CROACIA, TERCER LUGAR
Marlene Santos A., enviada, París, 11 de julio Ť La debutante Croacia es un gigante del futbol. Los aguerridos jugadores de la región balcánica pusieron alma y corazón para lanzar a la cima del balompié mundial un récord: primera participación mundialista, y un grandioso tercer lugar tras vencer 2-1 al futbol exquisito de Holanda.
Davor Suker tocó la gloria y en cuestión de horas podría quedar como el mejor goleador de esta Copa del Mundo, con 6 anotaciones, dos más que Ronaldo, quien jugará este domingo.
Su rostro fue la imagen viva de la felicidad. Portando siempre una amplia sonrisa rompió cánones no escritos, saltó las estorbosas bardas de publicidad que limitan la cancha, hasta poder tocar a algunos de sus seguidores, minoría en el estadio. El nacionalismo surgió a flor de piel, alguien le lanzó una bandera que tomó entre sus manos con delicadeza y admiración, como a un tesoro; la besó, la elevó y la mostró con orgullo al estadio, al mundo entero a través de las pantallas de televisión.
Ellos eran los héroes y ellos mismos se festejaron con espontáneos cantos, gritos y saltos. Desde la tarima de premiación lanzaron el grito de ``oééé, oé, oé'', para seguirse con la entonación de la Marcha de Aída. Suker mordió su medalla y empuñó la mano derecha en señal de triunfo, mientras el técnico Blazevic Miroslav era alzado en hombros.
Su futbol no fue esta noche el más brillante sobre la cancha del Parque de los Príncipes, ese de nuevo lo exhibió Holanda, pero sí fue el más certero, el más efectivo, el necesario para adjudicarse la presea de bronce.
El público se les entregó completo cuando dieron la vuelta olímpica con las medallas al cuello, recibidas del presidente de UEFA, Lennart Johansson, acompañadas de los saludos de Joseph Blatter y Michel Platini. Los holandeses, quienes tuvieron opciones de gol que increíblemente fallaron, sobre todo una de Patrick Kluivert, miraban desolados la escena y recibieron palabras de consuelo de los directivos de FIFA.
Zvonimir Boban festejaba y por momentos se quedaba serio, parecía querer grabar todo en su mente. Pudo no haber vivido nada de esto si aquella suspensión de por vida, por haber golpeado a un policía en 1990, no hubiera sido perdonada.
Holanda desplegó sobre la cancha tan buen futbol, que daba la impresión de que arrollaría a la estática Croacia, pero los cañonazos de Wim Jonk y de Patrick Kluivert parecían lanzados con los ojos cerrados y fueron erráticos cuando todo mundo coreaba el gol... ¡Era estrategia de guerra!, los croatas sorprendieron a la confiada Naranja Mecánica y al minuto 12 Robert Prosinecki puso al frente al equipo de las playeras ajedrezadas con un gran avance, un corte lateral que dejó sembrado al defensa holandés Jaap Stam y un trallazo certero que venció a Edwin van der Sar.
Ocho minutos después (20) y en una acción individual, el holandés Boudewijn Zenden emparejó el tablero con un disparo de media distancia que el portero Ladic no pudo desviar. El marcador se definió en el mismo primer periodo, al minuto 35, cuando Suker recibió un excelente pase y desde la izquierda sacó tiro cruzado que entró rozando el poste izquierdo de la meta de Van der Sar.
En el complemento, el entrenador Blazevic plantó cinco hombres en la línea defensiva, sacó delanteros e ingresó medios de contención hasta crear una auténtica muralla que los holandeses no pudieron superar con toda su constelación de estrellas: De Boer, Seedorf, Cocu, Davids y Bergkamp.
Al fondo estuvo con una buena actuación Ladic, quien casi al final, con la punta del pie izquierdo, alcanzó salvar un remate de Kluivert.
Marlene Santos A., enviada, París, 11 de julio Ť ``Vencimos al mejor equipo del mundo'', dijo con un suspiro de satisfacción el entrenador croata Miroslav Blazevic, quien se mostró contento por el tercer lugar, de entre 32 participantes, que logró en el Mundial de Francia 98 y anunció que dejará la selección para dirigir a un equipo, quizá al París St. Germain.
