Insatisfactoria, la indagación de los asesinatos de Gil y Ovando: Cárdenas

Georgina Saldierna Ť El PRD rindió ayer homenaje a los 578 perredistas que han fallecido en la lucha política del país y dio inicio a los actos que se realizarán durante los próximos meses en honor de los caídos, como parte del ``Año por los mártires de la democracia''.

El homenaje se registra a diez años de los asesinatos de Francisco Xavier Ovando y Román Gil Heráldez, cometidos en la ciudad de México cuatro días antes de las elecciones del 6 de julio de 1988, explicó la dirigencia perredista.

En una breve ceremonia, la presidenta de la Fundación Ovando y Gil, Mercedes Terán, recordó que los asesinatos de esos dos perredistas marcaron el inicio de una cadena interminable de crímenes que a la fecha suman 578, de los cuales 299 se cometieron durante el gobierno de Carlos Salinas y el resto en el de Ernesto Zedillo.

Señaló que en los últimos diez años el PRD ha perdido a connotados dirigentes, activos militantes y valiosos simpatizantes, debido a una violencia política generada desde el gobierno para disuadir a los participantes en la lucha por la democracia.

El avance del PRD no ha sido fácil, agregó, va acompañado de una serie de víctimas inocentes que dejan en la orfandad a un gran número de niños que han visto interrumpida su vida normal y la mayoría de las veces sufren con sus madres una situación económica difícil.

Mercedes Terán recordó que frente al permanente hostigamiento a que se ha visto sometido el PRD y la obligación moral contraida con estas familias, surgió la Fundación Ovando y Gil, que en enero de 1997 inició un programa de becas para que estos niños puedan seguir estudiando, y se hizo extensivo para los hijos de compañeros que por la gravedad de las lesiones sufridas quedaron impedidos para trabajar.

La presidenta de la fundación destacó que la mayoría de los victimarios gozan de impunidad. Si asesinatos tan alevosos como los de Ovando y Gil nunca fueron aclarados del todo, qué podemos esperar en la mayoría de los homicidios que se cometen en lugares apartados de las grandes ciudades, preguntó, al señalar que el PRD seguirá luchando para que se haga justicia en el caso de los 578 asesinatos.

Dijo que esta demanda será llevada al Congreso de la Unión y a los Congresos de los estados, en donde además se exigirá una indemnización para los familiares.

Por otra parte, resaltó que en memoria de los caídos, se editará el libro Para que no se olvide, y se erigirá un monumento en uno de los principales parques de la ciudad de México.

Humberto Zazueta, secretario de Derechos Humanos del CEN del PRD, dijo que las muertes de sus compañeros tienen relación con luchas sociales más que con conflictos poselectorales, y que muchos de los crímenes ocurrieron en estados de extrema pobreza, como Chiapas y Guerrero.