La Jornada 25 de mayo de 1998

Casablanca, trampa de EU para darnos una lección: casas de cambio

César Martínez Ť La operación Casablanca fue provocada por el gobierno de Estados Unidos porque sus agentes que ofrecieron ``comisiones'' a los funcionarios bancarios mexicanos para lavar dinero no tenían, al menos al inicio, ninguna infiltración en el narcotráfico, aseguró Manuel Abreu Vargas, presidente de la Asociación Mexicana de Casas de Cambio (AMCC), aunque reconoció que se demostró la vulnerabilidad del sistema financiero mexicano a estos ilícitos.

``Si la información que tengo es correcta, personas del gobierno americano buscaron empleados de la banca de nivel medio hacia abajo y les ofrecieron `comisiones', sobornos, para realizar operaciones de dinero, sin que preguntaran de dónde provenían los fondos'', comentó Abreu en entrevista.

La versión por la cual los agentes estadunidenses estaban en medio, entre los cárteles de la droga y los funcionarios bancarios, podría creerse si los montos de las operaciones fueran de miles de millones de dólares, que son las cifras manejadas en estos delitos, pero sólo se habla de entre 80 y 130 millones, añadió.

Abreu, habituado por su actividad a participar en congresos y ponencias sobre el tema de lavado de dinero en el sistema financiero, señaló que, según fuentes suficientemente enteradas, la cantidad de los ilícitos descubierta en esta operación, para un plazo de tres años, es una prueba de que no se trataba de relaciones con el narco.

Además, de haber estado infiltrados en el narcotráfico, significaba que arriesgaban la vida, y ``eso ya es de película de las más sofisticadas y no creo que fuera así'', dijo el dirigente de AMCC.

La causa probable por la cual Estados Unidos preparó tal trampa, es ``darnos una lección, porque a ellos les encanta manejar que todo lo malo está fuera de su país, y convertirse en los jueces del mundo, pero no voltean a ver adentro cómo tienen la casa'', opinó Abreu, aunque no descartó tampoco intenciones políticas.

Reconoció que con las revelaciones de la operación Casablanca se demostró al mundo la seriedad del problema, y se comprobó la vulnerabilidad del sistema financiero mexicano frente al lavado de dinero y otros ilícitos como fraudes y robos.

Sin embargo, aclaró que en México esto es entendible porque recién se empiezan a aplicar reglas realmente concretas para evitar este tipo de operaciones. Desde que se publicaron las normas en marzo de 1997, las instituciones de intermediación financiera tenían la obligación de reportar transacciones sospechosas, pero no estaba definido cuándo lo eran, ni había un formato establecido para el informe.

Con la aprobación de los manuales de prevención contra delitos de lavado de dinero, en enero pasado en el caso de las casas de cambio, este problema fue subsanado y, además, a partir de abril de 1998 se hizo también obligatoria la norma que obliga a reportar las operaciones relevantes, es decir de más de 10 mil dólares.

No obstante, llevará muchos años igualar a Estados Unidos en los controles, ya que este país tiene más de 20 años aplicándolos y debe entenderse que en México ``somos novatos'' en la materia, agregó.

Abreu adelantó que esta semana su asociación se reunirá con autoridades económicas para analizar qué otras medidas pueden tomarse para evitar los ilícitos.

Precisó que el único antecedente en su ramo fue el cierre de dos casas de cambio en Monterrey entre 1989 y 1990 por estar implicadas en lavado de dinero. Aclaró, sin embargo, que la gran mayoría de las instituciones cambiarias que hoy funcionan en el norte del país y en la frontera con Estados Unidos son los llamados centros cambiarios, que trabajan al menudeo y no tienen control de parte de las autoridades, pero que son pocas las sucursales de las 34 casas de cambio --que sí están reguladas-- las que funcionan allí.

Comentó que a pesar de temores iniciales de pérdida de clientes por la operación Casablanca, el público reaccionó positivamente en sus negocios. Aunque admitió que hace 10 o 15 años la forma de lavar dinero pudo basarse en el cambio de moneda, Abreu afirmó que por la evolución y sofisticación de sus métodos, hoy día en la mayor parte de los casos se dirigen a grandes inversiones como hoteles u otros.