La Jornada 11 de septiembre de 1998

Comunistas y reformistas dan su apoyo al sustituto de Chernomirdin

Reuters y Afp, Moscú, 10 de septiembre Ť Tras varios días de indecisión y enmedio de una profunda crisis económica en Rusia, el presidente Boris Yeltsin cedió hoy ante la cámara baja del Parlamento, dominada por los comunistas, al nominar como candidato a primer ministro al canciller Yevgeny Primakov, en remplazo de Viktor Chernomirdin.

La candidatura de Primakov -un aparatchik formado en la era soviética y ex jefe de los servicios secretos rusos, así como asistente de Mijail Gorbachov a fines de la década pasada- fue apoyada tanto por los comunistas como por los reformistas demócratas de oposición. Chernomirdin, designado el pasado 23 de agosto por el Kremlin en el cargo de primer ministro para remplazar al destituido Sergei Kiriyenko, anunció poco antes de la nueva nominación que retiraba su candidatura, pero también acusó a los comunistas de estar llevando a cabo un golpe de Estado contra el presidente y advirtió que podrían instaurar un poder ``de tipo fascista''.

Si Yeltsin hubiese decidido presentar a Chernomirdin de nuevo, la Duma estaba dispuesta a rechazarlo por tercera vez, arriesgándose a una disolución por el presidente, lo que hubría agravado la crisis.

La Duma anunció hoy que someterá a votación el nombramiento de Primakov probablemente este viernes o el fin de semana.

``El buen sentido prevaleció esta vez'', dijo el líder comunista Guennady Zyuganov, quien pronosticó que Primakov ``recibirá un firme respaldo''.

Más cercano a los reformistas, Oleg Morozov, líder de la facción Regiones de Rusia --que votó en su mayoría a favor de Chernomirdin-- consideró también ``razonable'' la decisión del presidente.

Incluso el partido de Chernomirdin, Nuestra Casa es Rusia, ``comprendió'' la retirada de su jefe, a la vez que subrayó que fue éste quien propuso el nombre de Primakov.

Hasta el momento todos los opositores parecen dispuestos a apoyar al nuevo candidato, excepto los ultranacionalistas de Vladimir Zhirinovsky.

El portavoz del Kremlin, Sergei Yastrzhembsky, dijo a la prensa que Primakov ``es una figura que puede convertirse en una especie de símbolo de la concordia social'', al tiempo que los ministros interinos de Defensa y del Interior, Igor Sergeyev y Sergei Stepashin, hicieron hincapié en el pasado del canciller como director de la inteligencia.

Primakov es considerado un experto sobreviviente político, y en su condición de canciller desde 1996 se ha ganado el respeto de comunistas y liberales, e incluso de colegas occidentales, que lo conocen por haber negociado con el gobernante iraquí, Saddam Hussein, en un vano intento por evitar la Guerra del Golfo Pérsico.

En tanto, la retirada de Chernomirdin, primer ministro entre 1992 y marzo de este año, cuando fue destituido, constituye para Yeltsin una derrota, aunque según analistas locales su otra alternativa hubiera sido una ``confrontación a muerte''.

Además, la eliminación de Chernomirdin hace que éste desaparezca, al menos provisionalmente, del escenario político como el posible sucesor de Yeltsin.

``Hoy sólo quedan en la carrera presidencial del año 2000 tres personajes que inspiran poca confianza a los mercados: Un comunista (Zyuganov), un general (Alexan- der Lebed) y un alcalde sospechoso de estar vinculado a medios mafiosos (Iuri Lujkov)'', sostuvo un banquero occidental.

Incertidumbre económica

Mientras, los medios financieros acogieron con alivio el fin de la pulseada entre Yeltsin y la Duma: la bolsa subió más de 7 por ciento y el rublo se recuperó, con un cambio de 10.7 por dólar en el mercado intercambiario, en comparación con los 15 por divisa estadunidense de la víspera.

Pero las credenciales económicas de Primakov (un doctorado en economía en los 50) arrojó poca luz sobre las nuevas políticas que adoptará Rusia para salir de la crisis.

El Kremlin dijo que el comunista Yuri Maslyukov, ex jefe del cuerpo de planificación estatal soviético, podría estar incluido en el gabinete de Primakov, y que Viktor Gerashchenko era el candidato más realista para dirigir el Banco Central.

Gerashchenko gobernó el banco estatal soviético, y después el central ruso en un momento de hiperinflación, hasta que fue destituido en 1994, después de que el rublo perdió 30 por ciento de su valor en un día.

Al menos tres programas económicos han surgido en Rusia: uno del equipo gubernamental dirigido por el reformista viceprimer ministro Boris Fyodorov, otro de asesores del Kremlin y uno más de los comunistas.

Las propuestas comunistas darían a las autoridades fuertes controles de la economía soviética de planeación central, mientras que las del gobierno requerirían austeridad fiscal y que cada rublo en circulación esté respaldado por reservas extranjeras.

El plan del Kremlin se sitúa en un punto intermedio, al proponer un sistema de garantías estatales para las empresas y los individuos junto con la continuación de algunas reformas de mercado.

Reacción internacional

Entre tanto, la reacción en el extranjero a la nueva nominación fue cauta: Washington afirmó que espera mantener una ``buena y estrecha relación'' con Primakov, que trabajó con la secretaria de Estado Madeleine Albright, con quien llegó incluso a cantar durante una reunión diplomática.

Francia y Finlandia acogieron la designación como forma de detener el caos económico, mientras que Alemania anunció que Yeltsin dijo por teléfono al canciller Helmut Kohl que Primakov seguirá las reformas que el jefe del Kremlin empezó hace siete años.

El propio Primakov dijo a diplomáticos de la Unión Europea acreditados en Moscú que seguiría adelante con las reformas, afirmó el jefe de una delegación europea.