``Enterrará'' la evaluación bilateral a la certificación, afirma McCaffrey
David Aponte Ť A propuesta del general Barry McCaffrey, los responsables del combate a las drogas de México y Estados Unidos autorizaron la creación de un ``grupo político de expertos'' que diseñará un mecanismo de evaluación bilateral de las acciones y los resultados antinarcóticos. En principio, tiene el mandato para definir quiénes efectuarán la valoración, de qué manera y con qué propósito.
``Es mi punto de vista que esta cooperación está dando éxitos y que enterrará al proceso de certificación (antinarcóticos del gobierno estadunidense) con base en la demostrada capacidad de trabajar juntos'', dijo el jefe de la oficina antidrogas de la Casa Blanca cuando los periodistas preguntaron si el mecanismo de evaluación bilateral ayudaría a terminar con el procedimiento de calificación de su país.
Después de seis horas de trabajo en el primer día de la quinta reunión del Grupo de Contacto de Alto Nivel (GCAN), el procurador general de la República, Jorge Madrazo Cuéllar, explicó a la prensa que la estrategia bilateral antidrogas considera el establecimiento de un mecanismo que permita examinar la efectividad de la cooperación en la materia.
``Hemos establecido un mandato para la integración de un grupo técnico que pueda realmente responder a tres preguntas básicas: quién evalúa, cómo evalúa y para qué evalúa... Y que fundamentalmente el tema de la evaluación conjunta tiene que ser respecto a los 16 objetivos establecidos en nuestra estrategia'', expuso.
-¿El objetivo sería opacar el proceso de certificación ?
-Sencillamente, nosotros somos socios en la lucha contra el narcotráfico, así nos hemos considerado. Tenemos toda una estrategia, una declaración conjunta de nuestros presidentes y lo que queremos es que todo aquello a lo que nos comprometimos realmente se pueda materializar -respondió Madrazo.
La canciller Rosario Green dijo que los gobiernos de México y Estados Unidos están dando los primeros pasos hacia la creación del proyecto de evaluación conjunto de las acciones y los resultados en la guerra contra las drogas.
La propuesta del general
Durante la sesión de apertura de la quinta reunión del GCAN, el director de la Oficina de Política Nacional para el Control de Drogas de la Casa Blanca propuso al procurador y la canciller de México la conformación de un grupo político de expertos de los dos países para diseñar los parámetros de un programa de evaluación bilateral de los resultados antinarcóticos.
``Nosotros quisiéramos sugerir la formación de un grupo político y que identificáramos a los expertos técnicos que nos dijeran cuáles serían estas medidas adecuadas para medir nuestro desempeño'', expuso en el salón de Consejos de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
De acuerdo con algunos asistentes a la sesión, el proyecto definiría las metas de las autoridades antinarcóticos a corto, mediano y largo plazos. Las partes elaborarían sus propios esquemas de valoración. Posteriormente, intercambiarían la información acerca del cumplimiento de las metas en el combate a los cárteles de la droga.
MacCaffrey dijo que México y Estados Unidos están decididos a eliminar el tráfico de estupefacientes y el consumo en ambos territorios. ``Hemos avanzado una distancia considerable en los dos años de existencia del GCAN. Hemos hecho lo que nos han encomendado nuestros presidentes, formando una institución perdurable para cooperar contra la amenaza que nos enfrenta: el narcotráfico y el abuso de los narcóticos en nuestras dos sociedades''.
Las democracias vecinas, México, Estados Unidos y Canadá, tienen en la actualidad mejores oportunidades para mejorar sus esquemas de cooperación en la materia. ``Estamos orgullosos de la creciente confianza que se está construyendo, de la forma en como se comparte la información y de la colaboración entre las instituciones recíprocas de nuestros dos países'', expresó el general retirado.
En su turno, el procurador Madrazo hizo un balance de los logros alcanzados entre 1997 y el curso de 1998 en los campos de la erradicación y la intercepción de drogas, los ``mejores años'' para México en la guerra contra los estupefacientes:
``Las cifras hablan por sí solas: los resultados finales del año nos muestran aseguramientos que suman 34.9 toneladas de cocaína, mil 30 toneladas de mariguana, 115 kilogramos de heroína, 343 kilogramos de goma de opio y 42.1 kilogramos de metanfetaminas. En el campo de la erradicación, se destruyeron 23 mil 576 hectáreas de mariguana y 17 mil 732 de amapola''.
El procurador mencionó las cifras alcanzadas en los primeros meses de 1998: 5 toneladas de cocaína, 242 toneladas de mariguana, 27.4 kilos de heroína. 18.2 kilos de goma de opio y 3.6 kilos de metanfetaminas, además de la erradicación de 4 mil 360 hectáreas de mariguana y 6 mil de amapola.
Golpe a la certificación antidrogas
Una vez más, manifestó el rechazo del gobierno de México al proceso de certificación. Las autoridades mexicanas respetan dicha legislación estadunidense. ``Sin embargo, no estamos de acuerdo con su existencia. Los argumentos ya han sido sobradamente esgrimidos'', añadió.
La titular de la SRE tomó la palabra y suavizó el tono: el GCAN ha sido un instrumento de gran utilidad en el contexto de los esquemas bilaterales de cooperación. De tal forma que los desacuerdos, cuando los haya, no deben reducir los avances que las partes están logrando, argumentó.
El progreso de los trabajos del GCAN ha coadyuvado a superar la etapa de recriminaciones mutuas y nos ha permitido establecer un diálogo constructivo y plantear soluciones conjuntas. La reunión ``constituye un ejercicio amistoso, ajeno a enjuiciamientos y vital para preservar el ambiente de confianza mutua y respeto, que es la base fundamental de nuestra relación'', agregó.
Al finalizar el primer día de trabajos del GCAN, Green consideró que los acuerdos antidrogas con Estados Unidos y la eventual creación de un mecanismo de evaluación bilateral en la materia son respetuosos de la soberanía y jurisdicción territorial de México.
``Ellos respetan nuestra soberanía e integridad territorial y nosotros hacemos exactamente lo mismo con la soberanía e integridad territorial de Estados Unidos'', expresó.
Del tema de los helicópteros Huey donados por el Pentágono para operativos antidrogas, adelantó que las delegaciones de ambos países dialogan sobre el asunto. Los resultados quedarán reflejados en un comunicado conjunto, concluyó.
A pesar de que el tema de la seguridad de los agentes de la DEA no estuvo en la mesa de Tlatelolco, funcionarios de la agencia comentaron que no van a cejar en sus intentos porque sus elementos adscritos a México porten armas, ``no por cuestiones de inmunidad diplomática, sino por razones de seguridad''.
Altos directivos de la DEA asisten a la quinta reunión del GCAN como observadores. Hasta el momento, las autoridades de México y Estados Unidos no han llegado a un acuerdo respecto de los sistemas de protección de los agentes antinarcóticos. Incluso, los 22 miembros fronterizos dejaron de cruzar a territorio mexicano, con el argumento de falta de garantías.
La quinta reunión del GCAN concluye este martes con una conferencia de prensa conjunta.