La Jornada 28 de mayo de 1998

Zedillo: a nadie conviene que a México le vaya mal

Rosa Elvira Vargas, Jesús Aranda y Claudia Herrera Ť La definición de una agenda de temas a resolver en los próximos periodos de sesiones del Poder Legislativo fortalece a la República, aseguró ayer el presidente Ernesto Zedillo, quien resaltó que una relación madura, útil y constructiva entre el Congreso y el Ejecutivo significa un paso fundamental para afianzar la normalidad democrática.

``A nadie conviene que a México le vaya mal'', enfatizó más tarde durante una breve gira por Hidalgo. Ahí mismo dijo que es corresponsabilidad de todos hacer lo necesario para que México siga adelante.

Señaló que durante su reunión del pasado martes con los coordinadores parlamentarios expuso a detalle cada una de las iniciativas que ha turnado al Legislativo y, sobre todo, destacó las razones por las cuales el Ejecutivo les atribuye la mayor importancia. En este contexto, mencionó que el interés de su administración es construir las bases jurídicas e institucionales que permitan contar con un sistema financiero ``que realmente coadyuve al desarrollo del país''.

Nuevo camino para el diálogo

La reunión con los coordinadores parlamentarios, había dicho por la mañana en la ciudad de México, abrió ``un nuevo y más amplio camino'' para el diálogo, los acuerdos y el entendimiento.

Confió en que después del acuerdo alcanzado en Los Pinos para discutir las iniciativas en materia financiera, de seguridad y justicia, y sobre derechos indígenas, ``sería factible, y de hecho reconocimos que sería deseable'', que la Comisión Permanente convoque a un periodo extraordinario de sesiones para discutir y en su caso dictaminar dichas iniciativas.

Zedillo, quien en todo momento definió como ``muy interesante'' el encuentro con los líderes camarales, dijo que percibió en todos ellos una ``genuina preocupación'' para que de acuerdo con sus propias ideas y desde su posición política contribuyan a superar los problemas económicos y los asuntos políticos del país.

Dicho interés, abundó, se advierte sobre todo en los temas relativos a que el fortalecimiento de la vida democrática y republicana sea ``parte importante de las soluciones que estamos buscando''.

El jefe del Ejecutivo afirmó, ante miembros de la comunidad politécnica, que ``un paso fundamental para afianzar la normalidad democrática es edificar una relación madura, constructiva y útil entre los poderes Ejecutivo y Legislativo'', al tiempo que destacó su reconocimiento a la actitud de los legisladores.

Señaló además que una larga y sentida aspiración de todos los mexicanos ha sido vivir en una plena democracia, por lo que es fundamental que se hayan dado pasos claros, firmes y sustantivos para llegar a la ``normalidad democrática'' que vive el país.

En este sentido, dijo que la democracia ``no comienza ni acaba con las elecciones y no se construye sólo con reformas, sino que ésta se fortalece cada día y requiere de la participación de todos''. Agregó que la relación entre los poderes Ejecutivo y Legislativo debe fundarse en el respeto mutuo, en la observancia de las atribuciones que la Constitución otorga a cada poder y en una ``correspondencia efectiva y eficaz''.

Luego de destacar que el diálogo entre funcionarios del Poder Ejecutivo y representantes del Legislativo es habitual y que esos encuentros suman mil 779 desde septiembre del año pasado hasta ahora, Zedillo estableció que la reunión con los coordinadores parlamentarios de PRI, PAN, PRD, PT y PVEM se caracterizó por un claro ánimo de fortalecer el respeto y la cooperación.

Ante un auditorio formado por quienes llamó ``mis amigos politécnicos'', pues fue la institución donde él se formó como economista, el jefe del Ejecutivo se refirió de inicio a la pospuesta intención del rector del Politécnico, Diódoro Guerra, de aspirar a la candidatura priísta para el gobierno de Tamaulipas.

``Como siempre -dijo-, me da mucho gusto celebrar este día con la comunidad politécnica. Por cierto, quiero también celebrar que el ingeniero Diódoro Guerra prefirió la educación politécnica a la política tamaulipeca. Siempre hay que tener en la vida muy claras las prioridades.''

Fobaproa, tema prioritario

Luego, el Presidente se concentró en el tema de su reunión con los miembros del Poder Legislativo. Señaló que resulta ``alentador'' que se haya convenido una agenda ``incluyente y equilibrada'' que atienda los temas de interés del Ejecutivo, pero también los de los distintos grupos parlamentarios.

Señaló que durante la reunión expuso a los legisladores, ``con todo detalle'', las razones de su interés en los temas agendados, y subrayó que un tema relevante ``para el presente y para el futuro'' de nuestra economía es el relacionado con el sistema financiero -en el que destaca el Fobaproa.

Ante la versión que algunos medios informativos difundieron acerca de que durante la reunión con diputados y senadores no se había tratado el aspecto financiero, el jefe del Ejecutivo señaló que por el contrario, fue precisamente este tema el primero que se tocó en la agenda. Incluso, mencionó que dada la importancia del asunto se planteó que ``a la brevedad'' se avance en los trabajos que permitan que el Congreso ``pueda considerar, pueda enriquecer, pueda debatir, y en su caso, si así lo desea el Legislativo, aprobar las iniciativas presentadas por el Ejecutivo''.

