Acotar el poder de veto, pide México a las ``5 monarquías'' de Naciones Unidas
Notimex, Nueva York, 21 de abril Ť México pidió hoy a los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU dar una muestra de madurez y abrirse a la idea de restringir la aplicación del poder de veto, para democratizar al órgano ejecutivo de Naciones Unidas.
``Nuestra realidad es que, a escasos dos años de un nuevo siglo, contamos con cinco monarquías absolutas'' en la ONU y deseamos que consideren modificar esa estructura, indicó el embajador de México ante el organismo, Manuel Tello.
Al abrir el debate del grupo de trabajo sobre la reforma del consejo, Tello dijo que si aceptaran el llamado al cambio, ``los miembros permanentes darían muestra tangible de su voluntad política'' para democratizarlo y reformarlo.
El Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas está integrado por 15 países, cinco de ellos permanentes --Rusia, China, Francia, Estados Unidos y Reino Unido-- con poder de veto sobre cualquier decisión, y diez miembros no permanentes sin veto, que cumplen periodos de dos años.
Esta estructura rige desde la creación del organismo (1945) y en los últimos años, en particular tras el fin de la guerra fría, ha habido presión de gran parte de la comunidad internacional para reformarlo, democratizarlo y hacerlo más representativo.
Reticencia a ceder o compartir privilegios
Cualquier cambio a la estructura debe ser aprobado por los cinco miembros permanentes que, por razones obvias, son reticentes a ceder o a compartir los privilegios de los que gozan y que les otorgan un peso preponderante en la organización.
En su discurso, el diplomático mexicano refirió algunas de las ocasiones, en los casi 53 años de historia de la ONU, en que el veto ha sido utilizado de manera abusiva por uno o varios de los países que lo tienen.
Tello indicó que ``por realista'', México ``no pretende que los cinco miembros permanentes renuncien a todas las prerrogativas de que gozan'', pero sí que reflexionen sobre el papel de las Naciones Unidas del siglo XXI.
``Deseamos que consideren la posibilidad de convertirse en monarquías constitucionales'', enfatizó Tello, al referir el contexto histórico con el que cada uno de los cinco países permanentes limitaron el poder absoluto en su propio territorio.
``Resultaría irónico que en nuestros días los mismos países que lograron en sus regímenes internos establecer limitaciones al poder absoluto, sean precisamente los que se opongan a aplicar a la vida internacional los valores que sustentan sus instituciones'', resaltó.
El diplomático mexicano manifestó que ``lo que no será posible y nunca aceptaremos es que sin ceder en nada, algunos de ellos pretendan que el inmenso poder y privilegios de los que gozan se hagan extensivos a otros países''.
Ello, en abierta referencia a la propuesta para que ingresen al consejo en calidad de permanentes y con poder de veto, Japón y Alemania, y en calidad de semipermanentes y sin veto, naciones de Africa, Asia y América Latina.
México propone que el uso del veto se limite a medidas coercitivas que tome el Consejo de Seguridad de la ONU, al amparo del capítulo VII de la Carta de Naciones Unidas, que prevé el uso de la fuerza (militar) cuando haya amenaza a paz y seguridad internacionales.
``Han pasado más de 50 años y la situación sigue igual'', dijo Tello. ``Más que un acto responsable de poder, el ejercicio del veto es la manifestación de debilidad de una posición que no puede defenderse con argumentos'', concluyó.
El debate sobre el tema del veto en el grupo de trabajo se extenderá toda esta semana, y constituye sólo una faceta del complicado esquema de revisión de estructura, atribuciones y funciones del órgano ejecutivo de la Organización de Naciones Unidas.