La Jornada 7 de junio de 1998

FIN A LA HUELGA EN AEROMEXICO; 18.3% DE AUMENTO SALARIAL

Angeles Cruz Ť Los sobrecargos de Aeroméxico decidieron ayer concluir la huelga que mantuvieron durante seis días y aceptar los puntos del acuerdo firmado por sus representantes con la empresa.

En medio de una gran algarabía, escucharon y festejaron cada uno de los logros laborales; entre los más significativos, el establecimiento de jornadas de trabajo precisas, la asignación de tiempo extra en forma equitativa y un pago adicional a partir del cuarto aterrizaje en un día.

Desde temprano se preveía que la asamblea convocada para el día de ayer a las 13 horas se desarrollaría sin problemas para solucionar el conflicto en la aerolínea. Así, Alejandra Barrales, secretaria general de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación (ASSA), fue recibida con porras y aplausos. Todos sabían ya que el movimiento había valido la pena, a pesar de que no pudieron ejercer al ciento por su ciento su derecho a la huelga por la requisa que impuso el gobierno federal.

``Nuestra huelga fue aparentemente simbólica'' señaló Barrales, sin embargo, fueron la movilización y organización de los trabajadores lo que les permitió conseguir mejoras en sus condiciones de trabajo. Además del incremento salarial de 18.3 por ciento directo al tabulador, los sobrecargos obtuvieron que sus jornadas sean de seis días de trabajo por cuatro de descanso. Antes, explicaron, ``no sabíamos cuándo volábamos ni qué días y dónde nos tocaría descansar''.

El convenio señala el compromiso de la aerolínea de pagar 140 pesos por cada aterrizaje, a partir del cuarto en un día. Según explicaron los propios trabajadores, que en su mayoría son mujeres, cada sobrecargo puede realizar hasta 10 vuelos en un día, y hasta antes del movimiento no recibían ninguna compensación adicional.

Otro de los beneficios, que también fue muy festejado, es el pago de horas de vuelo nocturnas. Cualquier servicio entre las 22 horas y las cinco de la mañana generará esta retribución, que será equivalente al 0.20 por ciento del salario base.

Respecto al punto más crítico de la negociación, la integración de tripulaciones en cada vuelo, Barrales explicó que Aeroméxico se ha comprometido para que en adelante los viajes en DC-9 lleven tres sobrecargos y cuando se sirvan alimentos calientes, serán cuatro.

Los vuelos MD's tendrán en forma permanente cinco sobrecargos -antes salían con tres o cuatro-; los 757, que antes se iban con cuatro, ahora llevarán seis y cuando se trate de viajes internacionales el número se elevará a siete.

Asimismo, siete sobrecargos abordarán los vuelos 767 -anteriormente subían cinco nada más- y en los internacionales serán ocho. En caso de que alguno o algunos de los vuelos no complete la tripulación establecida, la empresa se compromete a pagar equitativamente entre los que viajen los salarios y viáticos faltantes.

Barrales también explicó que ninguno de estos compromisos implicará alguna afectación económica a la empresa, tal como lo había señalado en días pasados Alfonso Pasquel, director de Aeroméxico. Definitivamente, dijo la dirigente sindical, ``no haríamos ni pediríamos nada que afectara nuestra fuente de trabajo''.

La también sobrecargo destacó que el movimiento que comenzaron hace varios meses, y que esta semana alcanzó su máximo nivel con la suspensión de las actividades, tuvo como principal objetivo recobrar el trato digno que merecen como trabajadores.

Por otra parte, Aeroméxico se comprometió a que las 300 plazas de sobrecargo que actualmente son de confianza, pasarán a la plantilla de las sindicalizadas, con lo que llegará a mil 333 trabajadores el número de integrantes de ASSA. La empresa también acordó construir la guardería para los hijos de las sobrecargos en un terreno del organismo sindical que se encuentra enfrente del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. La administración estará a cargo del Seguro Social e incorporará horarios de estancia de 24 horas.

Sobre el retiro voluntario, Barrales explicó que Aeroméxico aceptó que cualquier sobrecargo (hombre o mujer) que complete 15 años de antigüedad podrá optar por el retiro voluntario con un pago de cinco meses de salario y 20 días por año. Debido a que por el momento no hay nadie con el tiempo de trabajo establecido, será hasta dentro de cinco años cuando se inicie el proceso con 75 retiros. En los años subsecuentes podrán optar por este mecanismo 15 personas cada 12 meses.

Luego de explicar detalladamente cada una de los acuerdos prefirmados con las autoridades y que tendrían que ser aceptados por los trabajadores en asamblea para ser definitivos, la propuesta fue sometida a votación y por mayoría se optó por la conclusión de la huelga.

Satisfechos con los logros, los trabajadores tuvieron un momento de duda: ``¿a cambio de qué obtuvimos esto?''. Barrales fue enfática: ninguno de los derechos de los empleados se sometió a negociación y ya se terminó ese estilo, por el cual ``para poder avanzar teníamos siempre que ceder en algo''.

Por la tarde, la representación de los trabajadores y de la empresa firmaron el convenio en la Secretaría del Trabajo y Previsión Social e inmediatamente se retiraron las banderas rojinegras de las oficinas y mostradores de Aeroméxico.