Capturan a Aurelio Arizmendi en una casa de seguridad en el DF
Humberto Ortiz Moreno, Bertha Teresa Ramírez, Gustavo Castillo y Víctor Ballinas Ť Agentes judiciales federales enfrentaron ayer a balazos, hirieron y capturaron al hermano de Daniel Arizmendi López, Aurelio, ambos presuntos jefes de una banda de secuestradores. De acuerdo con versiones extraoficiales, el primero ya estaría cercado en esta capital.
La operación fue ejecutada por 30 agentes de la Unidad contra el Crimen Organizado de la Procuraduría General de la República que, aproximadamente a las 14:00 horas, irrumpieron en una casa de seguridad ubicada en el kilómetro 3.5 de la carretera al Ajusco. Entraron por la fuerza, utilizando un vehículo con tumbaburros que tiró la puerta principal.
El delincuente, presuntamente cubierto por otros dos sujetos, intentó saltar por una barda el inmueble situado en la calle de Fígaro 2, colonia Cuchilla de Padierna.
Armado, repelió la acción policiaca, pero recibió varios tiros en las piernas que lo hicieron caer y sufrir una fractura expuesta de fémur. Así pretendió abordar su Ford Escort color gris, matrícula 983-JRK, que recibió varios impactos de bala.
Y entonces fue sometido, no sin antes prácticamente exigir a sus captores: ``Mátenme, ya que sé lo que me espera...''.
En virtud de que sangraba profusamente y de que entró en shock, el criminal --del cual se dice que es el más violento de la familia de secuestradores y quien cobraba los rescates e incluso torturaba y mutilaba a las víctimas-- fue trasladado al hospital Los Angeles del Pedregal por los elementos de la PGR, dentro de una Cherokee gris con vidrios polarizados, que arribó a las 17:20 horas, bajo custodia de un Stratus blanco.
Previsiones
Con el apoyo de la Policía Judicial del Distrito Federal (PJDF), los agentes federales montaron un impresionante dispositivo de seguridad dentro y en los alrededores del sanatorio particular en previsión de que el hermano del hampón herido intentara rescatarlo. Los rumores corrían en el sentido de que, incluso, el propio Daniel estaba internado y también lesionado o, en cambio, que ``andaba cerca'' y con mucha gente a su lado.
Una vez que fue estabilizado, aproximadamente una hora después Aurelio Arizmendi fue retirado de ese nosocomio privado y trasladado al Hospital Central Militar en la ambulancia número 1401183 del Ejército Mexicano, pues el lugar no reunía las suficientes condiciones de seguridad.
Al cabo de varias horas de espera e incertidumbre, Jorge Alberto Cárdenas, director general de Comunicación Social de la Secretaría de la Defensa Nacional, ofreció un breve informe a los periodistas apostados frente al hospital y confirmó que Aurelio está encamado allí y custodiado por elementos de la PGR, donde permanecerá ``hasta su total restablecimiento para después ser ingresado a prisión...''.
Oficialmente, la PGR explicó que el enfrentamiento con el secuestrador ocurrió cuando los policías judiciales federales intentaron cumplir con la orden de aprehensión girada por el juez 11 de Distrito en materia penal en contra de Arizmendi, por los delitos de privación ilegal de la libertad y asociación delictuosa, a los que se agregarían los de portación ilegal de arma de fuego, resistencia a la autoridad y otras violaciones a la Ley Federal contra la Delincuencia Organizada.
La PGR aseguró que la captura de Aurelio Arizmendi fue producto de investigaciones de inteligencia realizadas a partir de información obtenida en diversos cateos realizados la semana pasada en casas de seguridad y sitios donde se ha movilizado esa organización criminal. Señaló que incluso han sido encontradas nuevas evidencias de la actividad delictiva de los hermanos Daniel y Aurelio Arizmendi.
Presos están ya en el penal de alta seguridad de Almoloya de Juárez, desde que fueron capturados el 29 de mayo pasado, los hijos del jefe de la banda, Daniel y Sandra, así como su esposa María de Lourdes Arias, quienes habrían proporcionado información clave para desarticular la organización. Once elementos de su grupo de secuestradores también han sido encarcelados, principalmente Daniel Vanegas Saldaña, su lugarteniente.
Confirmación
Francisco Labastida Ochoa, secretario de Gobernación, fue el primer funcionario de alto nivel en corroborar la aprehensión del peligroso criminal, a su llegada al Palacio Legislativo de San Lázaro, pero remitió a los reporteros a la PGR para obtener más detalles. Se le preguntó si el detenido era Daniel y espetó: ``Fue detenido uno de sus hermanos y la Procuraduría hará las declaraciones correspondientes...''.
Todavía por la noche, los agentes judiciales federales y capitalinos continuaban con el cateo a la casa del Ajusco y peinaban la zona donde, señalaban versiones extraoficiales, podría estar escondido Daniel, el jefe de la banda de secuestradores más buscado en el país y que ha obligado a desplegar un operativo de búsqueda en por lo menos seis estados de la República. Lo que dan casi por seguro investigadores consultados, es que el mochaorejas podría seguir en esta ciudad.
El más sanguinario
Aurelio Arizmendi López formó, junto con su hermano Daniel, la banda de secuestradores más poderosa del país, hasta que ésta fue desmembrada el 22 de mayo pasado durante un operativo en el que fueron detenidos cuatro de sus principales cabecillas, sus sobrinos, Daniel y Sandra Arizmendi Arias, su cuñada María de Lourdes Arias García y Verónica Jaramillo Saldaña. Previamente se había logrado la captura de Daniel Venegas Saldaña, lugarteniente de Daniel Arizmendi, el jefe de la banda.
Según informes policiacos y del Sistema Nacional de Seguridad Pública, Aurelio carece de la capacidad intelectual de Daniel, pero era el integrante más sanguinario del grupo, y quien acostumbraba torturar, mutilar y asesinar a las víctimas.
Tras la detención del ex director de la Unidad Antisecuestros de la Procuraduría General de Justicia de Morelos, Armando Martínez Salgado, acusado de brindar protección a los Arizmendi, la PGR recuperó archivos que sirvieron para determinar la crueldad y el modus operandi de los delincuentes.
La evidencia describe el caso de un transportista secuestrado en un restaurante de Lindavista en la ciudad de México, por cuya liberación exigieron a la familia 5 millones de dólares y aun cuando ésta manifestó su disposición a realizar el pago, los plagiarios la presionaron mediante llamadas telefónicas en las que ponían grabaciones donde la víctima describía las vejaciones de las que era objeto. Tras cobrar el rescate liberaron al secuestrado: le mutilaron la oreja derecha y un testículo.
Según declaraciones de la esposa de Daniel Arizmendi, María de Lourdes Arias, Aurelio decidió abandonar a su hermano cuando se intensificó la persecución del delincuente, a partir del 5 de febrero pasado, una vez que la Procuraduría General de la República ofreció 5 millones de pesos de recompensa a quien proporcionara información fidedigna que permitiera su captura.