La Jornada 7 de junio de 1998

Oscuro panorama en Colombia: Tiro Fijo

Patricio Echegaray* /I, especial para La Jornada Ť Atravesando la geografía a veces despiadada de la montaña colombiana, la selva tropical, tratando de parecer invisible para las bandas paramilitares que campean en los poblados, finalmente un grupo de políticos de la izquierda latinoamericana logramos llegar recientemente hasta el comandante Manuel Marulanda Vélez, dirigente histórico de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), unidas ahora con el Ejército Popular (EP).

El encuentro estaba previsto dentro de una ofensiva política y diplomática que lleva adelante el movimiento guerrillero colombiano para que el mundo conozca la realidad de esta larga lucha, la legitimidad de su resistencia y las propuestas para la pacificación de la sociedad colombiana sobre las bases de una auténtica democracia y justicia social.

Fue el primer encuentro de estas características que se realiza en los 40 años de enfrentamiento militar que sostiene la FARC, como una expresión de la presencia revolucionaria del pueblo colombiano.

Al finalizar este encuentro pude dialogar largamente en una entrevista exclusiva con el comandante Marulanda Vélez, indagué sobre diversos temas y especialmente traté de aclarar las confusiones producto de la desinformación o la manipulación que la prensa amarillista o los intereses imperantes difunden sobre la situación de Colombia, en momentos que se ha planteado, incluso la posibilidad de una intervención militar de Estados Unidos.

Allí en plena montaña colombiana preguntamos al legendario Tiro Fijo sobre los resultados de la reunión del pleno realizado en noviembre de 1997 y sobre la coyuntura política en Colombia.

``Realizamos nuestro pleno del estado mayor FARC-EP --indica -- para analizar el fenómeno político, económico, social y cultural de nuestro país. Nos reunimos seis días sin apremios y con plena libertad pese a los operativos Destructor II que se desplegaron. Allí aprobamos una declaración política para el pueblo colombiano con un contenido altamente revolucionario.

``Hicimos un llamamiento para que la gente vaya a ocupar sus puestos de lucha desde sus fuentes de trabajo, porque no sólo llamamos frente de lucha a los sitios donde se libra la pelea armada, sino que hay distintos frentes en el accionar revolucionario. Me preguntan cuál es la coyuntura y cómo evaluamos la situación. Como dice la declaración del estado mayor central, el panorama para el pueblo colombiano no puede ser más oscuro.

``El terror del Estado se incrementa, la motosierra que arrasa la naturaleza, se ha convertido en un arma de guerra sucia oficial, los paramilitares cortan cabezas de miles de compatriotas con la complacencia y el aval gubernamental y les usurpan las tierras, lanzando a millones de campesinos al desplazamiento forzoso. Padece Colombia la gestión arrodillada de un presidente que entregó aún más a Estados Unidos nuestra soberanía, mientras un Congreso corrupto y desprestigiado, legisla en función de la guerra contra el pueblo y en defensa de los intereses foráneos''.

--Es una crisis que se advierte en las calles del país.

--Sí, y es que para recomponer el régimen político cada cuatro años realizan elecciones, es una farsa de elecciones donde está garantizada la participación sólo a los comprometidos con su opinión e intereses, pues a la oposición revolucionaria la siguen matando a tiros. Y para mantener esta situación el régimen y sus gobiernos de turno han prolongado cruelmente una situación de violencia y confrontación, desplegando con sevicia e ineficacia su fuerza militar por todo el país, como un verdadero ejercito de ocupación.

``Pero junto a esto, uno de los rasgos relevantes es también el despertar del movimiento popular manifestado en miles de combates y movilizaciones que desafían el terror del Estado. En esta dirección se hace necesaria la convergencia, la rebeldía e insubordinación popular. Por eso lanzamos el Movimiento Bolivariano por la Nueva Colombia para contribuir a la organización y lucha de todos los colombianos por una patria democrática.

Tiro Fijo explica: ``Este nuevo Manifiesto Bolivariano que aprobamos en el pleno pretende remplazar al movimiento llamado en su momento Unión Patriótica, que desapareció por el accionar del enemigo que ha matado a sus cuadros y militantes y no ha contado con garantías del poder político para desarrollar su proselitismo. En la primera campaña electoral donde participó logró convertiste en la tercera fuerza y con su caudal ganó 14 parlamentarios, bastantes alcaldes y concejales''.

Y esta situación, señala el comandante guerrillero, ``asustó bastante a la oligarquía, porque ellos están enseñados a que nadie les hiciera oposición. Por lo tanto el gobierno lanzó su política de exterminio. Ahora, el Movimiento Bolivariano deberá actuar clandestinamente hasta en tanto se den nuevas condiciones: en las fábricas, empresas, en el taller, en la vereda, en las carreteras, donde quiera que estén las fuentes de trabajo. El objetivo es realizar cambios en este país a través del debate político y a través de la lucha.

--¿Qué tipo de gobierno proponen las FARC-EP?

--Queremos un gobierno pluralista, donde estén representados todos los partidos y sectores sociales, un gobierno verdaderamente democrático y patriótico, como lo proponemos en los 10 puntos de la Plataforma para un gobierno de reconstrucción y reconciliación nacional. Es una plataforma aún no acabada porque debe ser enriquecida todavía más por el propio pueblo

Diálogo, pero con garantías

--¿Cuál es la posición de las FARC-EP respecto de un diálogo de paz?

