La Jornada 23 de julio de 1998

Tres adolescentes, las víctimas; exige De la Barreda ``castigar con severidad''

Humberto Ortiz Moreno y Ricardo Olayo Ť Nueve integrantes de la Policía Montada en la delegación Tláhuac secuestraron y violaron a tres jovencitas, dos de ellas menores de edad. Los presuntos responsables fueron remitidos al Ministerio Público en Coyoacán, especializado en delitos de servidores públicos, en tanto la Comisión de Derechos Humanos del DF solicitó que se castigue ``con toda severidad'' a los responsables.

Las muchachas, de 13, 15 y 18 años de edad, lograron escapar de sus captores que las introdujeron a las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública en la zona y, semidesnudas, pidieron auxilio.

Así, acudieron a la Secretaría de Seguridad Pública a presentar denuncia contra los policías Alberto Castro, Heriberto Ibáñez, Gerardo Nijánguez, Roberto Ortega, Arturo Camacho, Juan Cruz, Rogelio Díaz, Gerardo Balderas y Everardo López, quienes serían acusados de privación ilegal de la libertad, abuso de autoridad, violación tumultuaria y lo que resulte, bajo la averiguación previa DGDS/044/98-07.

La Secretaría de Seguridad Pública brindó a las víctimas asesoría legal, a través de tres abogados --dos del jurídico y uno de la Contraloría Interna--, quienes procedieron a presentarlas ante el Ministerio Público. Las jóvenes agredidas y sus familiares acudieron ayer a las instalaciones de la policía para protestar por los hechos.

La dependencia aseguró que por ningún motivo solapará ni ocultará acciones indignas y deshonestas en que incurran sus elementos en perjuicio de la sociedad y de la propia institución, haciendo un llamado a los habitantes de la ciudad para que denuncien todos aquellos actos de corrupción, abuso o prepotencia de funcionarios. Reiteró su interés en combatir la impunidad en todos sus niveles.

Las bestias no se comportan así

El presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, Luis de la Barreda, consideró el suceso ``sumamente grave, indignante'', son ``acciones que nos hacen sentir vergüenza, que no se pueden calificar de bestiales, porque las bestias no se comportan así'', indicó ayer en declaraciones vía telefónica.

Si los hechos ocurrieron tal cual fueron narrados ayer por los medios de comunicación, dijo a manera de hipótesis, se debe ``castigar con toda severidad'', y subrayó que es necesaria la depuración de los cuerpos de seguridad porque se siguen cometiendo ``hechos tan graves, como los contra las mujeres, como las violaciones en grupo que han ocurrido en otras partes del mundo''. En este caso, destacó De la Barreda, me parece indispensable el castigo y una investigación a fondo. Por su parte, la CDHDF abrió de oficio un expediente y ha solicitado informes de los hechos y de las indagaciones que ahora corresponden a la Procuraduría de Justicia.