``Hemos merecido esta victoria, que fue muy difícil; para nosotros tiene un gran valor haber vencido a los holandeses, que son tal vez el mejor equipo del mundo. Para derrotarlos tuvimos que hacer gala de mucha fuerza e inteligencia.''
Tras apuntar que esta exitosa participación atrae la vista de los clubes importantes sobre el joven futbol croata, que quedó por encima de potencias como Alemania, Italia, Argentina y la propia Holanda, agregó: ``Quisiera aprovechar este momento para felicitar a nuestro capitán Zvonimir Boban, quien ha sabido conducir maravillosamente esta batalla colectiva y librar, a título personal, un combate digno de titanes''.
Precisó que sus jugadores siguieron al pie de la letra sus instrucciones, por lo que todos están muy orgullosos de la victoria. ``El espectáculo que dimos en este Mundial nos permitió dar a conocer nuestro país -fundado en 1991- al mundo entero'', señaló.
Muchos seguidores croatas que no tuvieron la suerte de asistir al estadio, se congregaron en el bar croata La Torcida. El festejo estalló con el 2-1, pero la euforia se contuvo hasta el silbatazo final. Algunos aficionados dijeron que su equipo cumplió ``una extraordinaria Copa del Mundo. Supo mostrar un futbol nuevo. Merece el tercer lugar y estamos muy felices con ellos, que serán recibidos como héroes cuando vuelvan a tierras croatas''.
Suker dijo que esperará a ver qué hace Ronaldo este domingo, para saber si quedará o no como el mejor goleador. Cuestionado sobre qué gol le gustó más, respondió: ``Para mí todos son bellos, guapos, preciosos, pero el de hoy fue muy inteligente, nadie lo esperaba''.
Y aclaró: ``Quiero decir que estoy contento, no tengo palabras para expresarme, estoy como un niño pequeño con juguete nuevo. Esta es la alegría que da el futbol y hoy es el día más feliz en la vida de Davor Suker. Somos tercer lugar por méritos propios, pero agradecemos a Dios y a esos 4 millones y medio de personas que mañana van a preparar una fiesta nacional''.
Comentó que han recobrado la alegría que tuvieron tras vencer a Alemania. ``Nos dijimos: si hemos vencido a Alemania podemos ser campeones del mundo, pero no pudo ser'''. Añadió que en la cancha buscó a Clarence Seedorf, su compañero en el Real Madrid. ``Le dije que no estuviera triste porque nosotros apenas empezamos a hacer historia y necesitábamos el triunfo más que su gran Holanda''. Por último, el delantero indicó que este tercer sitio le sabe a primero, porque ``Francia y Brasil no tienen tanto mérito'' como su país.
Robert Prosinecki, autor del primer gol del cotejo, señaló: ``La victoria es algo especial para nuestro pequeño país. Estamos todos contentos; este tercer lugar es un logro importante; todavía no sabemos qué nos espera en nuestra casa, pero ya queremos llegar. Pienso que con nuestro futbol y con mucho corazón escribimos un gran Mundial''. Agregó que en la final apuesta por Brasil.
El técnico holandés Guus Hiddink expresó: ``Si se tienen tantas oportunidades de gol y después se olvida cómo convertir un gol clásico y se recibe un gol de contrataque, entonces eso es una lección. Otra vez estuvimos cerca. Tenemos que tragarnos esto. Dimos una buena impresión''.
Boudewijn Zenden declaró que los croatas tuvieron dos contragolpes y los aprovecharon, aunque no jugaron bien. ``Ahí se ve que no se puede ganar la copa sólo con buen futbol, y eso no es del todo justo''.
Y Johan Cruyff criticó: ``Casi todos los errores que se podían cometer fueron cometidos. Kluivert no hizo en los momentos decisivos lo que debía de hacer, es decir, meter la pelota. No es mala suerte, no existe la mala suerte en el futbol''.