--Como dice el documento del pleno, en la paz está comprometida toda nuestra voluntad. Persistimos en nuestra posición favorable a realizar encuentros de las FARC-EP, con representantes de la sociedad que conduzcan al diálogo con los poderes del Estado, para lo cual es necesario tener las garantías imprescindibles materializadas en el despeje de los municipios de La Uribe, Mesetas, Vistahermosa, La Macarena y San Vicente de Caguán, por parte del gobierno samperista.

``Cualquier proceso que se inicie debe tener como tarea concretar una Asamblea Nacional Constituyente que le cambie a Colombia sus relaciones de poder en favor de los sectores populares. Pero tengamos en claro que el presidente Ernesto Samper no quiso hacer la paz con nosotros. Cuando él tomó posesión e hizo un planteamiento de paz, nosotros inmediatamente le escribimos planteándole que para sentarnos a hablar y encontrarle salida al conflicto social armado había que despejar totalmente de un área a las fuerzas públicas''.

Pero recuerda que ``el señor comisionado y el presidente le empezaron a dar vueltas y vueltas a todo y finalmente concluyeron que era anticonstitucional el despeje de un municipio para hacer la paz. En las idas y venidas nos propusieron reunirnos en una vereda. Pero para negociar necesitamos que sea un municipio donde todos los interesados en hablar con nosotros puedan encontrar alojamiento, alimentación, medios de transporte, comodidades diferentes a las que propuso el comisionado. A nuestras propuesta siempre el señor presidente nos respondió negativamente, aunque siempre habla de paz con demagogia''.

Añade: ``Y siempre que planteamos la realidad política nos declaran la guerra. Con este gobierno nos han declarado la guerra en cuatro oportunidades. Mientras se decía, por ejemplo que se estaba dispuesto a escuchar para conversar la paz se preparaba una ofensiva militar a gran escala, que ha sido llamada Destructor II. Quiere decir que se nos quiso jugar con un arma de doble filo, porque por un lado se hablaba de paz y por el otro se organizaba una ofensiva de guerra.

--¿Podríamos decir que el gobierno tiene lengua de seda pero puño de hierro?

--Sí, el presidente ha dicho eso. Ha dicho muchas veces que no se confunda la voluntad de paz con la defensa de la Constitución. Son meras palabras. En esencia para nosotros (el de Ernesto Samper) repre- senta un gobierno represivo que tiene un lenguaje de paz encarnado en principios de guerra. Por eso dice: ``En mi gobierno tengo una política de paz, pero me toca incrementar el poderío militar, crear una brigada móvil, conseguirme cien aviones más para surcar los aires, incrementar el presupuesto bélico.'' Es difícil entender que se trata de la paz. Eso es lo que ha hecho el presidente en todo este periodo''.

Afirma: ``Resolvimos plantearle que despeje los cuatro municipios que señalé para poder sentarnos a hablar con los tres poderes, con la sociedad civil y con todos los que estén interesados en que se produzca un cambio en este país y logremos verdaderos acuerdos de paz. Cada municipio tendrá su finalidad. En este país tenemos mil ciento y pico de municipios, pero cuando se trata de encontrar una solución política no se desocupa ninguno''.

--¿Qué es para la FARC-EP hacer de la paz una política de Estado?

--Significa: a) Que la política de paz no esté sometida a los caprichos de los gobernantes de turno, sino que tenga continuidad. b) La paz como política de Estado, debe estar encaminada a erradicar todos los factores subjetivos que hicieron que un considerable número de patriotas se levantara en armas. c) Estos factores objetivos, entre otros, son: ausencia de una verdadera reforma agraria, que se dé la tierra a quien la trabaja, falta de salud, vivienda, educación, trabajo, etcétera, todo lo que es consecuencia de la desigual distribución de la riqueza. A esto se suma la violencia institucionalizada del Estado, ejercida por órganos represivos para mantener sin alteración el orden social establecido en beneficio de una clase dominante.

--Algunos plantean que ustedes dialoguen con los paramilitares...

Tiro Fijo responde tajante:

--Nosotros no dialogaremos con paramilitares, porque éstos son hijos ilegítimos del Estado. Fue el mismo Estado el que los creó, organizó y que los dirige con directa participación y asesoría de los generales de la república. Como fue el Estado el que los creó, debe ser el mismo Estado el que los disuelva, condenando previamente a los autores materiales e intelectuales de tantas masacres que han enlutado al país. Además, conversar significaría liberar al Estado de la responsabilidad que le asiste en la organización de estos grupos. Se quiere llevarnos a la mesa vencidos. En este caso decimos que no nos vamos a someter... Hemos logrado resultados buenos en las acciones contra los enemigos. Por eso el ejército aquí se disfraza de civil para cometer fechorías, crímenes y asesinatos a nombre del paramilitarismo.

``A los paramilitares los encuentra uno en los cuarteles, en los batallones, en las brigadas, ahí están, trabajan en forma combinada con ellos y tiene el ropaje paramilitar. Son tropas disfrazadas de civil para cometer crímenes contra la población civil. Aquí descargan todo el peso y la furia contra la población civil y luego dicen que fueron los guerrilleros. La verdad es que con la guerrilla combatieron muy poco. Esto lo tienen que conocer los pueblos del continente, que no es para pelear contra nosotros, sino contra la población civil desarmada, a la que ellos consideran que pueden ser apoyo de las FARC-EP.

*Patricio Echegaray es el secretario general del Partido Comunista Argentino y realizó esta entrevista para la revista Patria Libre, de la cual publicamos una parte cedida a La Jornada.