Pugna entre mixes por la tierra en Zacatepec; envían a grupo antiguerrilla a la región
Víctor Ruiz Arrazola, corresponsal I/, Quetzaltepec, Mixe, Oax., 5 de abril Ť Un conflicto de límites de tierras que no pudo resolverse durante el Programa Nacional de Rezago Agrario --el cual concluyó en 1997-- provocó que esta comunidad mixe rompiera relaciones comerciales, laborales, y familiares con sus vecinos de San Lucas Camotlán.
Ahora son enemigos a muerte, mientras que su tranquilidad y vida comunitaria se han visto alteradas con la presencia de unos 60 efectivos del Ejército Mexicano, así como de 120 policías judiciales y preventivos, entre ellos 14 miembros de un grupo especial creado para detectar grupos guerrilleros en la entidad.
Ambas comunidades del distrito de Zacatepec Mixe carecen de sus resoluciones presidenciales respectivas, por lo que la ubicación de sus linderos, que se extienden a lo largo de unos 12 kilómetros, aún se encuentra en litigio.
La armonía entre los ocho mil habitantes de San Miguel Quetzaltepec y los aproximadamente mil 500 de San Lucas Camotlán terminó a finales del mes de enero pasado, cuando los comuneros de ésta última comunidad decidieron rozar y quemar 14 hectáreas de la franja de tierra en conflicto, para cultivarlas durante el presente ciclo agrícola.
Los indígenas mixes de Camotlán derribaron árboles y matorrales en una superficie de 14 hectáreas en la zona en conflicto y les prendieron fuego los días 26 y 27 de enero pasado. Una semana después, la asamblea comunitaria de Quetzaltepec decidió impedirles el paso a los de Camotlán, lo que provocó tiroteos de los cuales se acusaron mutuamente.
Los gobiernos federal y estatal intervinieron en el asunto dos meses después de que los dos poblados habían sacado sus armas y subido al cerro en disputa a enfrentarse, cuando ya se encontraban tres personas desaparecidas, e incluso el delegado del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la zona, Floriberto Vázquez, ex presidente municipal de Quetzaltepec, habló sobre la posibilidad de la existencia de células del Ejército Popular Revolucionario (EPR).
Para intervenir en el asunto, el gobierno estatal dispuso que se trasladaran a esta comunidad -ubicada a unos 190 kilómetros al noreste de la ciudad de Oaxaca-, 45 elementos de Policía Judicial del Estado, 70 agentes de la Policía Preventiva, dos agentes del Ministerio Público y un médico, así como el visitador general de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), Alfonso Márquez Uribe, además de 14 elementos del grupo especial de esta dependencia creado para detectar grupos subersivos.
Este grupo de policías contaría con apoyo de unos 60 efectivos del Ejército Mexicano, que hasta la semana pasada se encontraban a unos cinco kilómetros de esta localidad, para operar una estación de radio que mantuviera comunicados a los cuerpos policiacos.
El alcalde de San Miguel Quetzaltepec, Celso Pérez Vázquez, informó que las familias de dos comuneros reportaron su desaparición desde la tarde del 27 de marzo, después de que vecinos de Camotlán entraron al territorio de Quetzaltepec, en la zona cafetalera donde se encontraban trabajando, ``hicieron disparos con armas de fuego y se fueron, desde entonces no sabemos nada de nuestros paisanos, a la mejor ya están muertos o corrieron y se encuentran escondidos en el monte''.
En tanto, el asesor de los comuneros de San Lucas Camotlán, declaró en la ciudad de Oaxaca que el pasado 24 de marzo unos mil hombres armados, originarios de Quetzaltepec, entraron a sus terrenos y tirotearon a un grupo de personas que recogía leña, y las balas alcanzaron a Alvaro Feliciano Marcial, quien quedó tirado en el bosque.
``Mataron a Alvaro Feliciano personas que portaban trajes de soldado''
En una denuncia penal presentada ante el procurador de Justicia, las autoridades municipales de Camotlán, encabezadas por el presidente Máximo José Miramar, dijeron que como a las 11:30 horas del 24 de marzo llegó corriendo al palacio municipal Hipólito Confesor Antonio, ``quien nos dijo que acababan de matar a Alvaro Feliciano Marcial personas que portaban trajes de soldado, a quienes reconoció como vecinos de Quetzaltepec''.
El procurador de Justicia dio a conocer que desde el mediodía del 27 de marzo un grupo de policías judiciales y preventivos, así como un agente del Ministerio Público, buscaron en territorio de Camotlán y en la zona del conflicto el cuerpo del indígena mixe Alvaro Feliciano, pero no lo encontraron; únicamente hallaron casquillos percutidos de armas de fuego de diversos calibres.