana María Cetto, considera que se deben ampliar los espacios de participación de la comunidad universitaria y por ello le parece positivo que la rectoría haya puesto a discusión su proyecto de plan de desarrollo.

Opina que algunos órganos de difusión como la Gaceta UNAM no han servido del todo para promover el enlace entre los universitarios, ante lo cual propone que éste se abra a la comunidad, como antes sucedía, cuando se publicaban cartas de académicos, estudiantes y profesores.