500 intelectuales y grupos europeos repudian expulsiones de observadores

David Aponte Ť El embajador de Italia, Bruno Cabras Melchiori, aceptó que el gobierno mexicano ``actuó conforme a derecho'' en la aplicación del artículo 33 de la Constitución -la expulsión inmediata- a 40 observadores italianos.

Durante una reunión con el subsecretario para América Latina y Asia-Pacífico de la cancillería, Carlos A. de Icnaza -encargado del despacho-, el representante italiano no presentó nota de protesta alguna por la determinación de la Secretaría de Gobernación, informó el vocero de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Leonardo French.

La posición del embajador Cabras contrastó con los reclamos del legislador italiano Paolo Cento, quien pidió a su gobierno una protesta formal a México por la expulsión de los 40 observadores.

El comportamiento de las autoridades mexicanas ``resulta inaceptable y poco democrático''. En todo momento, los funcionarios de México trataron de impedir que la misión de 130 personas, entre ellos legisladores y representantes de alcaldías en Venecia, Génova y Trieste, entregara ayuda humanitaria a las comunidades de Chiapas, declaró a la agencia Afp.

Cento, de la coalición de gobierno de centro-izquierda, recordó que voceros de la delegación que viajó a México acudirán a la sede del Parlamento Europeo, en Estrasburgo, para solicitar que ese órgano ponga como condición el respeto a los derechos humanos para la ratificación del acuerdo comercial entre los 15 países europeos y las autoridades mexicanas.

``La condición de que hay que respetar los derechos humanos ya existe y vamos a probar que el gobierno mexicano no la cumple. El gobierno mexicano predica una cosa y hace otra: en Chiapas hay una abierta violación a los derechos humanos, sobre todo contra mujeres y niños'', dijo.

No obstante, la petición del legislador no fue atendida. El embajador italiano en México acudió ayer a las instalaciones de la cancillería para exponer ante el encargado del despacho que no había problema, que el gobierno mexicano actuó conforme a derecho.

A su salida del encuentro privado, el representante diplomático no quiso hacer ningún comentario a la prensa. ``Hemos dormido una hora y media. Estamos muy cansados y tenemos prioridades'', argumentó uno de sus acompañantes.

Descarta la SRE fricciones

En un comunicado de prensa, la legación italiana convalidó la expulsión de los 40 observadores: la embajada mantuvo contacto permanente con las autoridades mexicanas, las cuales cumplieron con el contenido de la Convención de Viena sobre relaciones consulares.

``A lo largo de este tiempo, funcionarios de la embajada, asistidos por su asesor jurídico, pudieron prestar toda la asistencia consular debida y observar el respeto que guardaron las autoridades mexicanas a los derechos y a la integridad personal de los observadores'', añadió la embajada.

El vocero de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Leonardo French, comentó que no hay ``ninguna fricción'' diplomática o política entre los gobiernos de México e Italia, derivada de la aplicación del artículo 33 constitucional a los observadores italianos.

Mientras, el subsecretario para América del Norte y Europa, Juan Rebolledo Gout, comenzó un intenso cabildeo en varias naciones europeas, en la víspera de que el Parlamento Europeo ratifique el acuerdo comercial de la UE con México.