La Jornada 7 de abril de 1998

FAO: alteró El Niño la producción agropecuaria en AL

Angélica Enciso Ť El representante del Fondo para la Agricultura y la Alimentación de las Naciones Unidas (FAO) en México, Augusto Simoes Lopes, dijo que el fenómeno de El Niño ha cambiado el panorama del desarrollo de la producción agropecuaria de América Latina, el cual hasta el año pasado fue positivo, pues se había presentado un crecimiento sostenido.

Ahora, dijo, se prevé que varios países eleven sus importaciones; los más afectados en su producción hasta el momento han sido Perú y Ecuador, para los cuales se han destinado apoyos de emergencia. México, precisó, a pesar de haber tenido impactos negativos por lluvias y sequías no ha recurrido a ese apoyo.

En conferencia de prensa donde presentó el más reciente Informe sobre el Estado de la Agricultura y la Alimentación, el responsable de Asuntos Internacionales de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Víctor del Angel, dijo que ha sido difícil predecir el impacto de los fenómenos climáticos en la agricultura, y los ``efectos que se tienen para este año no son dramáticos, por lo que la producción se podrá mantener en los niveles actuales''.

Simoes Lopes, recién nombrado representante de la FAO en México, indicó que en 1996 el crecimiento en la producción alimentaria en América Latina fue de 3.2 por ciento, inferior a la de años anteriores como 1994, cuando fue de 4.9 por ciento, y 1995, con 4.4.

Respecto a la situación agropecuaria de México, consideró que gracias a la creciente producción de granos básicos obtenida durante los últimos dos años no se ubica entre los países críticos de la región.

Agregó que la perspectiva es positiva y se han aplicado programas como Alianza para el Campo, Procampo y Produce, que han permitido la descentralización con mayor cooperación entre los gobiernos federal y estatales junto con el sector privado, con el fin de crear oportunidades económicas en las zonas rurales y reducir las diferencias de ingreso.

El informe precisa que en la región, tras ``un largo periodo de crecimiento mediocre'' el sector agrícola presentó por tres años consecutivos un comportamiento relativamente firme que ``ha hecho concebir nuevas esperanzas sobre la posible aparición de una tendencia más favorable''.

``No obstante, un periodo tan breve de recuperación no permite llegar a ninguna conclusión definitiva sobre la importancia de los mutables factores climáticos y de mercado con respecto a un progreso de carácter más estructural, asociado en particular a las reformas agrícolas y económicas que se están dando'', agrega el documento.

Detalla que el crecimiento ``relativamente fuerte'' en 1996 fue resultado de acontecimientos como cosechas muy abundantes en México y Argentina, producción elevada en Brasil, fuerte desaceleración del crecimiento en la producción de Chile y situación de escasez en Colombia.

Sobre los productos básicos indica que los cereales y la caña tuvieron un gran crecimiento y el café se recuperó, mientras la producción de cacao bajó por segundo año consecutivo.

Precisa que la seguridad alimentaria ha sido un tema frecuente en la formulación y aplicación de políticas en los países de América Latina y el Caribe, y a pesar de la tendencia general hacia la liberación del mercado muchos países han aplicado programas para sostener los precios a favor de los cultivos considerados de importancia para esa seguridad.