La Jornada 24 de junio de 1998

México debe responder fuerte a Washington: ministro de la Corte de La Haya

Jesús Aranda Ť El gobierno mexicano debe responder ``muy fuerte'' a la decisión del gobierno estadunidense de no entregar a los agentes encubiertos que participaron en el operativo Casablanca, exigir que éstos sean entregados a las autoridades mexicanas y, en dado caso, recurrir a instancias como la Corte Internacional de Justicia para que no sea violentado el derecho, aseveró Víctor Carlos García Moreno, ministro de la Corte de La Haya.

Señaló que México no puede dejar pasar la actitud del Congreso de Estados Unidos --de legitimar la acción encubierta de sus agentes en territorio mexicano-- y no debe asumir una actitud de silencio o complaciente, ``porque lo peor es quedarse callado'' en un acto en que se vulneró la soberanía.

García Moreno advirtió que según la Ley Federal de Responsabilidades de los Servidores Públicos, tanto la canciller Rosario Green como el Presidente de la República podrían ser sujetos a una sanción en caso de no actuar en consecuencia y no exigir al vecino país del norte que respete los tratados bilaterales y el derecho internacional.

En entrevista, el también director del Seminario de Derecho Internacional de la Facultad de Derecho de la UNAM sostuvo que el gobierno mexicano está en todo su derecho de exigir la extradición de los agentes estadunidenses --esto, en el momento en que la PGR demuestre que fue violentada la soberanía nacional.

Indicó que el gobierno mexicano tiene la opción de invocar la suspensión del tratado de extradición vigente con Estados Unidos, porque los asuntos relativos al operativo Casablanca, la cooperación contra el narcotráfico y el cumplimiento del propio tratado ``están interconectados''.

Si el gobierno mexicano aplica esta medida, explicó, actuaría de acuerdo con su posición de ``no contaminar'' la cooperación bilateral con temas aislados, porque en este sentido los temas sí están relacionados.

Me preocupa, dijo, que el gobierno mexicano ``salga en defensa de su derecho de hacer valer su soberanía''. Sin embargo, agregó, ``noto a la cancillería un tanto complaciente y lo peor que podría hacer es quedarse callada ante un acto en el que se violentó el derecho internacional, porque entonces se tiene el acto como consentido''.

Comentó que aun cuando la legislación estadunidense contempla la cláusula de puerto seguro para sus agentes encubiertos --que consiste en que éstos gozarán de total inmunidad e impunidad en acciones en el exterior--, esa legislación es aplicable exclusivamente en Estados Unidos pero no tiene efecto fuera de sus fronteras.