Avanzan Brasil y Francia a semifinales; hoy, Argentina contra Holanda

Afp, Dpa y Reuters, Marsella, 3 de julio Ť El futbol calculado y artesanal de Argentina se enfrentará este sábado en el estadio Velodrome de Marsella con la vertiginosa ofensiva de Holanda, en un partido a todo o nada que enviará al ganador a las semifinales de Francia 98.

El partido cuenta con dos antecedentes mundialistas. En 1974, en pleno apogeo de la Naranja Mecánica, de Johan Cruyff, Holanda venció a Argentina por 4-0, en partido de segunda ronda correspondiente al grupo A. El futbol total de los europeos no encontró mayor resistencia por parte de los sudamericanos. Cruyff, en dos ocasiones, Krol y Rep sellaron la goleada.

Cuatro años más tarde, en Argentina 78, los locales se cobraron revancha con creces. La victoria del equipo dirigido por César Luis Menotti, por 3-1, significó el título mundial para la escuadra albiceleste y una nueva frustración para los naranjas, que ya se habían quedado en las puertas de la consagración en la anterior Copa del Mundo.

El Matador Mario Alberto Kempes, en dos ocasiones, y Daniel Bertoni en otra, marcaron para los argentinos, que recién definieron el partido en tiempo extra. Nanninga, de cabeza, había puesto el transitorio empate holandés.

Los protagonistas del partido de este sábado, por aquel entonces eran apenas niños, pero a su manera también fueron marcados por aquella final argentina.

``Creo que es mi primer recuerdo que guardo del futbol. Tenía apenas ocho años y me veo sentado en el sillón de mi casa en Amsterdam mirando el partido por televisión. Por supuesto que perder fue una gran decepción'', admitió Dennis Bergkamp, la máxima estrella de Holanda.

Su contraparte argentino, el goleador Gabriel Batistuta, también señaló que sus primeros recuerdos del futbol provienen de ese partido: ``Estaba asombrado por (Mario) Kempes, un verdadero grande''.

Ambas escuadras, que se instalaron hoy en Marsella, vienen de tener a los tiros penales como aliados: Argentina eliminó a Inglaterra por esa vía, tras un empate de 2-2, y Holanda, si bien venció 2-1 a Yugoslavia en tiempo de descuento, tuvo la fortuna de que un penalty se estrelló en su travesaño cuando estaban igualados.

El capitán argentino, Diego Simeone, describió a Holanda como ``un gran equipo, complementado por la técnica enorme de sus jugadores, al que trataremos de quitarles el medio campo, porque ahí son muy fuertes''.

Argentina, que jugó el martes, llega con un día menos de descanso que Holanda, además con la tensión de 30 minutos de tiempo extra y luego la serie de penales. Ese esfuerzo se hizo sentir en el físico de sus jugadores, varios de ellos con contracturas musculares y traumatismos, como el defensor Javier Zanetti y el mediocampista Ariel Ortega, quienes de todos modos podrán jugar, lo mismo que Batistuta, quien en el juego ante Inglaterra fue relevado a los 15 minutos.

Por su parte, el técnico holandés Guus Hiddink le ha recomendado a sus jugadores no caer en las supuestas provocaciones de sus rivales de mañana. Pero sobre todo, la escuadra holandesa se enfrenta al problema de lesiones de su mediocampista Aaron Winter, con un tirón en la pierna izquierda, y el delantero Marc Overmars, lastimado en un dedo del pie derecho, además de conflictos internos.