La Jornada 1 de julio de 1998

Se investiga el pago de ``honorarios'' de Banca Unión a funcionarios de la CNBV

Mireya Cuéllar, Víctor Ballinas y Antonio Castellanos Ť La Comisión de Vigilancia de la Contaduría Mayor de Hacienda de la Cámara de Diputados abrió una línea de investigación (en el paquete Fobaproa) en torno a los pagos por ``honorarios'', ``compensación'' y ``gastos sin comprobar'' que hizo Banco Unión durante 1995 y 1996 a funcionarios de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, entre ellos Felipe González Villarreal, secretario particular del presidente de la CNBV, Eduardo Fernández, y Mario Andrés Hernández Reyes, contralor de dicha institución.

Según documentos de Banca Unión -que pertenecía a Carlos Cabal y fue intervenida en septiembre de 1994 por la CNBV-, González Villarreal y Hernández Reyes recibieron en conjunto, entre noviembre de 1995 y octubre de 1996 (11 meses), pagos por 3 millones 216 mil 590 pesos, que se presume son ``totalmente irregulares'', informó el diputado panista Felipe de Jesús Cantú. El legislador explicó que los bancos intervenidos corren con los gastos de la operación, pero que no hay razón para que funcionarios de la CNBV reciban pagos a título personal. Se supone, y esa es una de las cosas que habrá de indagar la Contaduría Mayor, que dichos funcionarios no tenían relación directa con la intervención de Unión.

La Contaduría Mayor de Hacienda de la Cámara baja recibió copias de cheques por 100 mil, 154 mil, 123 mil, 54 mil, 43 mil, y 99 mil 500 pesos, entre otras, que fueron pagados a González Villarreal y Hernández Reyes durante los meses de agosto y octubre de 1996. Estos pagos por ``honorarios'' y ``gastos sin comprobar'' se hicieron sin la correspondiente retención del Impuesto Sobre la Renta (ISR), en el primer caso. En lo concerniente a los ``gastos sin comprobar'', el Banca Unión pagó 30 mil pesos el 24 de octubre de 1996 por concepto de IVA, de dos cheques de 100 mil pesos. En esa misma fecha, el banco expidió otro cheque de 20 mil pesos por ``retención de 10 por ciento de ISR de los señores Mario A. Hernández Reyes y Luis F. González V''.

Estos funcionarios de la CNBV firmaron contrarrecibos a Unión que especifican: ``como compensación por los trabajos realizados con motivo de la interventoría''.

Otro de los cheques cuya copia fue presentada a la Comisión de Vigilancia de la Contaduría Mayor de Hacienda es por un monto de 185 mil 469 pesos, que Banca Unión pagó el 7 de mayo de 1996 a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) por concepto del ``impuesto retenido a los señores Mario Hernández y Felipe González, funcionarios de la CNBV, por honorarios pagados en los meses de noviembre y diciembre de 1995''.

Con esa misma fecha, la institución crediticia emitió dos cheques más, uno de 17 mil 248 pesos y otro de 26 mil 17 pesos, por recargos en el pago de impuestos de Hernández y González. De estos pagos de impuestos hechos a la SHCP, los diputados deducen que en esos dos meses de 1995 los funcionarios de la CNBV recibieron un millón 854 mil 690 pesos.

Sumados los pagos (en cheque), de los cuales tiene copia la Comisión de Vigilancia, Hernández Reyes recibió 721 mil 500 pesos de Banca Unión en 1996, y González Villarreal 640 mil 400 pesos; un monto total, entre ambos, un millón 361 mil 900 pesos. Esto además de los pagos que la comisión infiere --estimados en un millón 854 mil 690 pesos-- a partir de los impuestos entregados a Hacienda en los meses de noviembre y diciembre de 1995. Es por ello que en la reunión de la comisión se habló de que dichos funcionarios recibieron en el lapso de un año alrededor de 3 millones 200 mil pesos.

Los pagos fueron autorizados en algunos casos por Jesús Rodríguez Muro, quien firma como asesor de la dirección general de Unión, y en otros por Carlos Pérez Montañez, subdirector ejecutivo de Nominas, y por Carol Radchik, también funcionaria del banco.

Algunos de los cheques a nombre de Hernández Reyes fueron depositados en la cuenta de cheques número 26273748, en tanto que uno de los de González Villarreal fue depositado en la cuenta 599274-5 (en las copias no alcanza a verse a qué bancos pertenecen estas cuentas).

Consultado por La Jornada, González Villarreal señaló que dichos pagos fueron hechos por actividades específicas, y remitió al reportero al contralor de la institución, Hernández Reyes, para que diera detalles de las operaciones. Sin embargo, este funcionario nunca respondió a las llamadas de La Jornada por encontrase ``en una junta'', y finalmente, después de varias llamadas a su oficina, dijeron que ya se había retirado.