CEESP: si hubiera soluciones más fáciles, ya se habrían aplicado
Antonio Vázquez Ť Sin dejar de considerar que la propuesta perredista para atender el Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa) es ``sólo eso, una propuesta que debe ser analizada'', el director general del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), Raymundo Winkler Domínguez, sostuvo que en el ámbito internacional no existe ``otra tecnología'' para enfrentar las crisis bancarias más que los gobiernos absorban parte de esos percances por la vía de la deuda pública, a pesar de los efectos negativos que esto acarrea para la economía y la población.
En entrevista, Winkler lamentó que existan grupos que no hayan entendido cabalmente el problema del Fobaproa y las implicaciones que podría traer al país adoptar medidas ``alegres, populistas'' o que suenen ``muy bonito'' al electorado.
Por ello advirtió que un desenlace desafortunado en la solución al caso Fobaproa aumentaría el riesgo país. ``En verdad, si hubiera medidas más fáciles y menos dolorosas para la sociedad cualquiera las hubiera adoptado, empezando por el gobierno''.
Estimó que la propuesta que presentó el Partido de la Revolución Democrática para resolver el Fobaproa debe ser analizada y evaluada por la sociedad y el Congreso. Sin embargo, apuntó, cualquier sugerencia o proyecto en este sentido debe ser serio y cuidando en todo momento la estabilidad financiera del país.
El recientemente ratificado director general del CEESP rechazó que el actual programa económico sea el causante de los problemas que enfrentan diversos sectores. En todo caso, agregó, el modelo cerrado e intervencionista que privó en México durante décadas y que se está dejando atrás, es el que generó grandes inflaciones, déficit fiscales, falta de competitividad y desempleo. ``Gran parte de las crisis que hoy enfrentamos obedecen al viejo modelo económico por sus secuelas y no por desórdenes en el programa actual''.
Consideró que las crisis bancarias son producto de múltiples factores y no sólo de fraudes o manejos irresponsables de funcionarios. En México hubo de todo, y por ello el sistema judicial deberá trabajar para evitar que quede sin castigo quien haya cometido algún ilícito.
Pero aclaró: ``Cuando las crisis ocurren, no hay otra tecnología más que el gobierno intervenga y absorba parte de esos percances por la vía de deuda pública, aunque esto signifique un impacto negativo para la economía y la población durante un periodo prolongado. No hay de otra. Existen casos similares en Japón con los bancos puente y en Chile. Con algunos matices de diferencia, no hay tecnologías distintas. Las crisis de este tipo no desaparecen ni por arte de magia ni metiendo a cuatro o cinco funcionarios a la cárcel''.
Winkler comentó que, por ello, sin dejar de analizar las propuestas serias que sean presentadas para resolver el caso Fobaproa y sin dejar de mantener las políticas macroeconómicas de manera coherente y creíble, es necesario avanzar y perfeccionar con fundamento el actual programa económico. ``La crisis bancaria, nos guste o no, se derivó de una vieja ley bancaria con prácticas y sanciones que no se contemplaron en su momento. Ningún error de los que hoy se enfrentan puede ni debe ser atribuido al nuevo modelo económico''.
Para avanzar más rápido en el establecimiento de un paquete financiero menos vulnerable, el sector privado analiza diversas propuestas, entre las que destacan: mayor seguridad jurídica para los contribuyentes, ampliación de la base gravable, medidas para alentar la inversión, reinversión de utilidades, reducción de cargas tributarias, más espacios para incentivar el ahorro, reducir la evasión fiscal, educar a la gente para que pague sus impuestos, redistribuir la carga fiscal y asegurar que los impuestos serán bien utilizados.