``Para qué cascos azules si con los verdes no sabemos qué hacer''

Agustín Pérez Aguilar, corresponsal, Toluca, Méx., 12 de julio Ť En Chiapas sí operan grupos civiles armados y entrenados, que agreden y matan a la población, como ocurrió en Acteal, afirmó Mireille Roccatti Velázquez, presidenta de la CNDH, quien, ``por una cuestión técnica'', declinó llamarlos paramilitares.

``La Comisión Nacional de Derechos Humanos ha recabado una infinidad de testimonios en el sentido de que hay grupos de civiles armados, que han lastimado, y en algunos casos hasta privado de la vida, a personas, como en el caso de Acteal'', dijo.

Entrevistada al término de una ceremonia por el Día del Abogado, en la que participó junto al gobernador César Camacho Quiroz, Roccatti señaló que las declaraciones de Francisco Labastida, secretario de Gobernación, en el sentido de que los grupos paramilitares no existen en Chiapas, obedecen a una razón ``técnica''.

-Después de que usted señalara que sí existen esos grupos, ¿qué lectura pueden tener las palabras del secretario Labastida?

-Una lectura muy técnica: un grupo paramilitar es un grupo que está adiestrado, que tiene un soporte dentro de la milicia, y él yo creo que se fue por esa definición técnica; pero que existen civiles que poseen armas de uso exclusivo del Ejército, eso ya nosotros lo tenemos detectado y lo hemos señalado a la Procuraduría General de la República.

-¿La CNDH tiene evidencias de participación de militares o elementos policiacos en esos grupos?

-No, no tenemos evidencia de esto, sólo los testimonios que nos han sido rendidos.

-Pero, por la forma en que actúan estos grupos, ¿puede inferirse que han recibido algún entrenamiento?

-Hay testimonios en ese sentido, sí.

Roccatti señaló que se siguen recabando informes que confirmarían la presencia de bandas o células civiles con armamento de alto poder y entrenadas, que operan en Chiapas y que continuarán ofreciendo información a la PGR para que ésta siga las investigaciones, para lo cual la dependencia también pidió la participación de organizaciones no gubernamentales.

En cuanto a la posibilidad de que la ONU actué como mediadora en el conflicto chiapaneco, consideró que ése es un asunto de relaciones internacionales sobre el que sólo puede decidir el presidente Ernesto Zedillo, por ser el titular del Ejecutivo federal, y que debe ser resuelto sólo por mexicanos.

``La presencia de grupos internacionales no garantizan la seguridad, lo que significa que necesitamos entre mexicanos ver la respuesta y la solución a un problema que compete a los mexicanos''.

-¿Entonces, ni siquiera pensar en los cascos azules?

Con una sonrisa, Roccatti responde:

-No, desde luego que no. Imagínese, si ni siquiera sabemos qué hacer con los (cascos) verdes (del Ejército).