En seis meses, la PGJDF recibió 3 mil denuncias de violación
Raúl Llanos y Juan Antonio Zúñiga Ť En los primeros seis meses de este año, la Procuraduría de Justicia capitalina recibió tres mil denuncias por el delito de violación, cifra que es igual a todas las que se presentaron a lo largo de 1997, afirmó ayer la diputada Lucero Márquez Franco, presidenta de la Comisión de Equidad y Género de la Asamblea Legislativa, quien comentó que 60 por ciento de esos tres mil abusos fueron contra menores de edad.
En conferencia de prensa, que ofreció junto con Angélica Luna Parra, Ana Luisa Cárdenas e Irma Islas León, integrantes todas de dicha comisión, la legisladora perredista indicó que a esa cantidad de violaciones denunciadas se suma la cifra negra, por lo que el problema adquiere una dimensión mayor. ``Se estima que en el DF se comete una violación cada siete minutos, y no todos los victimarios reciben su castigo'', expresó.
Coincidió con sus compañeras diputadas al señalar que frente a este panorama, se adolece de una política efectiva en esta materia, por lo que la impunidad prevaleciente en la ciudad hace que hasta elementos policiacos estén ahí implicados, o bien que las secuelas que provoca ese tipo de atentados contra los menores sean graves.
Dijo que, por lo pronto, la Comisión de Equidad y Género solicitará una entrevista con el procurador Samuel del Villar para ver en qué circunstancia se encuentran esas tres mil denuncias, cuántas se han resuelto, cuántos violadores han sido aprehendidos y a cuántas más se les ha dado seguimiento.
Añadió que también se buscará una entrevista de Rodolfo Debernardi con diputados y diputadas de las comisiones de Procuración de Justicia, Grupos Vulnerables, Derechos Humanos, Seguridad Pública y Equidad y Genero, a fin de conocer qué información ha proporcionado el funcionario a la PGJDF respecto del caso de los policías de la Montada de Tláhuac, quienes violaron hace un mes a tres jovencitas.
Angélica Luna Parra, del PRI, exigió que el jefe de la policía capitalina manifieste ``su enojo, su indignación, de que estas cosas sucedan y diga cómo lo van a solucionar'', ya que hasta ahora ``sus declaraciones han sido muy erráticas''. Asimismo, pidió que se dé un seguimiento puntual a este caso porque ``en el juzgado, por subterfugios jurídicos, quizá puedan lograr cambiar el delito o incluso aminorar las penas''.
En la conferencia, Ana Luisa Cárdenas se manifestó por acelerar la creación de un fondo de reparación de daños a víctimas de delitos sexuales, como quedó ya consensado en el seno del Consejo Consultivo de Promujer. Propondremos, dijo, que se busque la mejor figura jurídica para establecerlo y se dé la transparencia en el manejo de los recursos económicos.
Por su parte, Irma Islas, a pregunta concreta, respondió que si alguna de las tres víctimas de violación resultan embarazadas, será decisión de cada una de ellas resolverlo, pero citó que en el Código Penal está bien definido que en el caso de un delito de este tipo no estará penado el aborto si es que consideran la mejor salida a esa situación.
Lucero Márquez insistió en que la PGJDF debe designar un equipo especial de agentes judiciales que se aboquen a la investigación de los casos de abuso sexual, a fin de acabar con el rezago que hay en las pesquisas de estos delitos en la ciudad de México.
También resaltó: ``queremos insistir en que los cuerpos de seguridad pública deben recibir capacitación adecuada para la atención de menores y víctimas de violación y abuso sexual; que deben hacerse más severos y eficaces los mecanismos de ingreso a los cuerpos policiacos y que se establezcan políticas efectivas de supervisión''.
Finalmente, a nombre de las diputadas de la Comisión de Equidad y Genero, puntualizó que se mantendrán al tanto del caso de Tláhuac y colaborarán hasta donde sea posible para que se haga justicia a las víctimas de la agresión.
Humberto Ortiz Moreno Ť La Policía Judicial del Distrito Federal (PJDF) ha detectado por lo menos dos bandas de seudotaxistas dedicados no sólo a atracar usuarios, sino a ultrajar mujeres a bordo de las unidades que operan de manera irregular, principalmente en la delegación Venustiano Carranza.
Uno de estos grupos delictivos habría habilitado vehículos Tsuru como autos de alquiler y tendría ya en su cuenta criminal dos homicidios.
Los detectives asignados advierten a la ciudadanía, especialmente a las mujeres, para que tengan precaución y verifiquen con detalle la documentación y numerales de los automóviles. Además, recomiendan evitar en lo posible abordar taxis con mallones en ventanillas, vidrios polarizados o que en el tablero tengan pegados pequeños espejos redondos que sirven para observar a las eventuales víctimas.
Estos detalles han quedado asentados en las más de 20 averiguaciones previas iniciadas por el delito de violación en el área especializada dentro de la Procuraduría General de Justicia del DF (PGJDF), donde existen fotos y esquemas específicos del modus operandi de estos delincuentes, gracias al cuestionario de alrededor de 36 preguntas que han respondido las agraviadas ante el Ministerio Público.
Desafortunadamente, lamentan funcionarios de la Dirección General de Investigaciones de Delitos Sexuales que encabeza Dulce María Villada, las víctimas no contestan a cuatro o cinco interrogantes fundamentales para las investigaciones y que se refieren a la filiación de los presuntos responsables.
En la mayoría de los casos las afectadas describen parcialmente los detalles del interior de los vehículos de sus agresores. Pero los expertos de la PGJDF han elaborado bosquejos que pueden ayudar a los usuarios a detectar anomalías que prevendrían el delito, los cuales pronto saldrán traducidos a los idiomas inglés y francés para prevenir a turistas.
Espejos cóncavos, pequeños y redondos, en partes deliberadamente escogidas del tablero, para mirar las extremidades inferiores de las mujeres; taxímetros que no encienden, texturas de la vestidura ex profeso y, por supuesto, un desarmador en la esquina derecha del tablero son, para los especialistas, detalles que si se observan a tiempo bien podrían evitar la agresión.
El uso de navajas 777, que cuestan 10 o 15 pesos en cualquier puesto ambulante de herramientas, es común entre los violadores en taxis.
Juan Carlos Rincón y Juan Carlos Reyes, directores de área en la Dirección de Delitos Sexuales de la PGJDF, dicen que los delincuentes de este tipo sufren cambios emocionales abruptos cuando suben a sus víctimas a las unidades.
Es típico el caso de Rafael Medina Jaime, recientemente aprehendido y formalmente preso en el Reclusorio Oriente, por violar al menos a 10 mujeres en diferentes zonas de la capital y del estado de México.
``El refirió que nunca lesionó a nadie. Piensa que no lastimó a nadie. Pero el daño psicológico, físico e interno no lo considera y lo da por cierto. Pero por esos cambios emocionales que sufre de repente, se arrepiente''.
Los funcionarios lamentan que las víctimas más desprotegidas son, la mayoría, de escasos recursos.