Destacó asimismo la ``enorme receptividad y comprensión'' de los legisladores en cuanto al tema de seguridad y justicia, que se ha convertido en un ``clamor'' de todos los grupos sociales.

El Presidente afirmó que los legisladores se mostraron muy receptivos con relación al tema de los derechos indígenas, ``en donde discutimos que el propósito fundamental de esta reforma es atender el problema de las comunidades indígenas de nuestro país, y como una parte muy importante para contribuir al proceso que nos lleve realmente a la reconciliación y al desarrollo en el estado de Chiapas''.

Ante la posibilidad de que se convoque a un periodo extraordinario, indicó que el Ejecutivo estará a disposición del Legislativo para proveer toda la información, a fin de llevar a cabo todas las negociaciones que sean pertinentes, sobre todo para que sus integrantes, ``atendiendo su propio punto de vista'', puedan enriquecer las iniciativas del Ejecutivo y se desahoguen así asuntos fundamentales para la vida nacional.

Durante una reunión evaluatoria de las políticas de empleo emprendidas en Hidalgo, el presidente Zedillo habló también de su encuentro con los diputados y senadores, y de nuevo dio relieve al aspecto económico de la charla. Allí dijo que ``quizá una de las expresiones más relevantes que escuché fue la de un legislador de un partido distinto al mío, quien me dijo: señor Presidente, usted debe tener toda la seguridad, como la debe tener todo el pueblo de México, que con independencia de nuestras situaciones y posiciones partidistas particulares, todos y cada uno de nosotros queremos contribuir genuinamente a que México enfrente exitosamente sus problemas económicos''.

Ese planteamiento, señaló el mandatario, debe ser lo que compartan hoy todos los mexicanos. A nadie conviene que a México le vaya mal. Todos serán beneficiarios del progreso del país y por ello todos son corresponsables de hacer las cosas que se consideren necesarias para que la nación siga adelante.

Esto, había dicho también, para que cuando en el año 2000 haya un cambio de poderes federales, México se encuentre en una buena circunstancia: que los próximos gobernantes reciban un país en marcha, en crecimiento y con una continuada tarea de construir las bases para que los primeros años del próximo siglo sean de desarrollo y con políticas que conduzcan al progreso y a la justicia social.

Hidalgo, acarreo y sólo acarreo

Al término de la reunión con estudiantes del Politécnico, el presidente Zedillo voló en helicóptero a Pachuca. Al llegar, puso en marcha la primera fase del acuaférico de la capital hidalguense, con el cual se dotará de mayor volumen del líquido a los habitantes de la región.

Ciertamente, la obra resultaba fundamental, porque según las explicaciones oficiales hacía más de 20 años que no se dotaba de un solo metro cúbico adicional del líquido a esa ciudad. Hoy se tiene, aseguró, casi 50 por ciento más que la dotación anterior, aunque algunos enterados reportaron que la nueva obra ha provocado muchas fugas por ruptura de tuberías.

Con todo, y en una de las típicas concentraciones multitudinarias que acostumbra organizar el gobernador Jesús Murillo Karam cuando tiene visita presidencial, esta vez, a primera vista, parecía un contrasentido que la gente reclamara agua cuando de lo que se trataba era de festejar que ahora ya se tiene. Lo cierto es que tanto aquí como en la posterior inauguración de una avenida, las personas pedían agua, pero para beber, ¡en ese momento!

Resulta que no sólo fueron llevados muchos más de los que el gobierno anunció a los coordinadores de los eventos, sino que los hicieron venir desde varios municipios de la entidad, con muchas horas de antelación y, parados a pleno rayo de sol, nada se les ofreció para paliar su sed.

Así, mientras el Presidente saludaba a la gente de las vallas, recibía peticiones, bienaventuranzas y hasta estampitas de santos, con frecuencia se oían voces de ``queremos agua'', pero también fue audible un ``Zedillo, amigo, no alcanza pa'l bolillo''.

El Presidente -que en broma dijo que estaba enojado porque en lo que va del año sólo ha visitado en dos ocasiones el estado de Hidalgo- fue enfático al ponderar la obra material, laboral y educativa que en esta entidad ha logrado Chucho Murillo Karam. El mandatario fue interceptado también en la calle por una señora a la que, sin detenerse, le escuchó decir que quería denunciarle las condiciones de explotación que viven los trabajadores. ``A eso vengo'', le respondió Zedillo.

Más tarde, durante una reunión sobre empleo escuchó diversas experiencias de inversión y planes para la continuación de éstas. Zedillo puso a Hidalgo como ejemplo de desarrollo y aplicación para superar el rezago educativo, y cuando ya se despedía de los asistentes hizo chanzas sobre el equipo local de futbol, se detuvo con algunos empresarios conocidos y auguró un futuro mejor para Hidalgo. Cuando caminaba hacia la salida, su amigo Chucho Murillo Karam lo seguía diligente, mientras fumaba.