La Jornada 2 de julio de 1998

Varios jóvenes adinerados fueron victimados tras separarse del cártel

Jorge Alberto Cornejo, corresponsal, Tijuana, BC, 2 de julio Ť La agencia antidrogas estadunidense (DEA, por sus siglas en inglés) confirmó la existencia de un ``contrato'' de los hermanos Arellano Félix por las cabezas de algunos ex integrantes del cártel. Las órdenes de muerte se dirigen principalmente contra el grupo denominado narcojuniors, quienes son jóvenes de familias adineradas de esta frontera que se asociaron con los capos a finales de la década de los ochenta y que, según autoridades, ``rompieron'' con la organización a mediados de 1995.

De acuerdo con un oficial de la DEA en San Diego, California, las autoridades mexicanas han encontrado indicios para sostener que estos contratos son consecuencia de la descomposición del cártel, iniciada a raíz de la separación de los narcojuniors del resto de la organización y del enfrentamiento entre ellos mismos.

Dicho enfrentamiento ha derivado ya en la muerte de varios jóvenes de la clase alta de la localidad, ocurridos en esta frontera, en San Diego, California, y en la ciudad de México; tal es el caso de los hermanos Endir y Enain Meza Rico, asesinados, según la Procuraduría General de la República (PGR), por órdenes de Ramón Arellano Félix, en 1995.

Hasta ahora, las autoridades han descrito a la organización de narcojuniors como un grupo altamente peligroso, pero que desde 1996 ha sufrido varias bajas en sus principales cabecillas, empezando por Emilio Ricardo Valdez Mainero, arrestado en septiembre de 1996 en Coronado, California, y actualmente sujeto a un proceso de extradición solicitado por el gobierno mexicano.

Según el expediente de Valdez Mainero, facilitado por la PGR, el joven conocido también con los alias Ricardo González León, El Cabeza de Perro y El CP, comandaba uno de los brazos armados de la organización criminal de los hermanos Arellano Félix integrada por jóvenes de la clase alta de esta frontera.

Su grupo estaría conformado --según la solicitud de extradición presentada por la PGR ante el gobierno estadunidense-- por Fabián Martínez González, El Tiburón, actualmente prófugo; Alfredo Hodoyán Palacios, El Lobo, detenido en Estados Unidos y también sujeto a un proceso de extradición; Eduardo León, El Abulón, prófugo; Fabián Partida, Domingo; y Gustavo Miranda Santa Cruz, El Tortas, detenido en Estados Unidos.

Asimismo, son considerados como integrantes del grupo de narcojuniors en el expediente público en la corte de San Diego, California, pero con diferente rango dentro de la organización de los Arellano Félix, Arturo Everardo Páez Martínez, El Kitty, actualmente recluido en el penal de Almoloya de Juárez; Fausto Soto Miller, El Chef, también en prisión; Gabriel Alfredo Valdez Mainero, El Radio Loco, detenido en el vecino país del norte; Endir Meza, asesinado en la capital mexicana junto con su hermano Enain; Edgardo Videgaray, asesinado en esta frontera; Alejandro Cázares, ultimado en 1992 en San Diego, California.

En lo que va del presente año, han sido asesinados ya tres de los narcojuniors: Guillermo Cornejo Ochoa, acribillado hace apenas unas semanas en Chula Vista, California; Roberto González Ortega, El Beto Ortega, asesinado el pasado viernes en Massachusetts; y Roberto Parellón Rosas, acribillado en abril de este año frente a su domicilio en la colonia Chapultepec de esta ciudad.

Parellón Rosas y González Ortega estuvieron bajo arraigo domiciliario a principios de 1998 junto con Alejandro Weber, y la PGR solicitó a la juez quinto de distrito con sede en esta ciudad las órdenes de arresto para los tres acusados de participar en el fallido atentado contra el periodista Jesús Blancornelas, dueño y director del semanario local Zeta, ocurrido en noviembre de 1997, pero la magistrada rechazó tal petición y los jóvenes quedaron en libertad.